Guanajuato, Gto.,Dentro del “Ciclo de música y literatura” de la Orquesta Sinfónica de la Universidad de Guanajuato (OSUG) se llevará a cabo un concierto el viernes 16 de marzo a las 20:30 horas en el Teatro Principal.

En esta ocasión el músico Carlos Ortiz es el director invitado junto con el solista Pedro Zayas, violinista de la OSUG. El director huésped hizo una invitación a toda la comunidad a asistir al concierto, puesto que la OSUG está lista para tocar un repertorio para homenajear al escritor ruso Gógol.

En principio tocarán un estreno en México “A la memoria de Gógol, op. 87” de Alexander Glazunov. Respecto a esta obra el musicólogo Josep Jofré i Fradera menciona lo siguiente: “se describe como un prólogo sinfónico y fue escrito en 1909, en el centenario del nacimiento del escritor, y estrenado en San Petersburgo bajo la dirección del propio Glazunov. Comienza con un tema sombrío al estilo ruso, antes de pasar a un estado de ánimo de recuerdos más tiernos, con un himno final que desemboca en una sección de cierre grandiosa”. 

Posteriormente interpretarán “Concierto para violín en la menor, op. 82” también de Alexander Glazunov. Esta obra surgió en 1905 según algunas fuentes y se encuentra ubicado en un periodo de intensa productividad de Glazunov, entre sus séptima y octava sinfonías. Está dedicado a Leopold Auer, quien lo estrenó en la sede de la Sociedad Musical Rusa de San Petersburgo, el 15 de enero de 1905, bajo la dirección del propio compositor. Se estructura en los tres movimientos habituales de la forma concierto, pero estos se suceden de manera ininterrumpida. 

Para finalizar con el concierto, los asistentes podrán escuchar Taras Bulba de Leos Janacek. La historia de Taras Bulba tiene lugar en 1628, durante la guerra entre Ucrania y Polonia, y evidencia el paralelo de ésta con la esperanza de los checos de lograr su independencia y el final de la monarquía austrohúngara.

El compositor se centra en tres episodios clave de la obra de Gógol, y su descripción musical de estas secciones son detalladas y específicas: la muerte de los dos hijos de Taras, Andrei, que ha traicionado a su pueblo por el amor de una joven polaca y a quien mata su propio padre; y Ostap, hecho prisionero por los polacos y torturado públicamente. Y finalmente la muerte del propio Taras, hecho prisionero y quemado vivo.