martes. 23.04.2024
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Hipertensión en el embarazo riesgo para la salud de madre e hijo

Hipertensión en el embarazo riesgo para la salud de madre e hijo

León, Gto. Sin un estricto control médico la hipertensión arterial y el embarazo se convierten en una combinación mortal para el binomio madre-hijo, porque alrededor de la semana 20 de gestación, favorece que se presente la preeclampsia-eclampsia, la cual daña el hígado, los riñones y el cerebro, afecta la coagulación de la mujer, produce envejecimiento prematuro de la placenta y disminución de líquido amniótico, que puede interrumpir la gestación.

El doctor Arturo Hernández, coordinador auxiliar de Prevención y Atención a la Salud, del IMSS, en Guanajuato, destacó que el control prenatal ayuda a detectar oportunamente la hipertensión materna, padecimiento que causa retraso en el crecimiento del bebé, lo cual se corrobora con un estudio para valorar su madurez pulmonar, y así brindarles atención multidisciplinaria a fin de prolongar la gestación al menos hasta la semana 34.

Antes de la semana 28 de embarazo, precisó, las posibilidades de que sobreviva un bebé son prácticamente nulas, aun cuando se le den medicamentos inductores de madurez pulmonar.

Refirió que los factores de riesgo para desarrollar hipertensión, la cual presentan entre el 15 y el 20 por ciento de las mujeres que se embarazan, son: tener obesidad, diabetes; más de dos gestaciones, aunque desde la primera puede ocurrir; embarazo antes de los 20 años de edad o después de los 35, así como tener familiares que la hayan padecido.

Explicó que tanto en la mujer que ya padece hipertensión como en la que la adquiere durante el embarazo se puede desencadenar la preeclampsia-eclampsia. En el primer caso se presentan más rápido las complicaciones porque ha tenido la enfermedad por más tiempo y se quedará con hipertensión toda su vida.

La que se volvió hipertensa  durante el embarazo y se le complicó con preeclampsia-eclampsia tiene entre el diez y el quince por ciento de riesgo de quedar hipertensa después del parto y con daño renal permanente.

Si se afectan otros órganos y sistemas, se presentan cuadros más agudos; por ejemplo si fue el sistema nervioso central, habrá crisis convulsivas, y si se altera el hígado padecerá dolor hepático y hematoma que puede romperse y sangrar.

Destacó que a pesar de que una embarazada con hipertensión se mantenga bien vigilada y controlada, de todas maneras existe el riesgo de una preeclampsia-eclampsia porque se trata de una complicación impredecible. Sin embargo, la detección oportuna permite dar la atención adecuada para disminuir el riesgo de muerte del binomio madre-hijo.

A las mujeres que ya son hipertensas y quieren embarazarse les recomienda tener buen control dietético, peso corporal adecuado, consumir poca sal y tomar muchos líquidos; así como practicarse los exámenes médicos que permitan detectar alguna alteración para corregirla. Así su embarazo empezará en las mejores condiciones.

Para las que no son hipertensas y piensan embarazarse, recomendó que tengan una revisión médica completa, porque quizás haya factores que las ubiquen en un rango de predisposición a la enfermedad. Y las que ya están embarazadas, aunque no tengan factores de riesgo, deben bajar el consumo de sal, ingerir muchos líquidos y evitar alimentos “chatarra”, concluyó.