León, Gto. El llamado golpe de calor es un cuadro clínico grave que pone en peligro la vida: se produce cuando la temperatura corporal se eleva por encima de los 40 grados centígrados, lo cual requiere de atención médica inmediata.

Suele afectar, por un lado, a personas que realizan actividad física intensa, conocido como golpe de calor por esfuerzo, pero también afecta a los adultos mayores y personas enfermas; en este caso se conoce como golpe de calor clásico.

Juan José Ruiz García, médico urgenciólogo, indicó que “además de alta temperatura pueden presentarse náuseas y vómito; a nivel neurológico cefalea, confusión, disminución del estado de conciencia, convulsiones e incluso estado de coma”.

El médico adscrito al Hospital General de Zona No. 21, del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en León, Guanajuato, agregó que también llega a presentarse sudoración profusa, calambres, fatiga, debilidad muscular, respiración rápida y superficial, además de pulso débil.

Para su tratamiento, primero hay que retirar la ropa y remojar al paciente, humedecer las sábanas en las que se encuentra y de preferencia acercar un ventilador para lograr el enfriamiento del cuerpo. Asimismo, indicó que se deben colocar compresas con agua fría. Lo recomendable, resaltó, es acudir al servicio de urgencias al identificar los síntomas mencionados.

Para prevenir el golpe de calor hay que hidratar el cuerpo adecuadamente, sobre todo al realizar ejercicio; evitar ambientes calurosos, no exponerse al sol en las horas de mayor calor, evitar permanecer demasiado tiempo dentro del auto cuando éste se encuentre estacionado y utilizar ropa ligera y holgada, de preferencia en colores claros.

Recomendó que los lugares en los que se permanece estén bien ventilados y con una temperatura adecuada, utilizar gorra, sombrero o sombrilla al exterior, evitar la ingesta de bebidas alcohólicas, con cafeína o muy azucaradas. Por último, exhortó a la población a consumir frutas y verduras además de no ingerir bebidas calientes.