El glaucoma es un conjunto de enfermedades que se caracteriza principalmente por un daño en el nervio óptico, generando una neuropatía progresiva, teniendo como consecuencia la reducción del campo visual, siendo el mayor factor de riesgo la hipertensión ocular. Es una enfermedad crónica, degenerativa e irreversible.

La doctora Ivette Rojas Candelas, encargada del servicio de Glaucoma, del área de Oftalmología de la Unidad Médica de Alta Especialidad (UMAE) No. 1, del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), comentó que “los factores de riesgo son: padecer hipertensión arterial, diabetes mellitus, antecedente familiar de glaucoma, tener más de 60 años de edad, así como la miopía”.

Mencionó que el glaucoma es una enfermedad silenciosa, conocida como “el ladrón de la vista”, debido a que el 70% de los pacientes no presentan sintomatología, por lo que acuden a revisión con pérdida de visión irreversible.

Existen diversos tipos de glaucoma y algunos de ellos sí presentan síntomas como dolor ocular y de cabeza, ojos rojos y disminución de agudeza visual, además de  presencia de  halos (efecto óptico en forma circular con las luces), aunque, volvió a resaltar, la mayoría de los casos son asintomáticos.

Al detectarse en fases tempranas es controlable, no es curable; se utilizan tratamientos médicos para que no avance la enfermedad, buscando que el paciente no pierda la visión.

La especialista del IMSS refirió la importancia de la revisión oftalmológica en la población en general a partir de los 40 años de edad, pero sobre todo en pacientes con hipertensión arterial y diabetes mellitus, así como quienes tienen antecedente familiar , sobre todo por parte de la madre, incluso deben revisarse a edades más tempranas.

Estadísticas indican que el glaucoma afecta hasta un 4 por ciento de la población, es una de las primeras causas de ceguera irreversible en México y en la UMAE No. 1 del IMSS el 40 por ciento de los pacientes atendidos en el servicio de oftalmología, es por padecer glaucoma.