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Llevarán al aula recomendaciones de simposio Arte y Educación

Llevarán al aula recomendaciones de simposio Arte y Educación

Guanajuato, Gto. Durante el Simposio Interdisciplinario de Arte y Educación, enmarcado en la Ley para una Convivencia Libre de Violencia en el Entorno Escolar para el Estado de Guanajuato y sus Municipios, se dieron cita 15 personalidades académicas y reconocidos artistas nacionales, así como la participación de 1,100 docentes de educación básica y público en general. 

Víctor Manuel Espinosa Miranda, director general para la Pertinencia y la Corresponsabilidad de la Educación, de la Secretaría de Educación de Guanajuato, indicó que los ponentes de dicho Simposio propusieron recomendaciones que pueden implementarse en el ámbito educativo en general, con la idea de contribuir a la mejora de la calidad educativa y a la construcción de sociedades más pacíficas mediante la educación artística. 

Las acciones y recomendaciones generadas en el III Simposio Interdisciplinario Arte y Educación que se implementarán en las aulas, son entre otras: 

Desarrollar un programa para los docentes donde se aborde al arte y su relación con la cultura como parte del proceso educativo; asimismo, entender al arte no sólo como una posibilidad de comunicación sino como una posibilidad de apertura, recepción y reconocimiento del otro.

También, la divulgación del arte como el desarrollo de actividades artísticas y como la posibilidad de desarrollar capacidades, habilidades en los alumnos para la comprensión de sí mismos, del mundo y la comunicación con el otro; recurrir al arte para posibilitar la expresión y la comunicación del individuo, además de propiciar la reflexión del entorno social en el que se vive.

Dejar de pensar en el arte como la obra del genio, sino del tiempo que nos tomamos para estar juntos, para poder generar la transformación del arte como tal, así nos deben interesar las prácticas artísticas más que el circuito del arte y la forma en que éstas generan la transformación de la sociedad.

De la misma forma, llevar a cabo metodologías evocativas y no directivas, en las que alumnos, familias, profesores e investigadores realicen ejercicios de co-autoría que resulten significativos en los ámbitos educativos, comunitarios o sociales; además, documentar y sistematizar todo el conjunto de producciones escolares infantiles, siendo éstas narraciones, dibujos, relatos, genealogías, manuales escolares, diarios, fotos, materiales elaborados por los propios alumnos que permitan posicionarlos frente a la historia.

Es importante que la visión de la historia personal y familiar que tengan los alumnos pueda complementarse con la historia oficial.

De igual manera, recurrir a metodologías de intervención educativa y pedagógica innovadoras en las que se propicie la participación de todos por igual y se ceda la voz a los niños y niñas; recuperar los saberes sociales y los saberes escolares que poseen los alumnos y vincularlos para enriquecer los procesos educativos de enseñanza y aprendizaje. Reconocer que los ejercicios de autoría infantil muestran un camino complementario a la currícula escolar.

Llevar a cabo la asamblea como una herramienta de trabajo, ya que es un acontecimiento de saberes y conocimientos de grupos específicos. La asamblea permite diluir las jerarquías de maestro-alumno; es posible aprender los unos con los otros. 

Asimismo, elaborar material didáctico como las tequiografías (elaboradas mediante el tequio, que se trata de una práctica comunitaria en la que se presta un trabajo no remunerado en beneficio colectivo), a partir de las necesidades específicas del contexto. Este material puede funcionar como ejercicios de autorrepresentación, el cual contribuye al empoderamiento y cohesión del grupo, así como a preservar conocimientos para ponerlos en práctica en la vida cotidiana.

Relacionarse a partir y directamente con el contexto, mediante el juego; el juego permite cuestionar las cosas que se dan por sentadas y posibilitan una nueva creación. Ser consciente de que el arte puede estar presente en todo tiempo y espacio, es necesario vincularlo con prácticas relacionadas a otros conocimientos, producir en un ambiente interdisciplinario y trabajar de manera colaborativa. La enseñanza artística deber ser horizontal y no vertical. Debe ser una experiencia compartida más que una lluvia de datos, el maestro debe actuar como cómplice. 

Las nuevas tecnologías son fundamentales para la difusión, el intercambio y la producción del conocimiento y del arte, así como para proceso enseñanza/aprendizaje. Es importante usarlas de manera responsable y vinculada con el contexto social y cultural. Una estrategia fundamental es la promoción de una cultura científica y tecnológica que permita el desarrollo de las capacidades, habilidades y la reafirmación de valores e identidad cultural que guíen las formas de usar las TIC´s. 

El maestro debe ser un guía que ayude a explorar las capacidades artísticas de sus alumnos. No hay una forma ideal para enseñar el arte a los alumnos. Los talleres deben ser libres para los estudiantes, ya que los alumnos también son maestros.  

Escuchar el interés del alumno y la manifestación artística que los alumnos ya tienen e incorporarlos como estrategias. Es necesario motivar al estudiante para que desarrolle una pasión por la lectura. Sobre todo, es necesario agregar la poesía en la educación básica. Los maestros deben motivar desde la educación básica a los niños a hablar, a expresarse. No hay que callar a los niños. Hay que inculcar a los niños a expresarse críticamente.

En lugar de pensar en el arte como un producto final, es necesario replantearlo como un proceso donde el convivir, compartir, aprender, enseñar, trabajar, jugar y colaborar forma parte importante de la creación. 

Es posible imaginar el salón de clases como una comunidad pequeña, que se integra de alumnos y profesores, por lo tanto el trabajo del profesor es crear un ambiente donde prevalezcan las relaciones simétricas y realizar una experiencia distinta cada vez para compartirla con todo el salón simplemente por hacerlo, sin que exista una calificación de por medio, compartiendo también así sus perspectivas y reflexiones.