Es lo Cotidiano

VIBORERO

Pedro Lemebel | Háblame de amoresUn diálogo, un encuentro fortuito, un compañero de viaje, un aeropuerto, un museo, un rincón de la ciudad, un pasajero del metro, una calle, un recuerdo de infancia, una mujer, un amor pasajero; estos son los destellos que dan vida a esta nueva recopilación de crónicas de Pedro Lemebel. Con su pluma barroca, crítica y voluptuosa, el autor va fotografiando escenas de los días presentes y pasados, completando una obra que con Háblame de amores  se consolida entre las más originales del panorama literario latinoamericano.

Desde que se dio a conocer dentro y fuera de Chile con sus textos y las performances de las Yeguas del Apocalipsis, Lemebel se ha mostrado irreductible. ¿Qué le pueden argumentar de nuevo, qué le pueden decir que no se haya dicho? ¿Cómo sorprender al que se ha examinado con metáforas y “descaro” a una sociedad que sólo admitió la diversidad al sometérsele a la peor uniformidad? Al incapaz de engaño no se le vence con injurias y menos aún con expulsiones del Sancta Santorum de la decencia, que para Lemebel nada más es una institución patética del autoengaño.

Carlos Monsiváis

Ernest Hemingway | París era una fiestaPublicada póstumamente en 1964, París era una fiesta es la obra más personal y reveladora de Hemingway, quien, ya en el crepúsculo de su vida, narra aquí los dorados, salvajes y fructíferos años de su juventud en París de los años veinte en compañía de escritores como Scott Fitzgerald o Ezra Pound, la llamada “generación perdida”, según la popular denominación acuñada en aquella época por Gertrude Stein, mítica madrina del grupo.

Crónica de la formación de un joven escritor, retrato de una ciudad perdida, oda a la amistad y verdadero testamento literario, París era una fiesta es uno de los libros capitales para entender el siglo XX, así como el universo y la personalidad de uno de sus más grandes creadores.

“Te he visto, monada, y ya eres mía, por más que esperes a quien quieras y aunque nunca vuelva a verte, pensé. Eres mía y todo París es mío y yo soy de este cuaderno y de este lápiz”.

Vicente Rojo | Diario abiertoDesde sus primeros trazos, la obra virtual de Vicente Rojo se ha caracterizado por un rigor y una pasión tocados siempre por poesía. Con la publicación de Diario abierto descubrimos en este artista a un escritor cuya voz también colinda con la poesía. En estas páginas luminosas, se reúnen diversos textos que a lo largo de los años ha publicado Vicente Rojo en libros, revistas o suplementos culturales, recogidas recientemente en su monografía de más de cuatrocientas páginas titulada Puntos suspensivos, donde se despliega su obra de pintura y escultura. Aquí, el autor narra brevemente sus historias, enumera de manera íntima sus temas, creencias, predilecciones, traza una estética y menciona a algunas figuras admiradas. En estos textos conformados a partir de las respuestas que ha dado en diversas entrevistas periodísticas, el pintor ejerce el oficio de escribir. En la segunda parte, Vicente Rojo expone su sistema de trabajo, centrado en las ocho series que ha realizado hasta este momento, mientras en la parte final, a la manera de un diario público, se recogen los acercamientos, retratos personales y celebraciones que ha dedicado a artistas, escritores y poetas.