“Debemos orientar nuestra literatura, en primer lugar, a adquirir calidad y oficio y simultáneamente a responder en forma generosa y apasionada a los intereses más profundos del hombre en trance de salir del mundo de tinieblas que nos rodea”. José Revueltas

Tengo un amante muy perverso, entregado, siempre dispuesto. Que me enseña de la vida, de fogosidades y del verdadero amor. Sí, adivinaron, mi apasionado amante es la literatura. Hoy me entregaré a unas nuevas letras, porque siempre están los clásicos para volver a ellos y hoy es tiempo de indagar en diferentes lugares, desde Tijuana hasta Morelia. Hoy es tiempo de sentir el ardor, no sólo en lo sublime sino dejarnos seducir por una buena cumbia al calor de Torreón.  

Dicen que todo ya está escrito, quizá porque la vida es la misma. Pero ahora ya no somos los mismos, lo sé, lo he visto a través de los libros y ahora los invito a verlo a tráves de mis escritores invitados. Entre poetas y narradores que son como esos dulces papelitos sublinguales, que al dispersarse en el paladar del lector nos muestran el color con el que ven la realidad, esa falsa realidad inverosímil en la que vivimos. Donde la libertad fue arrebatada por unos barrotes, por la masturbación mental del materialismo, el desamor, la soledad y el silencio autoimpuesto. Caminemos juntos en busca de ese abrazo que ni siquiera una puta nos dará, perdamos la razón para encontrarnos a nosotros y a los demás que dicen estar ahí, o simplemente paseemos por la cotidianidad como el jardín enajenado que es. No, no me imagino  sin ser seducía por las letras. ¿De qué otra forma podría sumergirme y deleitarme en la vida misma?

Dieciséis variantes de ácido delicioso, dieciséis autores jóvenes. Esto es lo que comparto con ustedes: sabores, visiones y a mi apasionado amante que me mantiene cálida, húmeda y sumergida en la realidad sin tener que ser parte de ella. Mi mano está extendida. Es el momento adecuado para darnos la oportunidad de probar lo que estamos escribiendo. Como vemos la vida en el Distrito Federal o Durango, desde la inquietud de los veintidós años hasta la de los cuarenta y tantos. Sólo déjate seducir, coloca uno a uno estos dulces bajo tu lengua, y comienza el viaje con el más fiel de los amantes.

Tania Plata, editora invitada para este número de Tachas.

Tania Plata (D.F., 1983) Ha escrito los volúmenes de cuento El Desierto de Diana y otras chicas Playboy (ICED 2010), Soundtrack (ICED 2013) y Malcriadas miniatura (Nitro/Press). Ganó el premio Estatal de cuento Olga Áreas en 2006; se gastó el dinero en zapatillas. Actualmente radica en Durango, sufriendo por no tener el peinado perfecto.