Es lo Cotidiano

Verde

Paulina Quintana

No sé dónde están las cartas
Preciso decirte que están por ahí
En alguna caja sellada entre papeles que no urge encontrar
Las letras que escribiste para mí
Las que preferí sentir a memorizar
Salen de esos lugares que no sé
Para observarme con minuciosidad en cada espacio de la casa nueva
Me siguen en la ducha, mientras duermo y despierto
Al vestirme
Al desnudarme
Cuando lavo la ropa y los trastes
Y en la calle mientras camino
Debo confesarte que no siempre son la sorpresa festiva que deseo
Las palabras de amor que escribiste para mí ayer
Son un fantasma que se multiplica y me sigue a cualquier lugar.
Es de una omnipresencia tal que huele a verde
A pasto recién cortado
Ese olor me recuerda que estuviste aquí
Que nos amamos a horas y deshoras
Que nuestros pies corrieron y se corrieron juntos
Bailaron
Soñaron
Nadaron
Viajaron
Fueron dos pares de pies en una cama alimentando el alma
Desayunamos comimos cenamos y nos besamos entre comidas.
Las palabras de amor que escribiste para mí y que no encuentro para leer ahora
Son la brújula de esta sombra que me sigue.
Mañana al salir cuando llegue al centro voy a virar para verla de frente
Después cruzaré rápido la calle para que me pierda de vista.
Al volver a casa borraré el número en la fachada.
Deseo que tus palabras de amor no me encuentren más.

Guanajuato, septiembre 2014.