viernes. 19.04.2024
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El señor Ojos Solitarios

Javier Morales i García

El señor Ojos Solitarios

Chris Farlowe fue, es, uno de los poseedores de la voz más llena de alma de los cantantes blancos de rhythm and blues.

Nacido John Henry Deighton en 1940, sus primeros pasos fueron con una banda llamada Johnny Burns Rhythm and Blues Q’tet, pero adquirió cierta fama temprana al ganar en 1957 el campeonato de skiffle que reunía a los mejores de Inglaterra y que se celebró en el Mecca Ballroom de Tottenham. Cómo no, era parte de The John Henry Skiffle Group y junto a él estaban Bobby Taylor a la guitarra, Johnny Wise en la batería y Ricky 'The Mouse' Charman al bajo.

Por aquel año, el skiffle aún estaba sonando pero el rock’n’roll y grupos como The Johnny Burnette Trio empezaban a ser los favoritos de la juventud británica. Se requería un cambio de estilo así como un cambio de nombre. Nuestro héroe se convirtió, por fin, en Chris Farlowe para el resto de la historia. Farlowe por el guitarrista de jazz Tab Farlow, y Chris porque a un amigo le pareció que así sonaba muy bien.

La banda tomó el nombre de The Thunderbirds porque era el coche que más le gustaba a Chris. Esta formación, junto al organista Vic Cooper que se les unió en 1961, viajó por toda Inglaterra tocando esa música nueva y sumando seguidores.

La voz de Farlowe, una mezcla entre la de Ray Charles y la de Little Richard, no tenía comparación y, musicalmente, no tenía competidores.

En 1962 empezaron a tocar con asiduidad en el londinense Flamingo Club, de Wardour Street. Allí el público estaba acostumbrado al soul y al jazz… y al genial Georgie Fame, claro. Pero el público conectó enseguida con el Thunderbird Sound.

Algunos cambios de instrumentos fueron necesarios, como olvidar el viejo contrabajo y comprar un Fender y conseguir un nuevo teclista, Dave Greenslade que venía de The Westminster Five. Bobby Taylor dejó vacante el puesto de guitarrista al marcharse para convertirse en actor, y el recambio fue Albert Lee. Esto hizo que el repertorio cambiara: menos rock y más jazz mezclado con rhythm & blues. A diferencia de otros grupos que tocaron en el Flamingo, los Thunderbirds no abusaron de la sección de vientos, pero habría que nombrar a Dave Quincey y un tal Bernie que les acompañaron alguna vez con sus trompetas.

A finales de 1963, con el movimiento Mod en plena explosión, el grupo no paró de tocar en locales sudorosos, fiestas y allnighters de todo el Reino Unido. También tuvieron su público en varias bases aéreas norteamericanas. Grabaron varios singles con Decca en diferentes sesiones, acompañados por el pianista Nicky Hopkins echándoles una mano.

En 1964, Ricky 'The Mouse' Charman y Johnny Wise dejan al grupo y entran 'Bugs' Waddel e Ian Hague, amigos de Albert Lee en otras formaciones. También se hacen acompañar de vez en cuando de un percusionista llamado Jerry Temple. Ésta será la formación definitiva, una de las más excitantes bandas en vivo de todo el país, por aquel momento.

Por encima de todo destacaba la voz de Chris Farlowe, pero no hay que olvidar al guitarrista Albert Lee. Hay fotos de conciertos de Farlowe & The Thunderbirds, y en las primeras filas se puede ver a un joven amigo de Lee, aprendiendo sus técnicas y sin perderse un detalle: era Jimmy Page.

El grupo seguía teniendo mucho éxito en los clubs pero comercialmente no eran rentables para ningún sello. Las cosas cambiaron cuando dos de los mayores fans de Farlowe hicieron su aparición: Mick Jagger y Keith Richards convencieron al capo de Immediate Records, Andrew Loog Oldham, para que contratara al cantante. Aquel era un contrato para él solo; esa fue la pena, por decirlo de alguna manera.

El punto culminante llegó con un nº 1. Era el verano de 1966 y la versión de la canción de The Rolling Stones Out of Time sonó en todos lados. Farlowe hizo una obra maestra, una muy personal versión de aquel precioso tema que hablaba de una chica que ya llega demasiado tarde para rehacer una relación. Esa voz casi rota de Farlowe le ponía el punto de tristeza justo. Aún hoy en día, se me hace difícil elegir entre esta y la original forma de ver el clásico. Tal vez lo que en Farlowe era nostalgia y tristeza, en Jagger era simple rabia adolescente. Tal vez con los Stones dan ganas de bailar y con Chris a uno le llena una sensación de vacío tremenda. Haz la prueba y verás.

A esta canción le siguieron varios singles maravillosos pero no más éxitos en las listas. Este contrato con Immediate duró hasta 1969 y, a pesar de que había sido para Farlowe en solitario, The Thunderbirds siguieron tocando con él en los clubs; esta misma formación duraría hasta 1967. Después, el primero en dejarlo fue Ian Hague, que se unió a unos primeros The Nice, hasta ese momento acompañantes de P.P. Arnold para los conciertos.

El nuevo miembro de los Thunderbirds fue Carl Palmer, que había estado en The Bees, una banda de rhythm & blues de Birmingham. 'Bugs' Waddel se convirtió en músico de sesión, huyendo de la nocturnidad y prefiriendo algo de seguridad. Dave Greenslade se fue a la Ram Jam Band, después a Colosseum y en la década de los 70 formó sus propios grupos con mayor o menos éxito. Farlowe sustituyó a sus amigos con Pete Solley a los teclados. Solley utilizaba un pedal que sustituía la falta de bajista, Jerry Temple también había desaparecido de la formación y se había llevado sus congas y otras percusiones.

Este nuevo line-up duró hasta el principio de 1968, cuando un Farlowe sin nuevos éxitos decidió romper la banda. También había un deseo de hacer otras cosas, otros sonidos ya estaban en el ambiente. El genial guitarrista Albert Lee se había enganchado al country y ayudó a la formación de lo que sería el primer grupo británico de country rock: Country Fever. Pete Solley estuvo en varias bandas y Carl Palmer, tras acompañar a Arthur Brown en su éxito Fire y estar en Atomic Rooster, se haría una megaestrella del rock sinfónico con Emerson, Lake and Palmer.

Chris Farlowe se tomó un tiempo fuera de la farándula y volvió en 1970 a unos reforzados Colosseum junto a Dave Greenslade. Cuando se separaron definitivamente en 1971, también colaboró con Atomic Rooster. Desde 1973, ya se tomó todo con más calma, cantando esporádicamente aquí y allá.
Nunca se fue del todo pero el comeback definitivo llegó a la mitad de los 80, con unos renovados Thunderbirds y el LP Out of The Blue que recibió unas críticas estupendas. A este le siguió otro disco, Born Again, que estaba producido por el batería Mike Vernony, en el que se rodeó de músicos como Mo Witham a la guitarra, Ian Gibbons a los teclados y Dave Bronze al bajo, entre otros amigos.

En 1987, Farlowe colaboró con Jimmy Page y su disco en solitario. Otra vez de vuelta a las giras. Otra vez en los circuitos de siempre.

Buzz with the fuzz

EMI, Decca, Inmediate, Columbia y Brand New Records fueron los sellos discográficos donde grabó Chris Farlowe sus discos. Numerosas reediciones han mantenido el espíritu vivo. Los coleccionistas de vinilo se vuelven locos buscando un single de la Decca del año 1965, en que Farlowe y los suyos grabaron bajo el nombre de The Beazers. En este disco salían los temas The Bluebeat y I Wanna Shout en la cara B.


 

Hablando de Buzz with the Fuzz, que fue single para la Columbia y que es un tesoro de coleccionismo, se puede decir que fue una de sus mejores grabaciones de aquella época y que se convirtió en un himno mod de todos los tiempos. Según algunos era una apología de las anfetaminas; según otros, del sexo salvaje. Fue editado en el mes de mayo de 1965 y a alguien en el sello discográfico le tuvo que dar un ataque de pánico cuando se enteró del supuesto significado de la canción compuesta por Bailey y Greenwood. Dos semanas después el single fue retirado de las tiendas y la reputación en el underground estaba servida. Aún años después, es difícil conseguir este tema en vinilo, tal vez en alguna recopilación en CD (¡malditos comediscos!)


Una última curiosidad: en 1965, Farlowe & the Thunderbirds grabaron una sesión en dos partes con el clásico del blues Stormy Monday y salió editado con el nombre de Little Joe Cook en el sello Sue, que estaba especializado en música negra. En fin, era un intento de hacer pasar a Chris Farlowe como si fuera un soulman negro de orígenes norteamericanos.


Ha sido un largo camino el de John Deighton y la voz sigue ahí: es la voz de uno de los mejores cantantes de rhythm & blues que han salido de Inglaterra. El R&B de ojos azules tiene su rey: Chris Farlowe. Sin nostalgia.


Gracias, Señor Ojos Solitarios.

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Javier Morales i García (Tenerife, España) es editor del fanzine Ecos de Sociedad, la publicación mod más longeva en Europa. Desde inicios de los 80, escribe, reseña y edita; hoy, Ecos puede leerse en ecos-de-sociedad.blogspot.com.es. Es obseso de la música y el cine.

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