Es lo Cotidiano

GUÍA DE LECTURA

El Caballero del desierto, de Omar Delgado

Jaime Panqueva

El Caballero del desierto, de Omar Delgado


Ganó Trump muy a pesar de millones de latinos y mexicanos. Como una de las consecuencias en un corto plazo, si es que el multimillonario tiene palabra, veremos a la migra gringa peinando calles y campos para deportar connacionales en cantidades nunca antes vistas. Ante el panorama desolador que se perfila, nada como la recomendación de esta semana: un thriller ubicado en la frontera norte. Utilizo el término thriller porque El caballero del desierto de Omar Delgado (Siglo XXI, 2011) está escrito con maestría en la clave del suspenso que no envidia las creaciones anglosajonas de autores como McCarthy, y sus novelas de la frontera, capaces de mantener en vilo al lector hasta la última línea.

Qué mejor ante la amenaza que se cierne sobre aquella zona que adentrarse en las aventuras de Pablo Disaki, un pollero (quizás el único en su especie) de férreos principios, prófugo de la justicia norteamericana, que busca la ayuda de un ex-miembro de la Border Patrol, Alexander Cohen, para que le ayude a librar de la muerte a un grupo de migrantes secuestrados por un antiguo comando de los Zetas. La otrora impensable alianza, que supera también las diferencias religiosas, deberá enfrentarse además de las autoridades estadounidenses, a los despiadados cazamigrantes liderados por McKeena, un antiguo combatiente de la guerra del Golfo. Al coctel súmele el sol y las arenas del desierto de Arizona, un teniente corrupto de la migra, los inescrupulosos polleros enemigos de Disaki, y tendrá una historia que nos deja a la espera de una secuela o, por lo menos, de una adaptación cinematográfica muy necesaria ante los bodrios romanticones y sosos que se están estrenando esta temporada en las salas de México. Novelas como Bajo el cielo de AK-pulco (ver guía 197) o El caballero del desierto son novelas de un gran temple ético escritas sin evadir las duras perspectivas de nuestra realidad nacional. Hay que destacar la gran capacidad de Delgado para poner a sus héroes en situaciones límite donde los hombres comunes ceden con premura hacia el lado más fácil. Una de las frases de su epílogo resume con exactitud estos dilemas: “...en ciertas épocas, cuando las palabras ley y justicia se vuelven antónimas, el hombre recto es, precisamente, el forajido.” Una gran lectura para habitantes de ambos lados de la frontera.

 

Comentarios a mi correo electrónico: [email protected]

Twitter: @jaimepanqueva

[Ir a la portada de Tachas 182]