La muerte viene por nosotros. Tachas sabe de lo escurridizo que es el vivir y del profundo misterio, insondable, inadmisible, que es la muerte. Hoy jugamos a hablar de la muerte y de algunos personajes a través de textos y calaveritas, calaveritas y textos, textos que son calaveritas.

Norma Angélica Andrade Haro le cimbra el esqueleto a Gabriel García Márquez y Michelle Burnett Aguilar nos habla de la muerte en un cuento de un tal Chaucer.

Cándida Azucena Rivera Galván cuelga y descuelga a Mario Vargas Llosa y de paso lo chaviza, mientras Sara Andrade le pica los ojos a un tal Chaucer y Adso Eduardo Gutiérrez Espinoza rescata del Bósforo a Orhan Pamuk.

Alejandro García reconoce la sabiduria de Bradbury, más allá de los pleitos entre muertos y Halloween, y ademá limpia la osamenta de Fernando del Paso.

Miguel Donoso Pareja nos versa y nos conversa el Regreso y esa oscura línea entre la vida y la muerte.

Elizabeth M. Murcia nos insufla el Sopor con posible cadáver de por medio, Eduardo Santiago Rocha Orozco le abolla la sonrisa Elmer Mendoza y Hugo Mondelo pasea las enseñanzas de Ariel Muniz.

Zoar Román descalcifica a Juan José Macías y Jesús Madrigal Melchor y Raúl Alberto Reyes Villagrana hacen un matadero de teorías.

Caleb Landaverde deshuesa a Juan Villoro e Isaac Raúl Zepeda Romo insepulta Fellini.

Felipe Andrade hace chocar los huesos Peña Nieto, maestros, por México y selección de futbol. En el colmo del delirio fúnebre Alejandro García es fusilado por Marisela Andrade Haro, Elena Bernal Medina, Filiberto García, tachándolo de este mundo. Para sacar el pañuelo y llorar a mares, don Marcelino Díaz Idem, limpia la tumba bien ganada de Leopoldo Navarro. Viborero acompaña con fúnebre marcha.