jueves. 18.04.2024
El Tiempo
Es lo Cotidiano

Open, high, apart

Andrés Baldíos

beso
Open, high, apart - Andrés Baldíos
Open, high, apart

Se miran para darse un buen beso.

Luego de haber estado durante mucho tiempo uno al lado del otro con vistas fijas a distintas esquinas del cuarto, tratando de distraerse de sus presencias, al fin voltean para verse. Sus miradas no se encuentran; por el contrario, sólo se ven, de par de ojos a par de ojos, mecánica del consabido estímulo de ver por el hecho de poder ver.

Son la pareja ideal, de verdad, cualquiera lo diría; cualquiera podría ver a estos dos en la calle y apostar que podrían ya pertenecerse para siempre, atinar que son un precioso par a la medida de lo ideal, que sus destinos ya están figurados en compartirse el resto de su vida. Son la pareja perfecta, se diría, pero eso depende sólo de ellos.

Acercan sus caras sin dejarse de ver a los ojos. Sienten el choque de labios y producen algo así como un apretón de manos meramente amistoso. Mueven la boca, están en pleno proceso de restricción de alientos y no remueven su mirada a los ojos. Hay saliva y hay trago, hay dos lenguas restregándose típicamente, como un par de babosas en apareamiento. Luce lindo desde cierta distancia. No podría pensarse de otra forma, porque así son los buenos besos. Dos socavones abiertos al máximo se apretujan mutuamente y dejan que la naturalidad haga de las suyas. Minutos más tarde se separan para llegar a la conclusión de que no, ya no puede ser, ya no hay nada detrás de todo, debe desintegrarse la circunstancia. Lo más angustiante de todo es que ninguno sintió absolutamente nada.

Vuelven sus vistas a los rincones por el hecho de poder hacerlo.

Cuando una pareja no logra congeniar simplemente no suceden muchas cosas.

 

***
Andrés Baldíos
es escritor. Los primeros peldaños son peligrosos, su hasta ahora primer libro de cuentos, fue editado en 2012 por San Roque.

[Ir a la portada de Tachas 275]