Es lo Cotidiano

GUÍA DE LECTURA

Mientras escribo, de Stephen King

Jaime Panqueva

on-writing-4
Stephen King, On writing
Mientras escribo, de Stephen King

Amado y odiado por lectores y críticos (podría decirse, respectivamente), Stephen King rebasa las fronteras de lo literario y comercial para ingresar sin dificultades en el terreno de lo sociológico. Pocos escritores pueden presumir de su productividad y capacidad para vender sus historias. A lo largo de más de cuatro décadas ha publicado más de 60 novelas, diez colecciones de cuentos y media docena de textos de no ficción. Pero no se trata sólo de volúmenes; aunque se le encasilla por lo general en género de terror, ha abordado diferentes subtipos de ficción narrativa.

Es común escuchar críticas contra sus novelas. célebre fue la protesta del gran académico Harold Bloom, quien criticó la entrega de la medalla del National Book Foundation con palabras como: “extraordinario, otro punto bajo en el aterrador proceso de atontar nuestra vida cultural.”

King en numerosas entrevistas acepta ser rechazado por el ámbito intelectual, que lo considera un reportero mediocre (hack) cuyo trabajo es apreciado por demasiadas personas.

Quien haya sucumbido al poder de su suspenso, a los retos que afrontan sus personajes o a las atmósferas escalofriantes u opresivas, comprenderán que King domina elementos narrativos esenciales para conferir verosimilitud y contar historias que involucran al lector. Hace casi 20 años, tras un accidente que casi le cuesta la vida, publicó un libro autobiográfico donde comparte sus opiniones y experiencias acerca de la escritura de ficción. Mientras escribo, en inglés On writing, me parece un libro atractivo para quienes admiran el trabajo de King y desean conocer más de cerca su mundo y proceso creativo, que para muchos puede parecer demasiado pragmático, pues carece de musas o elementos románticos. Sin embargo, me parece un texto recomendable y honesto. Al inicio King comenta: “He escrito un libro corto porque a la mayoría de los libros sobre la escritura les sobra paja y tonterías. Los narradores no tenemos una idea muy clara de lo que hacemos. Cuando es bueno no suelen saber por qué y cuando es malo, tampoco.”

No sabemos cuánto tiempo más King mantenga este ritmo de dos novelas publicadas cada año. Hasta el momento ha sobrevivido a muchos de sus críticos tras servir por décadas como un espejo de lado siniestro de la sociedad norteamericana. Quizá On writing rebosa de anécdotas personales, pero también de consejos que pueden ser útiles a quienes desean entrar en el oficio de la escritura y conocer la tramoya del rey.

 

[Ir a la portada de Tachas 332]

Comentarios a mi correo electrónico: [email protected]