Me gusta pensar que el 2020 no fue sólo el año de Netflix, Amazon y Google, sino también el de los libros. Que ya fuese por gusto o por obligación, los confinamientos por la pandemia empujaron a muchos a la lectura en casa; si el libro fue uno de los objetos redescubiertos o, por lo menos, uno de los lenitivos de las extensas jornadas de encierro, el saldo de tanto miedo y desinformación no fue tan negativo. Como acostumbro hacer en la última guía del año, revisito algunos de los títulos del año que se nos va.

Al inicio del año, mientras llegaban noticias de un nuevo virus en China, comenté Shanzhai de Byung-Chul Han; Tú eres eso, una extraordinaria compilación de conferencias de Joseph Campbell; y algunos ejemplares traidos del Cono Sur, El libro de las plegarias de Enrique Solinas y ESMA textos que nos hablan de memoria y esperanza. Celebrábamos la extraordinaria compilación de artículos editada por el Archivo Histórico de la Ciudad de Irapuato con el lanzamiento de Irapuato. Sociedad, vida cotidiana y guerra, cuando las noticias empeoraban, e iniciamos una interesante lista sobre libros de epidemia y confinamiento. Desfilaron por aquí, en los primeros meses de una cuarentena que nunca hizo honor a su nombre, Cazadores de microbios de Paul de Kruif, el Decamerón de Bocaccio, El enfermo imaginario de Molière, Viaje alrededor de mi habitación de Xavier de Maistre, La vida en las ventanas Andrés Neumann, y no podía faltar La peste de Albert Camus.

Pero no todo fue tristeza y lamentación. También pasaron por acá libros con humor o relatos fantásticos para distraer ese ánimo que se abismaba en los conteos de contagiados y muertos, con Copyright de Maronna y Pescetti, las elegantes Lecturas no obligatorias de Wislawa Szymborska, La vida de Modesto de Marco Vanzzini, Fiesta en la madriguera de Juan Pablo Villalobos, El congreso de futurología de Stanislav Lem, y de la Península El amante bilingüe de Juan Marsé, e Imperios y espadazos de Andoni Garrido. Celebramos los 250 años de natalicio con el Beethoven de Salomon Maynard. Nos despedimos de George Steiner y José Luis Calderón Vela con Presencias reales y Letras interiores, respectivamente. Dimos la bienvenida a nuevos lanzamientos como Banana Street de Macaria España, A golpe de linterna compilación de Liliana Pedroza, García Luna El señor de la muerte de Francisco Cruz, El traidor de Anabel Hernández, El círculo de agua de Marco Vanzzini y El reino de lo no lineal, mencionado en Principia de Elisa Díaz Castel.

No olvidemos el 2020, o mejor, sí: digamos adiós a este extraño compendio de temores atávicos y bullicio informativo, y recordemos que muchas veces la respuesta a la zozobra se encuentra allí, en los anaqueles, donde, pacientes y silencios, sólo esperan que alguien los tome en sus manos y los abra. Feliz 2021.

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