Ni pinto ni colorao;  El ayer doliente, el mañana ardiente

“El viento invernal nos pega los claves a tierra, aunque en este trópico siguen los moscos evadiendo las débiles heladas…”

Ni pinto ni colorao;  El ayer doliente, el mañana ardiente

No hay fiestas más agridulces que las de fin de año. Llegan las memorias de lo vivido: los logros, tropiezos, los viajes lejanos que se cumplieron, las metas alcanzadas, proyectos surgieron, otros se desvanecieron. El viento invernal nos pega los claves a tierra, aunque en este trópico siguen los moscos evadiendo las débiles heladas.

El 2017 nos deja fuertes aleccionamientos como país y orbe. El buque imperial que dirige Donald Trump pone el timón rumbo a mares misteriosos en aguas salvajes, en espera de tifones norcoreanos y huracanes conservadores.

La reforma fiscal del Presidente, Señor de los Muros, pasó la aprobación legislativa con fuertes bajas impositivas a la clase media y empresarios de la unión americana; acaso habrá algún plan de los economistas en México para paliar con lo que parece menor inversión extranjera, o amenazante inflación por el fortalecimiento desafiante del dólar.

En México el sexenio ve pronto su final, bajo el mando de uno de los presidentes más impopulares de la historia por su tontera esférica, con la corrupción al borde como retrete tapado de mierda, con la ignorancia rampante de los mirreyes en el gabinete federal y gobernadores en el patíbulo.

El PRI intenta quemar todas las naves con José Antonio Meade, ubicuo funcionario de la federación durante los últimos doce años, poniendo por delante su gran experiencia, pero con un campo minado por los casos de corrupción que se presentaron durante sus diversas misiones en la nación, sobre todo como secretario de Hacienda, y esa estafa maestra que le pasó como salmón en el hocico de un grizzli.

Margarita Zavala, ante el bloqueo azulado del joven maravilla, Ricardo Anaya, araña un valioso ocho por ciento del electorado, según algunas encuestas. Junto con el Bronco, serán los independientes que más firmas obtendrán y con mejor juego político en la mesa, podrán negociar ventajosamente con las alianzas partidistas.

Andrés Manuel López Obrador, vive una encrucijada definitiva: su incongruente alianza con la legión de fanáticos evangelistas de Encuentro Social le ha distanciado del ala intelectual de MORENA; sin embargo, el cabellera de plata confía que esto le sume en porcentaje a su aparente primer lugar en las encuestas. Por cierto, ya no creo en puñetera encuesta alguna, después de meses de seguirlas en las elecciones gringas, donde siempre ganaba la Hillary y al final quedamos empalados medievalmente.

Guanajuato en la mira.

Caminos de Cuévano, que pasas por tanta aldea. No pases por su corredor industrial, que ahí me hiere el pulmón, vete rodeando entre tanto humo de quemazones, ladrillo y camión.

Dejando de lado mi veta de compositor vernáculo, el frío y el infecto invernadero desde Celaya, más fuerte en Salamanca, inquietante en Silao y extremo en León, ponen nuestra salud respiratoria como en cámara de gas letal.

Hace poco, regresando de una gira escénica por Irapuato, pude constatar una visión jamás imaginada: el Cubilete con una nata de contaminación en sus faldas. Hemos llegado a niveles preocupantes de suciedad en el aire, combinado con la poca atención e interés social, su falta de sensibilidad en un asunto tan relevante y la casi nula acción gubernamental.

El Bajío recibe un 2018 decisivo: aires de reelección soplan en los municipios más poblados, no tan sólido el movimiento independiente en la entidad, pero el recuerdo de Comonfort nos hace suspirar. Los trienios no parecen ser suficientes para los alcaldes panistas, pero la inseguridad ha estado canija.

Ricardo Anaya le puso el dedo a Diego Sinhué, pero Villarreal y Torres Graciano esperan aparecer algún as en la mano. Miguel doble Márquez no se aventó por la grande, espera amarrar su terruño para el vilipendiado azul del PAN. Mucho deberá labrar ante un PRI que buscará alianzas pero no parece tener gallo o gallina a destapar; no se les vaya a ocurrir alguna bella barbaridad.

Hace algunos meses, una imagen del mesías tropical, por las callejuelas cervantinas, en las que el maestro Ruelas repasaba con sus actores los entremeses. Por ahí por la plaza de San Roque, el Peje correteaba en lento andar a las palomas, video que llenó de memes las redes. López Obrador presumió un crecimiento de la izquierda guanajuatense; veremos si su morenaza prende, muy apagada en estas tierras ibargüengoitienses.