Para qué leer a un Nobel

"Sin embargo, en literatura, el más popular de los premios, porque la obra se hallará al alcance general, la tesitura alcanza otros niveles..."

Para qué leer a un Nobel

Cuando se habla de un Premio Nobel, regularmente la gente sabe que se trata de palabras mayores. Al saber que alguien fue galardonado con este premio, de inmediato el merecedor es visto con otra óptica. En todas las categorías es muy prestigioso. Sin embargo, en literatura, el más popular, porque la obra se hallará al alcance general, la tesitura alcanza otros niveles.

Un Premio Nobel de literatura es alguien que ha reflexionado sobre la vida y comparte con nosotros su percepción. Lo hace a través de su obra.

Hace unos  días falleció la primera mujer afroamericana en recibirlo. Fue en 1993 cuando se premió. Su obra da voz protagónica a quienes de doble forma están marginadas.  Nuestra sociedad poca atención presta a las mujeres. Eso ya es algo que preocupa pues no solo se les invisibiliza; también se minusvalúan sus habilidades y capacidades. Socialmente se desvalora su capacidad para aportar, opinar o simplemente reflexionar. Para ello es suficiente con observar el número de obras de autoras en el mercado. Son más las obras de varones.

Pero como si este hecho lamentable no fuera suficiente, Toni Morrison –Premio Nobel 1993– da esa voz a las mujeres negras, a las afroamericanas, como ahora se les llama para no usar la palabra ‘negro’ como adjetivo. Eso resulta una doble osadía por la segregación en su país de origen, EEUU. Ella misma padeció de todo, casi como Ophra Winfrey. Por ello, sabía perfectamente de lo que hablaba.

Es muy lamentable que solo a través de libros, como si no fuéramos capaces en la vida cotidiana –y quizá porque es cierto es más lamentable aún–, nos demos cuenta de que las mujeres negras son seres humanos con sentimientos –muy profundos, pues la sociedad se ha encargado de ahondarlos.

Los grupos marginados tienen mucho qué decirnos al resto de la sociedad. En las noticias solo son estadística, masas uniformes en su forma de vestir, hablar y habitar. Son vistos como bichos raros a los que se les hace reportajes, tal y como sucede con los animales de las selvas o del océano profundo. Los libros de Morrison son no solo una ventana a un mundo distante, como los reportajes de los medios; también está matizado de sentimientos, vivencias y rutinas.

Toni Morrison, la primera mujer afroamericana en recibir el preciado galardón, como protagonista de esa doble represión (por mujer y por negra) aborda en su narrativa los pesares de personas que como ella misma han padecido en los Estados Unidos la segregación.

No es el único sector reprimido. También están los latinos y en especial la mujer latina.

¿Por qué leer a un Premio Nobel? Porque, con calidad literaria, nos acercan a temas que aunque sepamos de ellos, sus plumas y palabras, nos hacen sentir en carne propia lo que debíamos saber como seres humanos. Toni Morrison, la voz de la mujer negra estadounidense, estará siempre presente para los que decidan incursionar, no con vista de televisión, sino con las alas del corazón.