sábado. 20.04.2024
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POESÍA

Perro de hueso

Eva H.D., en traducción de Karla Gasca

Eva H.D.
Tachas 381
Perro de hueso

Volver a casa es terrible
tanto si los perros te lamen la cara o no;
tanto si te espera una esposa
o simplemente una soledad con forma de esposa.
Volver a casa es terriblemente solitario
piensas
en la opresiva presión barométrica
el regreso al lugar que acabas de dejar
con cariño,
porque todo es peor
de vuelta en casa.

Piensas en los bichos
trepando a los tallos de las plantas,
las largas horas en carretera,
la asistencia en el camino y los helados,
las formas particulares de
ciertas nubes y silencios
con nostalgia porque no querías regresar.
Volver a casa es
simplemente horrible.

Y los silencios y nubes propias de tu hogar
contribuyen en nada
sólo aumentan el malestar.
Nubes tal y como están,
son de hecho sospechosas,
están hechas de un material diferente
del que estaban hechas cuando las dejaste atrás.
Tú mismo fuiste cortado
de una tela dudosa y distinta,
devuelto,
descartado,
desconocido por la luz de la luna,
infeliz de estar de vuelta,
flojo en los peores lugares
con tu traje raído
gastado como trapo viejo.


Regresas a casa
como aterrizando en la luna, ajeno;
la atracción gravitacional de la tierra
redobla su esfuerzo,
arrastrando tus cordones sueltos
y tus hombros
grabando más profundamente la estrofa
de la angustia en tu frente.
Regresas a casa profundizado,
un pozo seco ligado al mañana
por una frágil hebra de ...

Como sea…

Suspiras ante la avalancha de días idénticos.
Uno a la vez, al caso…

Bien…
Como sea…
Estás de vuelta.

El sol sube y baja
como una puta cansada,
el clima inmóvil
como una extremidad rota
mientras sigues envejeciendo.
Nada se mueve excepto
las cambiantes mareas de sal en tu cuerpo.
Tu visión se nubla.
Llevas tu clima contigo,
la gran ballena azul,
una oscuridad esquelética.

Regresas
con visión de rayos X.
Tus ojos se vuelven hambrientos.
Regresas a casa con tus dones mutantes
a una casa de hueso.
Todo lo que ves ahora,
todo ello:
hueso.




***
Eva H.D. vive en Toronto, donde trabaja en su bar favorito. Su primer libro de poesía, Rotten Perfect Mouth, fue publicado por Mansfield Press en la primavera de 2015. A ese libro pertenece este poema, que aparece en la película I’m Thinking of Ending Things (2020) de Charlie Kaufman.

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