Van Dyke Parks puso ese disco otra vez
el que grabó en aquel sopor
el que grabó con ese dolor enquistado
y le pareció nunca-tanto
así, de primeras, creyó que exageraba
cuando hizo todo lo que hizo
cuando pensó todo lo que pensó
y quizás pensó que pudo haber quitado algunas notas del pentagrama
pero ya era muy tarde
y como una instamatic
quedó capturada esa era de Van Dyke Parks
cuando su obsesión por los ciclos de canciones
se mezcló con su obsesión por el gran cancionero americano
se mezcló con el talmud
y la música clásica
y los circos victorianos
y la lisergia de traje y corbata de paramecios
y las historias de Milne y Barrie y Grahame y Carroll
y esa muerte que lo marcó todo
lo destruyó todo
lo construyó todo
porque a partir de allí Van Dyke Parks es Van Dyke Parks
antes apenas era un ensayo
en frío

Van Dyke Parks puso ese disco otra vez
además de la otra vez
y aquel sopor
ese dolor enquistado
y le pareció total

sí, Van Dyke Parks,
sí
desde entonces
hiciste una
obra
maestra

***
Leonardo Biente es escritor y poeta. También es empleado de día.

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