En el mundo empresarial, sobre todo aquel en el que participan micro, pequeñas y medianas empresas que se identifican con el tema de la innovación tecnológica, es esperada año con año la publicación de las convocatorias de los diversos fondos de apoyo que operan entidades del Gobierno Federal.

Tal es el caso de la convocatoria del Fondo de Innovación Tecnológica SE-Conacyt, que desde 2002 se publica en el segundo semestre del año para ofrecer a empresas y emprendedores apoyos importantes a fondo perdido, destinados a apuntalar sus esfuerzos de innovación y desarrollo tecnológico.

Este año la publicación de dicho documento se dio de manera un tanto anticipada, antes de que se cumpliera el primer semestre –18 de junio-, por lo que los interesados ya cuentan la puerta (más bien, el sistema informático) abierta para participar, con la esperanza de obtener recursos de una bolsa que supera los 500 millones de pesos.

En realidad, las reglas de operación y bases de participación de esta convocatoria en particular no son especialmente complicadas o de difícil interpretación y/o cumplimiento. La cosa es agarrarle el modo al lenguaje técnico que en ella se emplea y cuidar algunos detalles que no siempre son entendibles para un lector no habituado a este tipo de gestiones.

Así que a petición del respetable (clientes y amigos de Contacto Consultores Empresariales y algún lector curioso de este tema), nos dimos a la tarea de traducir el documento a un lenguaje más cercano, con la intención de animar a que más y más empresas soliciten los recursos financieros que están ahí, a disposición de todos, pero que en la práctica son aprovechados cada año, en su mayoría, por los grandes capitales que dominan nuestra economía.

Puestos a ello comencemos con localizar la convocatoria en esta liga de las páginas de CONACYT. Está claro a quienes está dirigida: A las micro, pequeñas, medianas empresas y personas físicas con actividad empresarial inscritas en el Registro Nacional de Instituciones y Empresas Científicas y Tecnológicas (RENIECYT).

Para registrar una empresa en el Reniecyt hay que abrir una solicitud y completarla en el mismo sistema. El trámite no es demasiado complicado, pero hay que contar con que el sistema es un tanto inestable y de no fácil acceso. Aquí, la liga para acceder a este registro. En ese sitio hay un manual que se puede bajar; también ofrecen cursos para que los empresarios se registren sin costo y en línea. Lo malo en este caso es que el curso ya se dio, justo 7 días antes de que se publicara la convocatoria (11 junio), pero aún puede contarse con la asesoría telefónica.

Una vez obtenido el registro de RENIECYT (el trámite se ha agilizado mucho y ahora es posible obtenerlo en cuestión de semanas, no de meses como hace unos años), la empresa o persona física podrá acceder al sistema para optar por una de las tres modalidades que ofrece la convocatoria.

Antes cabría verificar si su actividad corresponde a aquellas consideradas como prioritarias para la entidad donde se desarrollará el proyecto. En el caso de Guanajuato los sectores prioritarios son Agroindustrial, automotriz, productos químicos y la cadena cuero-calzado-proveeduría. Si el proyecto, por el giro de la empresa, no cabe en estos temas prioritarios, de cualquier forma puede solicitar el apoyo, pero está claro que habrá un trato privilegiado para las primeras.

Como comentario al margen, es una pena de que sean sólo esas áreas las prioritarias para Guanajuato, cuando el estado tiene una vocación industrial bien perfilada a las nuevas tecnologías y la innovación. Sería muy bueno que por ejemplo incluyeran a las Tecnologías de la Información y la Comunicación en esta lista de prioridades, porque así se reconocería el esfuerzo y gran talento de muchos desarrolladores de TIC´S guanajuatenses.

Llegamos a las modalidades, tres, a saber:

Nuevos Negocios. Start-ups: Se apoyarán iniciativas innovadoras de nuevas empresas de base tecnológica (de hasta 2 años de operación), con un alto valor y potencial comercial, que se encuentren en etapas de desarrollo y pre-validación comercial de su tecnología. El apoyo en esta modalidad es de hasta el 70% (o sea que el empresario o proponente tendría que aportar mínimo el 30% del costo total del proyecto). En nuestra cartera de proyectos aprobados o por aprobar por esta modalidad podemos mencionar como ejemplos a desarrollos orientados a productos innovadores basados en tecnologías de punta, como lo son la bioquímica, nanotecnología y tecnologías de la información (TIC´S).
Integración de prospectos de negocios de base tecnológica. Esta modalidad apoya propuestas cuyo objetivo sea lograr que desarrollos científicos y/o tecnológicos que deriven en un nuevo producto, en fase de prototipo, sea probado en etapa pre comercial y puedan ser la base de un prospecto de negocio e inversión. El apoyo aquí es de hasta el 50% del valor total del proyecto. Un ejemplo de proyecto que aplica para esta modalidad es la validación de un nuevo producto que tenga una base tecnológica y pueda abrir nichos de mercado nuevos: pintura antigraffiti, pegamentos sin solventes y con nanotecnología, etcétera.
Creación y consolidación de grupos y/o centros de ingeniería: diseño, investigación y desarrollo tecnológico. Esta modalidad apoya hasta con el 50% aquellos proyectos que estén orientados a fortalecer las capacidades tecnológicas internas de las empresas, para el desarrollo de nuevos productos, procesos, método de comercialización u organización. Caben aquí propuestas para el diseño, desarrollo y equipamiento de laboratorios de calidad, pruebas físico-químicas, plantas piloto y áreas de desarrollo.

Una vez elegida la modalidad, habría que cubrir los requisitos que se precisan en otro documento que se encuentra en la liga que abrimos antes como Términos de Referencia, establecer un presupuesto con los gastos atribuibles y determinar muy bien metas, objetivos y compromisos, porque la convocatoria sólo estará abierta hasta el 1 de agosto próximo.

En un próximo artículo nos ocuparemos de la descripción de los procesos que incluye la gestión de la propuesta en el sistema de EL CONACYT. Ojalá que entonces aún les sean útiles para presentar un propuesta en esta oportunidad, o como apuntes a considerar para una próxima ocasión.