Por diversas causas, que no viene al caso analizar, sólo una minoría de las empresas en México reciben apoyos directos por parte del gobierno, ya sea de instancias federales, estatales o municipales. La enorme mayoría, ésa que contribuye día a día con la generación de riqueza en el país —productos, empleos, divisas, impuestos, etc.— saca de sus cada vez más sufridas finanzas para crecer, modernizarse, innovar, sin apoyo o aliciente económico alguno. Es una realidad.

¿Será que en México no existe una política de apoyo a la empresa?

—No, por el contrario, si bien no estamos a la altura de países como Chile o Brasil, donde la estrategia de apoyo a MIPYMES es clara y contundente, si hay programas de apoyo y bolsas de muchos miles de millones de pesos para el “fondeo” de proyectos del sector privado.

Entonces la segunda pregunta sería: ¿Por qué entonces casi nadie los conoce y los aprovecha?

La respuesta es igual que para el primer enunciado: “por diversas causas, que no viene al caso analizar”. De hecho, si la oferta de apoyos gubernamentales a la empresa fuese más conocida por los interesados —las MIPYMES de cada rincón del país— y los trámites para que los recursos lleguen a los solicitantes fuesen sencillos, muchos despachos de consultoría como el que dirige la que suscribe, simplemente no tendrían razón de ser.

Entonces, una de nuestras funciones es dar a conocer las diversas opciones de apoyos, ya sean subsidios, recursos complementarios o dinero “a fondo perdido”, para que las empresas que desean y merecen estos recursos puedan acceder a ellos, salvando (que sí es posible hacerlo) la tramitología y los obstáculos surrealistas que se presenten en el camino de la gestión.

Vayamos pues a la oferta de apoyos para empresas y emprendedores:

El Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología, CONACYT, mantiene vigentes muchos fondos, y en casi todas las reglas de las respectivas convocatorias se habla de que están dirigidos a universidades, centros de investigación y empresas. La realidad es que sólo unos cuantos de esos fondos aplican para emprendedores y empresas. No importa esto porque los fondos que sí aplican son muy buenos, funcionan muy bien como aliciente para la innovación, y los recursos está allí para ser aprovechados.

De los fondos con mejor calificación en este ranking están:

Los apoyos que ofrece el Programa Especial de Ciencia y Tecnología de CONACYT, mediante Fondos Mixtos y Sectoriales que otorgan subsidios o apoyos a "fondo perdido", desde el 40 al 100 por ciento, a los proyectos tendientes a modernizar y eficientar los procesos productivos, a través de la investigación en todas sus fases, incluyendo el desarrollo de nuevas tecnologías, nuevos productos o servicios, así como la creación de negocios de alto valor agregado.

En este catálogo podemos encontrar, entre otros, el Fondo de Innovación Tecnológica Secretaría de Economía-Conacyt, que desde más de un sexenio atrás viene otorgando apoyos “a fondo perdido” de hasta el 50%, a proyectos de innovación que deriven en nuevos productos, nuevos procesos, nuevos servicios o creación de infraestructura tecnológica (laboratorios, viveros tecnificados, plantas piloto, etcétera).

Para ejemplificar el tipo de proyectos apoyables por este fondo, tomamos al azar el título de alguno de aquellos que definimos, soportamos, estructuramos y gestionamos con éxito a favor de nuestros clientes, claro, cuidando el anonimato del proponente:

“Nuevos procesos y productos, con alto contenido innovador, para dar sustentabilidad a una PyME proveedora del sector calzado y sustituir importaciones.”

También existen los Fondos Mixtos:  29 fondos consolidados, uno por entidad federativa, más algunos municipales,  que podrían apoyar al 50% el costo de proyectos tendientes al desarrollo de nuevos productos, procesos o servicios, o a la solución de problemas que afecten a la productividad o sustentabilidad de las empresas. Destacamos el FOMIX GUANAJUATO-CONACYT, uno de los que mayor apoyo han otorgado a las empresas, con una estructura muy clara y veraz de evaluación. Un ejemplo de proyecto apoyado por estos fondos:

“Diseño y desarrollo de tecnologías de información enfocadas a mejorar el servicio al cliente, la toma de decisiones en procesos y operaciones empresariales e intercomunicación con la cadena de suministros, en una empresa líder de un consorcio zapatero.”

Y la cereza del pastel: el Programa de Estímulo para la Innovación, con recursos de cientos de millones de pesos, orientados a incentivar la inversión en investigación y desarrollo tecnológico, mediante el otorgamiento de estímulos económicos para empresas que realicen actividades de investigacion y desarrollo tecnologico, con la finalidad de incrementar su competitividad, la creación de nuevos empleos de calidad e impulsar el crecimiento económico del país.

El programa PEI presenta 3 modalidades: INNOVAPYME, INNOVATEC y  PROINNOVA. Las modalidades “premian”  los esfuerzos de modernización y desarrollo tecnológico, en particular de las pequeñas y medianas empresas (MiPyME), con recursos complementarios del 40 al 80%  para sus proyectos de innovación y desarrollo tecnológico,  a realizarse en próximo ejercicio fiscal, con preferencia a los proyectos que se realicen en vinculacion con universidades y/o centros de investigación.

Ejemplo: “Diseño y desarrollo de una tostadora para la producción de café de especialidades, con impactos verificables en la calidad y una sustancial reducción de consumos enérgeticos y emisiones al medio ambiente.”

Vale aclarar que justo este fondo está por abrirse para proyectos de inversión en el 2015.

A partir del 2013 y como “aportación” del gobierno de Peña Nieto al tema del impulso a las empresas, se creó el ahora llamado Fondo Emprendedor, del Instituto Nacional del Emprendedor (INADEM), de la Secretaría de Economía, con una bolsa de más de 9 mil millones de pesos orientados a brindar apoyos incluyentes a emprendedores y a las micro, pequeñas y medianas empresas, impulsando su innovación, competitividad y proyección en los mercados nacional e internacional. Los apoyos van del 50 al 80% del costo de los proyectos, conforme al rubro de inversión considerado. Los rubros incluyen desde el apoyo para la incorporación de temas de internet y computación en las micro y pequeñas empresas, hasta el fondeo para la realización de eventos, creación de nuevas empresas de alto impacto (Start ups), consolidación de PyMEs Y MiPyMEs (equipamiento, consultorías, certificaciones) y la creación de cadenas de proveeduría para insertar a empresas con empresas ancla. Especial interés tienen estos fondos en apoyar a emprendedores, incubadoras de empresas y franquicias.

La información está servida…

Para cualquier duda o comentario favor de dirigirse a: [email protected]