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24/05/13

Limpiemos nuestro México

Limpiemos nuestro México

La cultura cívica tiene muchas expresiones concretas; entre ellas la capacidad individual y colectiva de preservar el entorno natural sobre el que aplica su huella ecológica. Cuando una sociedad cualquiera puede desarrollarse en su potencial sin alterar en demasía los delicados equilibrios naturales de su medio ambiente, entonces estamos hablando de una comunidad que posee una elevada cultura cívica, ya que para mantener esos equilibrios es necesaria la participación de cada uno de los individuos de la colectividad. No es raro que el desarrollo social y cultural de un pueblo vaya aparejado de sendos compromisos morales con el entorno natural.

Nuestra sociedad, la mexicana, llegó al desarrollo económico de manera abrupta y  accidentada. No hace mucho éramos un país predominantemente rural, y es bien sabido que las normas de convivencia social que se acostumbran en comunidades con pocos habitantes, suelen ser inservibles o infuncionales cuando las familias se trasladan a las grandes ciudades. Las solidaridades y la economía moral dejan de funcionar en los barriales urbanos, donde la supervivencia está más vinculada a la lucha denodada por el alimento cotidiano y el egoísmo es escudo protector. Es en esos contextos, cuando la conciencia colectiva pierde interés por la preservación del entorno natural, que se prioriza la autodefensa agresiva y el desprecio por el otro. Nuestras avenidas, calles y carreteras son escenarios de una guerra cotidiana de iracundos conductores de vehículos contaminantes, que ignoran las normas y el respeto mutuo, en aras de llegar a tiempo, levantar más pasaje o sencillamente desfogar frustraciones personales en la anonimidad del tráfico.

Desde que México se inauguró en la industrialización, allá por los años sesenta, hemos contaminado y ensuciado nuestros espacios urbanos y carreteros hasta extremos vergonzosos. Sencillamente vivimos en la mugre que nosotros mismos generamos: plásticos, PET’s, unicel, latas, fierros, bolsas, papel y demás porquerías afean nuestras calles y plazas. Los conductores y pasajeros arrojan sus desechos por las ventanillas, sin ningún sonrojo, y si uno se atreve a pedirles que no lo hagan, te cubren de insultos.

Por eso me encanta participar en iniciativas como la de “Limpiemos Nuestro México”, que impulsa Televisión Azteca con el apoyo de Grupo Bimbo y la Semarnat. Seis millones de personas y organizaciones se han inscrito; ojalá dicho número sea real, y que en este domingo 26 de mayo un ejército de mexicanos conscientes invadamos las calles y plazas de nuestras ciudades a recoger las miles de toneladas que hemos acumulado en los espacios públicos, sobre todo en los menos atendidos por las autoridades, siempre rebasadas.

Los miembros de la asociación “Guanajuato Somos Todos” de Guanajuato capital, nos hemos inscrito para constituir la “Brigada 5 de diciembre” (en recuerdo de la jornada del plebiscito municipal de 2010, cuando la ciudadanía guanajuateña le ganó a una autoridad obtusa). Creemos que podemos agrupar a más de cien de nuestros conciudadanos, y que podremos limpiar la cuenca del Río Pastita, hasta subir a la zona de Las Palomas. Es un río muy contaminado, que está bordeado por uno de los barrios de más prosapia de la ciudad: el viejo Paxtitlan, hoy Pastita, uno de los asentamientos humanos más antiguos de la entidad. Desgraciadamente la cuenca está en extremo contaminada, no sólo por basura urbana sino por toneladas de cascajo y escombros en la parte de arriba de la cuenca, en Las Palomas, un viejo y hermoso lugar de paseo y de recreación en sus ya desaparecidas pozas. La ciudad ha convertido este hermoso lugar en un tiradero de desechos de la construcción.

Por supuesto, los ciudadanos nos concentraremos en la recolección de basura, pero algunos amigos constructores y la autoridad municipal pondrán a trabajar su maquinara para retirar lo más posible el escombro y poner obstáculos para que se continúe esta pésima costumbre.

Lo importante es generar un cambio de actitud entre nosotros. Hay que construir ciudadanía, y para ello nada mejor que la participación en la solución de los problemas que nos afectan.

Si estás interesad@ en participar con nosotros limpiando nuestro México, acompáñanos este domingo a partir de las 9:00 horas, frente a la secundaria Benito Juárez en Pastita. Trae contigo a tu familia y amigos, dotados con guantes, cubrebocas, calzado cómodo y resistente, pantalón de mezclilla, camiseta blanca y un sombrero o cachucha. Un palo con un clavo en el extremo es una gran ayuda para evitar agacharse a recoger desechos. El municipio nos dotará de bolsas, pero nunca sobran. ¡Allá nos vemos!

Antropólogo social. Profesor investigador de la Universidad de Guanajuato, Campus León. [email protected] – www.luis.rionda.net - rionda.blogspot.com – Twitter: @riondal