Martín Eugenio Ortiz García, ha sido regidor en el Ayuntamiento de León y diputado al Congreso de Guanajuato. Intentó ser diputado federal pero perdió. Es abogado y es administrador de empresas. Fue presidente del PRI en León y tuvo una cartera en el PRI estatal. Un rato dejó de ser priista y luego regresó a su partido. Ahora es el secretario del Ayuntamiento que preside su compañera de innumerables batallas, Bárbara Botello. Quiere ser alcalde. Y ya está en campaña.

Martín Ortiz nada más se aguantó cuatro meses. Desde su balcón oteó el horizonte, hizo un diagnóstico rápido de sus eventuales contendientes y dibujó él mismo, resuelto, su línea de arranque. Flanqueado por dos viejos correligionarios, Primo Quiroz Durán, que se estrena como delegado del ISSSTE y Adolfo Aranda Torres, reaparecido en la dirección de Desarrollo Social municipal, se lanzó al ruedo desde un “curso de capacitación ideológica” a los priistas de ayer y hoy.

Ahí habló de un PRI que está vivo y que está de vuelta en el poder. De un PRI en el que puede confiar la juventud. Del PRI histórico. Del PRI que llevará el desarrollo, el bienestar y la igualdad de oportunidades a las colonias más pobres. También los parques y las súper escuelas. La justicia social, cómo no. Del PRI que hará gobierno sin dejar la campaña. Esto último no lo dijo él.

Hace tiempo que Martín abriga el anhelo de ser el candidato priista a la Presidencia Municipal de León. Previo a la contienda anterior, lo expresó públicamente en el noticiero radiofónico “¡De Palabra!”. Declinó en favor de su amiga, Bárbara Botello, que a la postre ganó la elección al panista, Miguel Ángel Salim, luego de 24 años de gobiernos del PAN ininterrumpidos.

Es en ese factor donde Martín Ortiz tiene, al mismo tiempo, su oportunidad de catapulta y su peor obstáculo. Es fácil entender que estaría en posición de demandar reciprocidad a la actual alcaldesa, también la voz mandante en el priismo de León. Pero quienes creen tener ese as bajo la manga, se vuelven legión.

Por supuesto está el tesorero Roberto Pesquera, de manera visible, actualmente el funcionario más cercano a Bárbara Botello. Salvo pequeños fallos -y ni siquiera atribuibles del todo a él-, Roberto se ha mostrado como un ejecutivo decidido y eficaz. Políticamente, dispone de contactos de buen nivel y de fiar en la ciudad de México, y a sus cercanos les ha dicho que no encuentra un solo motivo para que Martín -Ortiz-, camine solito rumbo a la candidatura. Demandaría por supuesto, el apoyo de la Alcaldesa, como recompensa a su disponibilidad plena.

Tampoco hay que perder de vista que, aunque renieguen en no pocas ocasiones, los priistas gobiernan en alianza con la franquicia de negocios que es el verde ecologista. Y aquí aparece un personaje tercero en discordia: Eugenio Martínez Vega, quien ya fue candidato del PVEM a la alcaldía, con un papel más que decoroso. En la anterior, prefirió ser aliado que contrincante. Supone -y no tendría por qué estar equivocado-, que tiene una factura por cobrar.

Martín Ortiz dijo a los reporteros que estos no son los tiempos para hablar de candidaturas. Estamos de acuerdo. Pero eso es nada más el discurso políticamente correcto. Ni modo, a Martín Ortiz, Eugenio Martínez y Roberto Pesquera, les toca ponerse el traje de margaritas, a la espera de que la señora Bárbara Botello los deshoje.

FOX, GENIO Y FIGURA

Vicente Fox, está como el chiste a propósito de Pedro Infante. Como aquél sigue vivo, Vicente sigue siendo panista… en el corazón.

El ex presidente de México, el primero no priista desde antes que el priismo se inventara -panista en su momento, para más señas-, ignoró el proceso de refrendo de la militancia ordenado por su líder nacional, Gustavo Madero, gesto que lo puso fuera, en automático, de las filas del Partido Acción Nacional.

Él mismo, dijo públicamente que consideraba no reafiliarse, por el rumbo y el manejo que deciden los dirigentes actuales del PAN. Ahora, en una de esas reapariciones que tiene muy bien ensayadas, casi, casi a ritmo de bolero, Vicente dice que lleva el panismo en el corazón; que lo tiene como una filosofía de vida; que lo lleva en el sentimiento, una filosofía que llevará por siempre; que eso no se lo quita nadie.

Vicente Fox habla entonces de un distanciamiento a partir de un mal entendido por el trámite de reafiliación, pero sostiene la crítica al partido que tanto ama. Está convencido de que los dirigentes conducen al partido hacia una ruta equivocada: las “alianzas oportunistas electorales” con el PRD, que se proyectan en 13 de los 14 estados donde habrá elecciones este 2013.

Vicente Fox, es sin duda el político mexicano que más ha denostado la alternativa política que ofrece el Partido de la Revolución Democrática, en específico el ala que representó el tabasqueño Andrés Manuel López Obrador, hoy también alejado de esas siglas. Fox ha dicho una y otra vez que él ganó la Presidencia de la República en dos ocasiones: como candidato y desde la silla.

Así que al PAN lo quiere, pero no le gusta. Lo ve en la ruta equivocada, a los liderazgos, pues. Asegura que es posible compartir ideas con otros partidos políticos, pero eso, por favor, es muy distinto a las “alianzas oportunistas electorales”.

Ejecutado el ritual del encore frente a los medios de comunicación, su auditorio favorito, Fox regresa a sus Almuerzos San Cristóbal. Hasta la próxima.

EL PAPA

Renunció el papa Benedicto XVI. Desde el 28 de febrero próximo a las 20:00 horas, la Sede de San Pedro quedará vacante y deberá convocarse el cónclave para la elección del nuevo Sumo Pontífice.

La Conferencia del Episcopado Mexicano, escribió en su comunicado, a propósito de la renuncia del papa Benedicto XVI: (La CEM) expresa su profunda gratitud al Santo Padre por su fidelidad y su generosa entrega al servicio de la Iglesia universal, y por el amor y solicitud hacia el pueblo mexicano, particularmente manifestado en su inolvidable visita pastoral a nuestra nación.

El Papa que visitó Guanajuato, que vino a León, no lo será más. Cada quien con su recuerdo y sus pendientes. Dos botones, como muestra.

El gobernador Miguel Márquez, anunció que se erigirá un monumento en honor al papa Benedicto XVI.

De hecho, a juicio del gobernador, podría ser uno en cada municipio que visitó, a saber: León, Silao y Guanajuato, o únicamente en el Parque Bicentenario -Silao-, donde ofició la misa multitudinaria. Ningún otro Papa había estado en tierras guanajuatenses, dijo el gobernador, y vale la pena revisar la manera de conmemorar el acontecimiento. Hay que poner de acuerdo a los municipios y, por supuesto, a las autoridades eclesiásticas.

Y el gobernador dijo lo que todos dicen: que en Guanajuato se dejó atrás la imagen de un papa alemán, frío, filósofo, teólogo, apegado a la razón y regaló la parte humana de Joseph Ratzinger, que no habían percibido en ningún otro país.

Bueno, ese fue el gobernador. Acá en León, la alcaldesa Bárbara Botello, también habló -mejor dicho-, se quejó.

Todavía revisan los pagos pendientes de servicios que se contrataron durante la visita de Benedicto XVI, y que no parecen muy claros.

La alcaldesa informó que existen dos proveedores que dicen haber costeado, uno, un estacionamiento, y el otro, un centro de cómputo, y que reclama algo así como tres millones de pesos. El problema, dice la alcaldesa -y si es así, dice bien-, es que nada está documentado. Así no hay manera de que salga el pago.

Del monumento al que se refirió el gobernador, Bárbara declaró simplemente que su administración no lo tiene previsto, pero que con gusto revisarían la propuesta. “En estos momentos no es algo que tengamos contemplado, tenemos muchas otras cosas más qué atender”, dijo de plano.

Lo del monumento, pues, se revisa y ya, pero si cometieron una transa con la visita del papa Benedicto XVI, la verdad, eso no es de Dios.

LA JAULA

Otro punto a favor del procurador de Justicia, Carlos Zamarripa: recuperaron -aseguraron, dicen ellos-, 57 vehículos con reporte de robo, durante la Feria de León. 46 de las unidades presentaron alteración en sus números confidenciales, una, en los del motor.

La Procu tiene a bien acompañar la información con un nuevo llamado a la ciudadanía, para evitar riegos: estacionar las unidades en áreas bien iluminadas; instalarles un GPS; conducir con los seguros y ventanillas cerradas; transitar de preferencia por avenidas y nunca -y eso es nunca-, subir a personas extrañas a la unidad. Listo.

Comentarios y quejas: [email protected] y @FPacomares

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