viernes. 19.04.2024
El Tiempo

Libros cumpleañeros [II]: 1921 • Fernando Cuevas

“Seguimos el repaso por las lecturas, ahora cumpliendo el siglo de vida en este terminal 2021…”

Libros cumpleañeros [II]: 1921 • Fernando Cuevas

Novelas y obra

Marcel Proust entregó Sodoma y Gomorra, cuarta parte de su heptagonía sobre la búsqueda del tiempo perdido, donde personajes que aparecían en anteriores partes aquí deambulan con la aguda mirada del autor, observador participante y privilegiado, en torno a las relaciones homosexuales, la fiereza de los celos en un contexto de elegante decadencia parisina en espera de ser sustituida por nuevas élites que, por lo que se advierte, terminarán igual: abundan, por supuesto, las brillantes ideas acerca de la naturaleza humana y las formas de establecer vínculos y generar conflictos a su alrededor. Aldous Huxley, por su parte, se presentó con Amarillo cromo, debut en el que lanza una crítica feroz a la intelectualidad inglesa de aquellos años —despreciada por el autor– que alcanzaría amplio reconocimiento años después.

El buen soldado Švejk, novela inacabada del escritor checo Jaroslav Hašek, es una imaginativa y ácida crítica antibelicista construida a partir de la sátira como forma narrativa: el protagonista, presentado en algunas historias previas, es un desfachatado hombre que no termina por llegar al frente de batalla para pelear por el ejército austriaco en la I Guerra Mundial, dadas sus particulares e irreverentes estrategias para deslizarse por las órdenes de sus superiores, quienes lo terminan considerando notoriamente imbécil: un clásico que muestra cómo el humor paródico puede ser una potente arma contra la violencia burocratizada. En tanto, Walter de la Mare diseccionó a la sociedad victoriana a través de su personaje femenino de Memorias de una enana, quien funge como mordaz e intensa narradora en absoluto plan despótico para criticar a quienes la rechazan.

Con la Revolución francesa en puerta, un abogado decide retomar la voz de su amigo seminarista asesinado en un duelo desigual, para denunciar los abusos de la aristocracia, a la que defendía, y apoyar al tercer Estado; se integra a un grupo teatral para tal efecto, además de aprovechar sus conocimientos como abogado: se trata de la folletinesca Scaramouche, obra de Rafael Sabatini que deambula con soltura entre la crítica política, la novela histórica y la aventura picaresca con toques de romance. Miguel de Unamuno nos presentó a La tía Tula, escrita algunos años antes, en que la mujer del título, llamada Gertrudis, experimenta diversas situaciones en torno de la deseada maternidad, sin depender de relación alguna con los hombres y asumiendo el rol no como madrastra, sino como auténtica madre de sus sobrinos, con las complejidades y contradicciones del caso, profundamente exploradas por el filósofo.

La canadiense Lucy Maud Montgomery publicó Rilla, la de Ingleside, octavo volumen de la serie Ana de las Tejas Verdes, centrado en el proceso de maduración de la quinceañera protagonista que se queda en casa mientras sus parientes y amigos se van a la guerra: aquí el enfoque juvenil se torna un poco más oscuro por la presencia del conflicto bélico y las consecuencias que trae en el pueblo pesquero donde se desarrolla la trama. En el ámbito teatral, el italiano Luigi Pirandello presentó Seis personajes en busca de autor, especie de metaobra que se convirtió en una importante influencia para el teatro del siglo XX, en la que los miembros de la puesta en escena se confunden con sus personajes, pertenecientes a un entorno familiar cargado de conflictos.

Lógicas y tipologías

El Tractatus lógico-philosophicus, obra esencial de la filosofía del siglo XX escrita por Ludwig Wittgenstein, se publicó por primera vez en el último número de la revista Annalen der Naturphilosophie, mientras que Russell siguió promoviendo la obra que volvería a ver la luz en 1922 con  prólogo del afamado filósofo y mejor edición a cargo de Routldege & Kegan Paul, tras ser rechazada por la imprenta de la Universidad de Cambridge, entre otras casas editoras. Estructurado a partir de frases breves y contundentes, numeradas según una lógica estructural, el volumen reflexiona en torno a la lógica, el pensamiento y el lenguaje, sus relaciones y sus límites: la realidad, por más que nos esforcemos, seguirá siendo inasible para nuestras palabras e ideas.

El propio Bertrand Russell presentó Análisis de la mente, conjunto de conferencias dictadas en Londres, donde reflexiona integrando miradas desde la física y la psicología, ya en el campo del monismo neutral, sobre lo relativa y limitada que resulta nuestra capacidad para conocer el mundo tangible. En tanto, Carl Gustav Jung finalmente entregó su afamado Tipos psicológicos, tratado clave en el campo de la sicología analítica y cognitiva, donde establece el contraste entre una actitud introvertida y extrovertida en relación con las funciones del pensamiento y el sentimiento, más cercanas a la razón, y la intuición y la sensación, más perceptivas: de las posibles combinaciones se forman los ocho tipos que le dan título a esta propuesta ampliamente retomada y discutida durante los años posteriores.