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Los dos partidos dominicales tuvieron su cuota de dramatismo, sobre todo en el segundo tiempo, mientras que los encuentros sabatinos se definieron bastante antes del silbatazo final, aprovechando las ventajas obtenidas en la primera ronda de los cuartos. Quedaron definidas las semifinales y únicamente uno de los conjuntos que inició de local consiguió su pase: siguen adelante el primero, segundo y tercer lugar, equipos capitalinos, y el quinto lugar de la tabla general, el Monterrey.

Definiciones Rápidas

En un mejor empastado después del ridículo experimentado en la suspensión del partido de la NFL, Cruz Azul recibió al Querétaro con una cómoda ventaja, rápidamente ampliada a través de un gran gol de Elías Hernández, como dándole la bienvenida al visitante y obligándolo a colocar un tanto más en su cuenta pendiente. Después el partido cayó en un letargo que lo hizo parecer de la jornada 5, por la apatía del local y la infructuosa insistencia del visitante, luchando pero con escasa eficacia. La segunda parte arrancó más o menos igual hasta que Romo emparejó con certero cabezazo el partido, colocando un ligero interés para la media hora restante que se fue diluyendo sin mayores complicaciones para el líder.

En la comarca lagunera, el primer tiempo entre Santos y Monterrey transcurrió con opciones para ambos cuadros con una balanza inclinada hacia el cuadro local, que buscaba el gol que le diera el pase pero al mismo tiempo con el temor de recibir uno que lo obligaría a meter tres. Para la segunda parte, los locales se empezaron a desdibujar sobre el campo de juego y en un remate de cabeza, Sánchez puso la eliminatoria en un sitio casi inalcanzable para el rival, mientras que pocos minutos después, Funes Mori sentenció el partido y la eliminatoria a media hora de terminar el juego. Los laguneros siguieron intentando ya más por orgullo personal que con miras a lograr un objetivo fuera de sus posibilidades.

Un gol de diferencia

En duelo de fieras, el primer tiempo fue para la UANL, generando llegada y controlando la lógica del balón: no lograron concretar y el tiempo se diluyó para mantener un tenso empate con ventaja para los norteños. Pero el segundo medio explotó rápidamente: González mandó a Pumas arriba y pronto Carioca emparejó para que Mora volviera, casi de inmediato, a mandar el frente a los locales: tres goles en siete minutos que dejaban abierta la puerta para una media hora cardiaca. Los Tigres lo intentaron pero otra vez fallaron en el momento justo, en tanto para los Pumas, Alustiza anotó el tercero en la compensación, como para dejar el global con un gol de diferencia y no necesitar la posición en la tabla para avanzar.

Se esperaba otro duelo espectacular en el Azteca, aunque muy pronto Martínez marcó diferencia para el América, reforzada por Valdez en las inmediaciones de la primera mitad. Al inicio del segundo tiempo la expulsión de Salinas seguida por el tercero para los locales, obra de Aguilar. A poco más de treinta minutos el asunto parecía completamente finiquitado, pero el Toluca sacó el honor a falta de un mejor juego de conjunto y, aprovechando la displicencia del rival que se sentía ya ganador, se acercó vía impecable tiro libre de Sambueza en el ’68; sin bajar los brazos, siguieron luchando contra las diferencias en marcador y número de hombres al grado de alcanzar la segunda anotación conseguida por William, ya cerca del término del partido. El milagro no terminó de consumarse para los del infierno.

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