sábado. 20.04.2024
El Tiempo

Liguilla Guardianes 2020 [II]: La vuelta de los cuartos

“…se extrañó un mayor dramatismo en general…”

Liguilla Guardianes 2020 [II]: La vuelta de los cuartos


Después de dos triunfos de los locales y un par de los visitantes, se desarrollaron los partidos de vuelta en los que hubo algunas confirmaciones y otras decepciones, según lo visto en la anterior jornada: se extrañó un mayor dramatismo en general y por momentos algunos de los equipos parecían doblar los brazos antes de tiempo, mientras que otros cuidaban el resultado sin otro interés para satisfacer a la tribuna (virtual).

Resoluciones sin apuro

La misma dosis que aplicó el Puebla le fue recetada en su visita al Bajío: apenas saltaban al campo los equipos y el León se fue adelante con un autogol de Perg, como el que recibió en la ida: en este extraño juego de espejos, los de la franja se fueron desdibujando sin alcanzar a ser un reflejo parecido al equipo que tomó ventaja en el anterior partido. Con la ventaja, la Fiera empezó a reinar sobre el campo sin mayores problemas, transitando la pelota y manteniendo el control del campo, reforzado con el gol de Mena a la media hora de la primera parte. Con dos de ventaja, no se veía cómo la visita pudiera revertir, sobre todo a partir de la expulsión por innecesaria entrada, decretada a inicios del segundo medio. El anfitrión se asumió como mero administrador y los de la Angelópolis parecían satisfechos con haber llegado hasta estas instancias.

De la mano de Vucetich, el Guadalajara desarrolló un planteamiento preciso y con capacidad de adaptación según las condiciones emergentes del partido. Mientras que el América salió extrañamente apagado en función de las expectativas y los requerimientos, el Rebaño se lanzó al frente y durante la primera media hora fue claro dominador, coronando su esfuerzo con otro gran gol de Calderón, repitiendo la medicina del encuentro anterior. Movimientos tácticos desde la banca águila, pero la primera parte se diluyó sin generar lo mínimo necesario. Las Chivas mantuvieron orden en medio campo ante una ligera reacción del local, e incluso sentenciaron el partido con otro chicotazo de Calderón, acariciando el travesaño y botando hacia las redes. A veinte del final, todo estaba liquidado y cuando parecía caer el tercero, llegó en la contra el tanto de Martín, por no dejar: el clásico se va por partida doble a tierra tapatía.

Avanzan capitalinos sin ganar

El Pachuca visitó la capital para intentar darle la vuelta al marcador y así lo intentó con enjundia durante buena parte de la primera mitad: tres o cuatro llegadas claras al marco de la UNAM y, como en su casa, no podían mandar la pelota al encuentro con las redes. Los Pumas parecían continuar a la expectativa, como a partir del segundo tiempo en el estadio Hidalgo, y apenas se animaban a buscar ampliar la ventaja, como si supieran de antemano que el equipo de enfrente cargaba con algún tipo de maldición. En la segunda parte, la energía para buscar la puerta de enfrente fue disminuyendo por parte de los Tuzos y aunque se presentaron esporádicas opciones, tampoco pudieron despedirse con algún tanto para la estadística y se fueron en blanco ante unos Pumas calculadores pero que tendrán que mejorar en lo sucesivo.

Muy cuesta arriba la vuelta para el conjunto de la UANL, sobre todo por la mejoría que mostró el Cruz Azul, ahora también manejando la primera mitad con serenidad, sin caer en exceso de confianza y ajustando la maquinaria de medio campo hacia atrás. Sin poder agazaparse más, al usual estilo de su entrenador, los Tigres buscaron y tuvieron gran llegada en disparo de Dueñas que dio al travesaño y después al poste: no mucho más. En el complemento se la pasaron merodeando el área, lanzando centros y exhibiendo una generalizada ausencia de garra; un cabezazo al poste de Gignac, una falta que se marcó al filo del área y después un tiro- centro de Quiñones que se incrustó en la portería de una confiado Corona a diez del final. Pronto se apagó la tardía esperanza y los de Monterrey se despidieron del torneo sin ponerle drama al trámite.