ICL: ¿La última y nos vamos?

"Lo único que respalda mis dichos son las acciones cometidas por los funcionarios del ICL y sus consejeros. Como diría el citado Stirner: La responsabilidad de mí mismo."

ICL: ¿La última y nos vamos?

El Estado tiene su propia ley de violencia, pero la del individuo la llama crimen.
Max Stirner

Después de lo que he dicho y he publicado sobre el Instituto Cultural de León, no faltará quien argumente contra mi persona. Lo puedo decir con la frente en alto: No soy una autoridad. Lo único que respalda mis dichos son las acciones cometidas por los funcionarios del ICL y sus consejeros. Como diría el citado Stirner: La responsabilidad de mí mismo. Ni siquiera puedo compartir esa responsabilidad con los espacios donde publico. Vamos, en verdad creo que es responsabilidad de cada uno de los ciudadanos defender lo que considera sus intereses. Pienso que es injusto el trato que nuestro trabajo creativo ha tenido por parte de una instancia paramunicipal. Ergo, pueden decir y hablar las pestes que consideren necesarias a mi persona. Mientras tanto, ofreceré argumentos contra sus acciones inmorales o ilegales.

El problema son sus constantes pifias, y que éstas sólo aumentan. O para decirlo de otra manera, no paran. Revisemos cuatro cosillas que pueden molestar a más de uno.

  1. Nuestro ilustre hombre de letras y conocedor de “géneros” como el arte contemporáneo, actual director de comunicación del ICL, Luis Meza, compró publicidad para dicha entidad pública. La adquisición fue realizada a la Revista Índice León. De la cual, nuestro integro hombre que persigue un puesto en el área de comunicación del Fórum Cultural Guanajuato, es dueño. Si bien esto ya había sido señalado por varias personas, hoy se descara. Y ¿nuestros consejeros? Ya se van y sólo tienen una reunión más. Mientras ellos parten y llega el nuevo consejo, este funcionario hace su agosto. No serán capaces de pedir su cabeza, aun con los datos de su ilícito en la cara.
  2. En otro texto dije que no me creía la oligofrenia del director de desarrollo en las artes, Manuel Meza. Y parece que sigue haciendo cosas turbias. Para muestra, podemos ir a esta dirección electrónica y poner en el número de contrato: ICL/DG/030/15, nos da un dato un poco extraño y suspicaz: que se pagó un contrato por $20,300.00 por prestación de servicios profesionales a Javier Eduardo Salazar Miranda el día 30 de Agosto de 2015 para campaña del FIAC 2015. O yo soy muy estúpido o algo está pasando aquí muy malo. Pues dicho festival fue suspendido el día 16 de Julio de 2015. ¿Mes y medio después se paga una campaña por algo suspendido? Suena más raro, cuando fue él quien dio la información al portal periodístico Zona Franca antes de comunicarlo a cualquier consejero o medio: la nota, aquí. El texto tuvo cambios unas horas después, pero dice claramente que fue él quien dio la información. Ya ni pregunto qué pasa con el consejo.
  3. Las mismas personas que me enviaron los mensajes sobre el dinero del fondo de ahorros de los trabajadores (ver ICL: Éramos muchos y parió la abuela), me dicen por los mismos medios que el Director General, Luis Castrejón y Carlos Zaragoza, están tratando de dividir el consejo para que algunos sean expulsados bajo el siguiente argumento, expuesto en el actual reglamento:

Sección quinta

Atribuciones de los consejeros

Atribuciones comunes de los consejeros

IV. Manejar con discreción la información que obtengan dentro de las reuniones de Consejo Directivo;

Esto porque alguno de ellos, según, me paso la grabación de la reunión donde Fidel Valdivia acepta que tomaron ese dinero para la FeNaL. Habría qué aclararles que las reuniones son públicas y que ese simple hecho no es argumento suficiente. Es de risa que crean que pueden manipular aún más al consejo en su última reunión. Más cuando varias personas los han escuchado hablar bastante mal del Presidente del Consejo. El solo hecho de llegar a poner tal situación en los temas a tratar, demostraría todo lo dicho sobre el consejero presidente. En esta última junta tienen dos opciones los consejeros: a) ponerse las pilas y pedir las cuentas claras a los funcionarios; b) renunciar en grupo para rescatar algo de dignidad frente a la comunidad que representan. Difícil la tienen.

  1. Creo que esto es de broma. La simple idea promovida por Rodolfo Horner (presidente del consejo directivo del ICL) de que sea Alejandra Sánchez la directora de galerías es para morir de risa. Igual, la muchacha es buena para maestra en la universidad; pero de eso a tomar las riendas de varias galerías… no, no puedo parar de reír. Hace seis meses que tomó la dirección de MIL y no ha realizado ni una exposición; si la googleas no hay evidencia de ninguna curaduría suya en ningún lado; le preguntas a cualquier director de museo o galería, a curadores, a galeristas, y ni siquiera investigadores de su área la conocen. Lo único que tiene es la publicación de un libro y algunos textos en antologías. La chica puede saber de historia, no lo dudo, pero no ha demostrado que sirva para dirigir algo. Esperemos que la exposición que inaugura el 26 de septiembre dicho museo, por lo menos no deje en vergüenza, otra vez, al ICL. Será la primera vez que ella hace algo así; tampoco se espera que le quede bien, sólo que no parezca que se puso a recoger basura y se le ocurrió que eso representaba a los leoneses. Si este tema sale en la última reunión de consejo, como se está planteando, generará muchas suspicacias, pues es difícil sostenerla, y generará la idea de que la quieren imponer para que su despido sea de mayor costo para el erario.

Pues veremos qué pasa. Mientras, sigamos riéndonos de sus pésimas decisiones.