Jaime Panqueva
06:41
15/07/17

#AlonsoSeQueda

"Quizás por ello su destitución se origina en un conciliábulo, y luego, parece ratificarse con unas muy penosas declaraciones, de quienes tienen el poder de rectificar la torpeza cometida..."

#AlonsoSeQueda

A medida que se esparce la noticia y que los miles de seguidores del Teatro del Bicentenario de León salimos del estupor, una sola pregunta ronda nuestras mentes: ¿Por qué destituyeron a Alonso Escalante? El comunicado de prensa del Forum Cultural, además de carente de motivos o argumentos, tampoco habla de quién va a ocupar su lugar. Algo que demuestra improvisación, patente también en que a la reunión de Consejo Directivo sólo asistieron tres miembros: David González Flores, Ricardo Torres Álvarez y Arturo Joel Padilla. Los representantes del gobierno se hallaban, al parecer convenientemente, en la presentación del FIC en Guanajuato Capital.

Tampoco sabemos si la decisión es compartida por aquellos que velan los intereses ciudadanos, como los empresarios Roberto Plascencia, Luis Rodríguez Tirado, o el jurista e historiador, Mariano González Leal.

De la reunión, además, los consejeros salieron por la puerta de atrás sin dar la cara a los medios que ante el rumor ya se había congregado para pedir una versión coherente. El comunicado de prensa del día siguiente no da razones y se queda bastante corto en mencionar los logros de la gestión de Escalante.

Pero, se preguntará el lector: ¿por qué molestarnos en pedir explicaciones? Porque no se trata de un funcionario más, sino de uno ejemplar. Alonso Escalante es el responsable de que el Teatro del Bicentenario sea considerado como el mejor de este país, y lo ha logrado en una ciudad que hace diez años no pintaba para nada en este campo. No lo digo sólo yo, lo han comentado recientemente en los medios directores escénicos y de orquesta, cantantes de la talla de Ramón Vargas, críticos, músicos y asiduos a los géneros líricos, que comparten nuestra indignación.

Llegar a ese nivel se debe no sólo a la visión de Escalante para realizar temporadas de ópera, teatro y ballet memorables, o para atraer figuras de talla mundial a sus producciones, que bien han sabido aprovechar otros foros nacionales, como la sala Nezahualcóyotl o el mismo Bellas Artes. Escalante, además de malabarista eximio de los presupuestos, ha sabido mantener el Teatro del Bicentenario, a contrapelo de escenarios como Bellas Artes en CDMX, fuera de cualquier grilla política, del nepotismo, de los enredos sindicales y de las redes clientelares. Quizás por ello su destitución se origina en un conciliábulo, y luego, parece ratificarse con unas muy penosas declaraciones, de quienes tienen el poder de rectificar la torpeza cometida. Porque miembros del consejo directivo del Forum Cultural, como el Director del Instituto Estatal de la Cultura, el Rector de la Universidad de Guanajuato, el Presidente Municipal de León, o el Gobernador del Estado están en capacidad de reconsiderar la decisión.  

Como seguidores del Bicentenario, que ha sabido abrir la cultura a todas las edades y condiciones sociales, considero que tenemos el derecho a recibir una respuesta coherente por parte de las instituciones. Nos encantaría conocer su visión a futuro, y cómo van a mantener el nivel cuando muchos de los funcionarios con poder de decisión ni siquiera asisten con regularidad a los espectáculos que se han programado en estos siete años de logros permanentes. ¿Buscarán un personaje más a modo que sacrifique la calidad en aras de la clientela?

Espero que si todo ha sido un lamentable error, todavía haya posibilidad de recapacitar, de poner los intereses de los leoneses y de quienes vivimos en el estado por encima de las rencillas personales o políticas. Mientras tanto, y creo que hablo en nombre de muchos, nos sentimos en la obligación de seguir alzando la voz en los medios e invitar a quienes también demandan una explicación, a manifestarse con el #AlonsoSeQueda; y preguntarnos, de paso, ¿Por qué parece importar tan poco la cultura en un estado que se cataloga como uno de los primeros receptores en México de turismo cultural?

Comentarios a mi correo electrónico: [email protected]