Guanajuato, Gto. 24 mil niños, cada año, abandonan su educación básica en Guanajuato, lo que coloca a la entidad, en el ranking nacional, en la primera posición de deserción escolar en nivel secundaria, informó el Secretario de Educación de Guanajuato, Eusebio Vega Pérez, en el marco de su participación en el panel titulado “Educación y Calidad de Vida".

Con los niveles de deserción se podrían cerrar 20 a 25 escuelas en cada ciclo escolar.

El foro es parte del congreso nacional “Programas innovadores, para mejorar la calidad de vida” que tuvo como sede la capital del estado y en el que participaron Ana Eugenia Garduño Whitson, del Centro de la OCDE en México para América Latina que expuso el tema “¿Puede la educación incidir en el bienestar?”; El rector general de la Universidad de Guanajuato, José Manuel Cabrera Sixto, con el tema: "Educación para el Desarrollo Sustentable"; y el titular de la SEG, que abordó la temática de: “Educación Pública: Retos, Avances y Desafíos”.

En su ponencia, Vega Pérez señaló que uno de los grandes retos que se enfrenta la educación en Guanajuato es la deserción escolar, y considerado de alta prioridad en los objetivos.

Detalló que la deserción es multifactorial. Sin embargo, apuntó que es imperante capacitar a los maestros en su función educativa, ya que son un factor preponderante en la decisión de los educandos para abandonar la formación escolar.

Las cifras citadas, corresponden al censo poblacional del INEGI en el 2010, señalando que en el país no saben leer 3.7 millones de personas mayores de 15 años y más.

Vega Pérez destacó que en el gobierno de Márquez Márquez se busca alcanzar un Guanajuato educado, por lo que se ha diseñado una estrategia política llamada "impulso a la educación", que busca lograr el desarrollo integral de la niñez y la juventud.

Otro reto es garantizar el derecho a recibir educación de calidad y hacer cumplir el derecho constitucional, por lo que se ha puesto especial ahínco en dotar a las escuelas guanajuatenses con herramientas para lograr un nivel educativo óptimo.

Por su parte, José Manuel Cabrera Sixto –rector de la UG- aseguró que la educación tiene un impacto en la economía, no sólo de la entidad sino del país. Por lo tanto, entre mayor sea el grado educativo, mayores serán los niveles de ingresos, salud y bienestar de la población.

Manifestó que la UG sólo acepta al 35% de quienes que solicitan un espacio en las aulas, por lo que el Plan de Desarrollo Institucional (PLADI 2010 -2020) se propone aumentar la matrícula.

Resaltó que a la UG cada estudiante le cuesta alrededor de 70 mil pesos al año, por lo cual es imperante que las autoridades destinen más recursos a la educación, y en particular a la educación pública, que debe ser de calidad.

Resaltó que si los recursos siguen siendo limitados, la educación avanzará a paso más lento, mientras que en los países de la OCDE el crecimiento es mayor, lo que amplía más la brecha educacional.

En su intervención, Ana Eugenia Garduño Whitson aseguró que entre mayor sea el grado de escolaridad que se posea, los beneficios son mayores, pues hay más posibilidades de tener un mejor empleo y, por ende, los ingresos serán mayores.

La conclusión de los ponentes, en lo general, fue privilegiar la educación para alcanzar mejores índices en la calidad de vida.