Iniciaron los partidos entre los ocho equipos que se disputarán el título de la edición correspondiente al 2025, tras un sistema eliminatorio distinto que no dejó muy satisfechos a propios y extraños. Mala jornada para los cuadros alemanes, mientras que los españoles e ingleses dividieron triunfos y derrotas, en tanto el equipo francés y el italiano salieron airosos. No hubo empates y sólo un visitante logró ganar, en el partido más apretado, mientras que el resto fueron decididos por dos goles o más.

SOPLAN FUERTE LOS VIENTOS DEL NORTE DE LONDRES

El Arsenal estudió bien las posibilidades para controlar al Real Madrid y las puso en juego, sobre todo en la media cancha, tratando de cooptar territorio y mantener superioridad numérica, además de distribuirse los espacios para contener los lances siempre fulgurantes de los Merengues. Una primera llegada en confusión defensiva y después un disparo contenido por Courtois, fueron lo avisos iniciales de los de casa, ante un cuadro español incómodo, apenas asomándose a los 20 minutos con disparo de Vinicius y a la media hora vía un mano a mano de Mbappé a pase de Bellingham, contenido por Raya; todavía hacia el final de la primera parte, un par de rechaces del arquero belga salvaron a su puerta. 

Al inicio del segundo medio, otra vez Mbappé amenazó pero falló y a los ‘58, tras un pasaje que crecía en tensión por la igualada sin goles, Rice puso orden con tiro libre impecable de efecto preciso para estallar red y gradas en el estadio Emirates; diez minutos después, el cuadro inglés tuvo la gran oportunidad de ampliar el marcador en una triple oportunidad consecutiva pero otra vez el gigantón belga, la defensa y la fortuna impidieron el gol, por lo que tuvo que volver a aparecer Rice al ‘70 y repetir la dosis en modo espectacular: segundo tiro libre, ahora al ángulo, para ampliar la ventaja  y, aprovechando el momento, cinco minutos después, Merino la puso por abajo con parte interna para dejar un demoledor 3-0, nunca definitivo, se sabe. Para cerrar la pesadilla madridista, Camavinga salió expulsado al final por doble amarilla.

SORPRESA MILANESA ANTE EL GIGANTE MUNIQUÉS

Muy pronto a los seis minutos, el Bayern Munich mandó una primera señal con disparo apenas desviado, que encontró respuesta pronta del Inter de Milán; empezaron entonces las llegadas múltiples del local expulsadas por el arquero Sommer, incluyendo una pelota de Kane que dio en el palo al 26’. Reaccionó la visita y tras un primer aviso a la media hora de partido, rubricó una elegante jugada de Thuram que terminó en remate con parte externa del capitán Lautaro para mandar arriba, insospechadamente, a los suyos, después de una incesante presión del equipo ahora de blanco, quien tardó el resto de la primera parte en recuperarse del tanto en contra, acaso esperando que llegara el silbatazo para reorganizarse y procesar la frustración del resultado parcial, sobre todo después del esfuerzo desplegado al frente.

La primera opción del segundo medio fue también para el argentino, pero el arquero aguantó en última instancia. El cuadro muniqués se lanzó a buscar el empate sin mirar atrás hasta que el ingresado Muller, con toda su histórica trayectoria, logró empujar la pelota al fondo de la portería a cinco del final. Todavía tuvo otra opción el cuadro de casa pero de inmediato fue sorprendido por un latigazo milanés que le volvió a dar la ventaja, gracias a la contundencia de Frattesi, ya por finalizar, si bien todavía Kane tuvo la del empate, pero hoy no fue su día. Los de Inzaghi han dado una gran muestra de resistencia y eficacia al frente y se llevan un inesperado triunfo en casa de uno de los grandes equipos del mundo que los coloca de cara a las semifinales.

CONFIRMANDO EL MOMENTO

El Barcelona confirmó el gran momento por el que atraviesa con un fútbol que desde el inicio planteaba claramente su vocación ofensiva, ante un Borussia Dortmund que salió al campo tratando de contener el ataque rival, logro que sólo alcanzó para 25 minutos: en pelota parada, Rafinha terminó de empujar una pelota de Cubarsi que ya iba para adentro y el cerco amarillo por fin era vulnerado, tras varios avisos cada vez más cercanos y que anunciaban lo inevitable.. Alguna muestra de vida al frente de la visita con un par de remates que no terminaron de ser suficientes para inquietar la puerta azulgrana, mientras que los anfitriones seguían con la mira puesta en el arco de enfrente.

Para la segunda parte, tras otro arribo de los teutones, Lewandowski remató de cabeza a bocajarro para poner el segundo con todo el complemento por jugarse; los de casa sabían que era momento de poner la eliminatoria en puerto casi seguro y así fue: el propio delantero polaco culminó un mortal contraataque para poner el tercero al ‘66 y poco más de diez minutos después, Yamal hizo lo propio a pase de Raphina en otro lance fulminante y colocar el cuarto en favor del equipo catalán. Presionó los último minutos el equipo amarillo y generó dos o tres llegadas para el descuento pero no lograron romper el cero y vuelven a su casa con una muy pesada losa puesta por un equipo en estado de gracia.

BATALLA POR EL PARQUE DE LOS PRÍNCIPES

El Aston Villa saltó al campo del Paris Saint-Germain planteando cierta presión desde la salida, como mandando el mensaje de que no se iban a resguardar demasiado atrás, si bien los anfitriones emulaban la estrategia incluso con presencia en el área rival. Muy pronto, el abucheado Dibu se hizo presente con lucidoras paradas a sendos disparos de Dembélé y de Ousmane. El de casa controlaba el juego pero sin demasiada profundidad, en tanto la visita aguantaba sin inmutarse demasiado e incluso, pasada la media hora, sorprendió a todo París con el gol de Rogers en la primera vez que se acercaban a puerta: el príncipe Harry celebraba en el Parque de los Príncipes, como debía ser. Pero Doué emparejó al 40’ con preciso disparo que acarició el larguero para empezar a poner las cosas en su sitio.

Muy pronto en la segunda mitad, el georgiano Kvaratskhelia culminó un veloz ataque de los de casa con disparo a primer palo que se coló casi por la escuadra y así mandar al frente, con justicia, al equipo francés, quien pudo haberle dado la vuelta incluso hacia el final de la primera mitad. Siguió encima el equipo de Luis Enrique para buscar ampliar la ventaja, llegando por todas partes y en una contra el mismo Rogers dejó ir una buena oportunidad para el empate del cuadro inglés. Y fue sobre la hora cuando Nuno Mendes recibió un servicio de Dembélé para anotar el tercero, incluyendo buen recorte al arquero argentino: un gol que puede resultar clave en la definición de la serie.