León, Gto. En la actualidad, la tecnología es parte importante en la vida de la población, incluyendo niños, adolescentes, jóvenes y adultos. Parte de esa tecnología son los videojuegos, que bajo supervisión y una buena utilización de juegos acordes a su edad, en los menores tiene aspectos positivos que el infante puede desarrollar.

“El uso de videojuegos debe limitarse siempre en edades tempranas, por ejemplo, en los menores de entre cuatro y seis  años de edad se recomienda no utilizarlo por un espacio superior a 30 minutos” dijo Edna Melisa Vieyra González, psicóloga clínica de la Unidad Médica de Alta Especialidad No. 48, del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), en León, Guanajuato.

Los videojuegos, a través de un uso razonable en los niños, fortalecen la habilidad manual, concentración, agilizan la memoria a mediano y largo plazo, además de apoyarlos en el reconocimiento de algunas situaciones. Mejora la coordinación psicomotora al practicar y desarrollar habilidades que requieren combinar las acciones que ejecutan las manos con algún estímulo visual, es decir, coordinación ojo-mano.

Comentó la especialista del IMSS que también desarrollan la imaginación y la creatividad; existe diversión y relajamiento, sobre todo si los practican en conjunto con la familia. Agregó que mejora la capacidad lógica y resolución de problemas, desarrollo de estrategias, selección de información relevante, entre otras ventajas. Resaltó que el videojuego debe estar adaptado a la edad de los menores.

La doctora Vieyra González dijo que es importante tomar en cuenta que los videojuegos no sustituyen la actividad física que los niños deben realizar para gozar de una buena salud, sino que sean una actividad adicional para después de haber cumplido con obligaciones escolares, de la casa y deportivas.

Señaló que los juegos no deben contener violencia, debido a que esto puede afectar al infante, ya que, en un momento dado, puede trasladar la fantasía del juego a la realidad y volverse una persona agresiva.

Dijo que es muy importante que los padres de familia estén atentos a lo que ven y escuchan los menores y controlar el tiempo que le dedican a este tipo de tecnología, porque también podría ser contraproducente no controlar los tiempos designados a este pasatiempo y  generar un aislamiento del niño, además de llegar a provocar mal desempeño escolar.