Futbol • Liguilla apertura 2023 (III), semifinales • Fernando Cuevas
"... una vez más, Águilas y Tigres serán los contendientes, fortaleciendo la rivalidad que se ha generado en los últimos años"
Se jugaron las semifinales para determinar la serie definitiva por el título del certamen: una vez más, Águilas y Tigres serán los contendientes, fortaleciendo la rivalidad que se ha generado en los últimos años.
Águila confiada
Valdés anotó su primer gol de la noche cuando el partido apenas llegaba a su cuarto minuto, disparando con fuerza y ayudado por un ligero desvío. Así se presentaba el América en tierras potosinas para enfrentar al sorprendente San Luis, que salió con mucho ánimo pero con serios descuidos en la zona baja, al punto que Martín anotó el segundo para la visita cuando todavía no llegábamos al cuarto de hora de partido. Difícil remar contra esta dura corriente de dos goles en contra ante el líder del certamen, a pesar de haber dado algún signo de respuesta. Todavía los de amarillo dejaron una pelota en el poste y no obstante algún otro aviso de los anfitriones, la sensación era de que la diferencia se podría ampliar.
Así fue en la segunda parte. Valdés de media vuelta incrustó la pelota cerca del palo izquierdo para apuntarse su segundo y darle el tercero a los suyos. Con poco menos de media hora por delante del primer enfrentamiento, la eliminatoria parecía sentenciada. Entre una humedad que nublaba la vista, los de casa lucharon para tratar de acortar la diferencia pero hacia el final, Quiñones primero de cabeza y después en una barrida, anotó en un par de ocasiones para ampliar la diferencia y dejar el score con un contundente 5-0 que caló hasta los huesos junto con el frío que ya se sentía en la capital potosina: mucha diferencia en funcionamiento y en anotaciones para ser una semifinal.
A pesar de la enorme desventaja, el equipo de San Luis saltó al campo del estadio Azteca con la necesaria convicción para buscar lo imposible, pero buscarlo al fin para morir en la raya y resarcir en pequeña medida la vapuleada de la que fueron objetos en su terruño. Generó pronto un par de llegadas, antes de los diez minutos, mientras que el América, que presentó algunos cambios en la alineación, se veía confiado, quizá excedido. Otras aproximaciones a través de sendos remates de cabeza y el arquero Malagón ya se convertía en jugador destacado. Recompuso un poco el alternativo cuadro local y generó cierta presencia en el área potosina y el primer medio se diluyó sin movimiento en las redes.
Pero al inicio del complemento, por fin se hizo justicia y los de rayas lograron un merecido tanto gracias a una buena combinación que Zaldívar concluyó cerca del arco; justo el mismo jugador, hacia el final del partido, terminó por empujar la pelota en tiro de esquina para anotar el segundo personal y de su equipo para dejar el marcador definitivo, aunque lejos de alcanzar la diferencia establecida en el partido de ida. Como sea, los tuneros se despiden con plena dignidad del torneo, llevándose el reconocimiento de la más grata sorpresa de la competencia, llegando hasta estas instancias y luchando hasta el final, a pesar de estar todo prácticamente perdido. Por su parte, las Águilas tendrán que revisar esta derrota para ajustar el vuelo rumbo a la final.
Tigre controlador
Dos equipos universitarios con nombres de felinos se encontraron en la semifinal. Primero en la casa de la UNAM, donde los Pumas trataron de imponer estilo y condición para sacar alguna ventaja, al tiempo que la UANL movía sus piezas con la experiencia que da la constancia para estar presente en estas instancias. Una pelota parada fue el primer acercamiento por parte de los de casa, seguido de un disparo por arriba, ambas jugadas terminadas por Salvio, que antecedieron a un proceso de equilibrio por parte de los norteños que en elusiva jugada dejaron una pelota en el poste. Hacia los veinte minutos finales de la primera parte, ambos porteros levantaron la mano -o la bajaron justo a tiempo- con un par de sendas salvadas en un momento en el que la pelota podría entrar en cualquier portería.
Los de blanco salieron otra vez con la mira al frente durante los quince minutos iniciales de la segunda mitad, provocando errores en la salida y contragolpeando con buena dinámica, pero una falta fuerte a media cancha de Trigos le significó la tarjeta roja, revisada por el VAR, y el partido se inclinó irremediablemente: los Tigres aprovecharon la situación y diez minutos después se fueron adelante con gol de Angulo, quien disparó desde fuera del área venciendo el lento recorrido del portero unamita. Una media chilena y un remate de cabeza fueron las respuestas de los anfitriones que tuvieron que ver cómo en su casa eran derrotados, en particular por la inferioridad numérica que terminó por ser la circunstancia clave del partido.
Con todo todavía por decidirse, el cuadro de la Universidad Nacional salió dispuesto a remontar el marcador adverso, mientras que el representativo de la Universidad de Nuevo León se veía calculador, como esperando a ver los movimientos del rival. Pasado el cuarto de hora, un penal detectado por el VAR fue ejecutado por Huerta pero Guzmán se lanzó abajo con precisión y logró evitar la caída del arco, sucedida casi de inmediato, sin embargo, gracias a sólido cabezazo de Fernández. El empate en el global todavía le daba el pase a los neoleoneses pero la presión ya estaba bien instalada, aunque rápidamente volvió a disminuir por el buen empalme de Vigón tras recibir servicio de Córdova, quien realizó una lucidora conducción para poner la pelota en el área. Los veinte minutos restantes vieron una pelota en el poste del local y un par de avisos peligrosos de la visita.
Para el complemento, los esquemas se mantuvieron como al inicio y el resultado fue una mayor neutralización mutua, con menos llegadas a puerta y una lucha más incesante en medio campo, apenas con un par de pelotas que salieron relativamente cerca de la puerta de los Tigres. La jugada que terminó por decantar la eliminatoria fue, otra vez, una expulsión para los Pumas, esta vez más rigorista, dirigida a Bennevendo debido a una falta cometida por atrás. Los quince minutos que le faltaban al cronómetro se diluyeron entre roces, posiciones adelantadas y control del felino de origen asiático. De cualquier manera, los Pumas lograron desarrollar un gran torneo y el proyecto que ahora arranca con Mohamed luce prometedor: veremos si la directiva lo sustenta.