Liguilla Clausura 2025 (IV): La vuelta de las semifinales
"Una semifinal que se resolvió con mayor holgura y otra en la que se presentó un drama varias veces visto"
Una semifinal que se resolvió con mayor holgura y otra en la que se presentó un drama varias veces visto, particularmente en la historia de esos dos equipos. Arbitrajes con decisiones puntuales que pasarán al terreno de la polémica, como suele suceder. Al final del día, el uno y el dos de la tabla general fueron mejores a lo largo de los 180 minutos y disputarán la serie definitiva.
El diablo domina al tigre
El infierno conocido como Nemesio Díez abrió sus puertas para recibir al equipo de la UANL, necesitado de salir con el triunfo para llegar a la final; el Toluca, por su parte, se presentó con buena disposición para buscar el partido, más allá de la apretada ventaja por la posición en la tabla. Los primeros minutos fueron de llegadas fluidas de parte de los de casa, hasta que un jalón en el área, reclamado por Paulinho y confirmado por el VAR, generó un penal bien cobrado por Vega para mandar arriba a su equipo al 18’, ante el júbilo del respetable. Siguieron las acciones con similar forma, ahora con un poco de más posesión felina, hasta que a la media hora lograron una anotación que terminó anulándose por discutible fuera de juego: uno de esos goles que deberían contar. Se presentó un pasaje de peloteo, con ambos equipos sin profundizar y los visitantes bajando prematuramente su rendimiento y mostrando cierta displicencia al momento de inquietar la puerta de enfrente. Hacia el final, cerca estuvieron los del Estado de México de ampliar la ventaja pero el último toque no fue preciso en dos o tres ocasiones.
Con un cambio del conjunto de casa para reforzar la línea de cinco, las acciones arrancaron más o menos en similar enfoque que la primera parte. Fueron los Diablos quienes, a pesar del juego semilento, avisaron un par de veces, mientras que los Tigres lanzaron su respectiva advertencia con cabezazo que se fue por arriba, poco antes de los diez minutos de juego. Empujaron los de Nuevo León durante los siguientes minutos, lapso en el que desplegaron su mejor momento, aunque sin generar peligro de manera consistente. Pasada la discreta presión de la visita, el anfitrión volvió a controlar las acciones y finiquitó el partido con un par de anotaciones en secuencia producto de sus bien pensados recorridos: primero, en fugaz contragolpe al 79’, Vega se llevó la pelota y sirvió al recién ingresado Gacelo López quien, tras recibir y gambetear a un defensa, envió su disparo lejos del alcance del portero. Y para coronar su momento, el propio Alexis condujo nuevamente con buena velocidad y ahora soltó tiro a primer poste para anotar el tercero, tres minutos después. Los Tigres tendrán que reagruparse y pensar en el momento transicional que viven de cara al siguiente torneo.
El fantasma en la máquina, otra vez
En el ahora llamado estadio azulcrema, el América arrancó sin perder tiempo y rápidamente generó peligro en tiro de esquina, mientras que el Cruz Azul trataba de acomodarse en el campo según lo planeado y en función del resultado global. La presión continuó: Álvarez la tuvo pero su remate resultó muy flojo y directo a las manos de Mier, y después, un centro que se paseó angustiosamente por la puerta azul, además de un par de salvadoras intervenciones de Mier. Apenas al cuarto de hora de juego, evidenciando un planteamiento basado en el amontonamiento por parte de la visita. Siguieron las llegadas en el abrumador dominio amarillo, incluyendo un balón en el poste enviado por Martin, quien generó un posible penal que no se marcó. Pasada la media hora, por fin se presentó la Máquina en área ajena y al menos ya pasaba la media cancha de vez en vez, si bien el balón volvió a recorrer su portería sin encontrar rematador. Sobrevivió milagrosamente la portería del equipo de azul en la primera parte.
Salió un poco más adelante y mejor distribuido el cuadro del Cruz Azul para enfrentar la segunda mitad, incluso con llegada de Bogusz, mientras que el América mantenía su postura de buscar la portería pero ahora con más dificultades de inicio. Y de pronto, Faravelli recibió gran servicio de Sánchez para empujar la pelota al 57’ y romper el cero, aumentando a dos de distancia en el global, rápidamente reducida por un error del portero que derivó en penal bien ejecutado por Henry a falta de 25 minutos de juego, si bien en jugada previa se debió señalar mal saque. Ya con los cambios y toda la ofensiva en el asador, los locales se lanzaron en busca del gol que igualara el global y cerca estuvieron con cabezazo del propio Martin que dio en el travesaño y cayó en la línea de la portería. Fue un aviso: poco después, en tiro de esquina, Borja metió la pelota en segundo remate tras tiro de esquina al 79’. La maldición y los fantasmas volvieron a presentarse entre los pistones de la Máquina, pagando el precio de un mal planteamiento inicial e incurriendo en fallas específicas en el episodio final del partido.