Guanajuato, Gto. En un rincón de su casa, Sebastián toma de su mesa de trabajo algunas de sus creaciones: un soporte plegable negro que también funciona como llavero, esferas de colores vivos con figuras intercambiables y otros objetos hechos con su impresora 3D. Lo que era el diseño 3D digital es algo en lo que tenía muchísimo interés en aprender… y crear cosas a partir de mis diseños fue como un regalo, dice. Cada pieza es el testimonio de que un nuevo comienzo es posible.

Su habitación es su taller, su estudio, su rincón creativo. Y es también una metáfora: ahí se ve todo lo que ha construido… incluso a sí mismo. Porque ya no es el de antes.

Sebastián fue un joven en conflicto con la ley penal. Él recuerda esa etapa como tensa y profundamente incierta. Sí me sentí muy angustiado, muy preocupado… había mucha confusión sobre muchísimas cosas. No era algo que quisiera que estuviera manteniéndose en mi vida. 

El programa de Post-Externación

Una vez que cumplió su medida de sanción, se integró al Programa de Post-Externación, implementado por la Dirección General de Reinserción Social para Adolescentes (DGRSA) de la Secretaría de Seguridad y Paz, a fin de apoyar a adolescentes, jóvenes y adultos jóvenes en conflicto con la ley.

A través de este programa del Gobierno de Guanajuato, Sebastián recibió atención psicológica para fortalecer su autoestima y toma de decisiones; su familia fue acompañada por trabajo social para mejorar la comunicación y el tiempo de calidad; participó también en activación física; pero fue el área de formación la que encendió una chispa en él: gracias a un proyecto productivo, pudo arrancar su propio negocio de impresión 3D, que hoy le permite pagar sus estudios y apoyar económicamente a su familia.

El área laboral me apoyó muchísimo con mi negocio de impresión 3D. Me gustó desde hace mucho el tema de crear, de construir, de diseñar.

Una ingeniería en la UVEG

Hoy, Sebastián estudia la Ingeniería en Desarrollo y Gestión de Software en la Universidad Virtual del Estado de Guanajuato (UVEG), ha tomado cursos especializados, como el de Ciberseguridad del Instituto de Innovación, Ciencia y Emprendimiento para la Competitividad, forma parte del programa Semillero de Talento de una organización de Monterrey, y colabora con Game Code Studios, una empresa guanajuatense dedicada al desarrollo de videojuegos. Ha obtenido certificaciones en modelado, producción, diseño para impresión 3D y simulación, gracias a cursos gestionados por el Gobierno de Guanajuato.

Pero quizá lo más importante es que Sebastián ya no camina solo. Hoy forma parte de un equipo que capacita a más jóvenes en diseño 3D, compartiendo lo que aprendió y abriendo puertas para más personas. 

Enseñar a más jóvenes

Sobre una repisa guarda los videojuegos que marcaron su vida. Tengo una pequeña colección... son los que han sido más importantes para mí. Uno de ellos cuenta la historia de un forajido que, al final de su camino, busca redimirse y dejar algo bueno al mundo. Es la historia de alguien que quiere darle un mayor propósito a su vida… no simplemente ser una persona que vaya causando dolor.

Hoy, Sebastián también enseña como parte de un equipo que capacita a más jóvenes en herramientas de modelado tridimensional. Mi redención es tratar de brindar oportunidades a más personas, al igual que yo en su momento… y también puedan llevar a cabo sus sueños.

El Programa Post-Externación de DGRSA y su influencia en casos de reincidencia

El Programa de Post-Externación de DGRSA opera en todo el Estado de Guanajuato, con un modelo integral reconocido dentro y fuera de México. Su ingreso es voluntario y se acompaña de una red familiar y profesional: psicólogos, criminólogos, abogados, pedagogos, trabajadores sociales, entrenadores y orientadores laborales que los guían con visitas, llamadas y canalizaciones.

Desde su creación, no se ha registrado ningún caso de reincidencia. Su éxito ha sido reconocido a nivel nacional y en foros internacionales por su enfoque integral para la reintegración social juvenil: atención emocional, prevención de riesgos, acompañamiento familiar y desarrollo de habilidades para construir un nuevo proyecto de vida. 

Esta historia también forma parte de la estrategia Coordinación Operativa de la Nueva Fuerza de Inteligencia Anticrimen (CONFIA), que pone al centro la dignidad humana y la prevención desde la raíz. Pero, sobre todo, que reconoce que una segunda oportunidad puede cambiarlo todo. 

No es el final. A veces recibimos esta oportunidad de poder mejorar. Sebastián lo sabe. Su historia no se imprimió de un golpe. Se fue modelando con confianza, apoyo y voluntad. Sabe que lo que estuvo roto, se puede rehacer; y lo que aún no existe… se puede crear. Él está reconstruyendo algo más grande que un proyecto: está reconstruyéndose a sí mismo.