Primeras conclusiones en incorporación de léxico
Gabriela Cortez Pérez
El objetivo principal de mi investigación ha sido identificar la técnica que resultara más provechosa para la incorporación de léxico, para lo que se trabajó con cuatro: el método de definiciones, el de ejemplos, el de redacción de oraciones y el de lección lexical. Los primeros tres se retomaron de un trabajo doctoral de Puerto Rico, Vocabulario y enseñanza: Estudio de la relación existente entre los métodos empleados y la incorporación del léxico nuevo a la competencia lingüística de estudiantes universitarios puertorriqueños, de Gloria Matanzo Vicens, y el que se añadió a la muestra de Zacatecas, la lección lexical, es una propuesta del Doctor Juan López Chávez.
Los resultados arrojados por la muestra de Zacatecas son esclarecedores para la planeación del incremento de léxico, y aunque presentan poca diferencia cuantitativa —sobre todo en el método de definiciones frente al de lección lexical—, la distinción la hace el contraste cualitativo, es decir, el aprovechamiento que cada uno de los alumnos obtuvo.
El método de definiciones evidenció cifras altas de rendimiento, y es importante usarlo si lo que se persigue es buscar el reconocimiento de la palabra, pues es efectivo para eso; sin embargo, apela sólo a la memorización, pero el que se reconozca o se memorice un término no supone su adecuada comprensión ni producción.
El método de ejemplos es interesante porque muestra la oración en contexto, pero esto puede descontrolar a los alumnos en el caso de vocablos reales —es diferente en la muestra por el empleo de léxico inexistente en el español—, porque hay palabras polisémicas, que varían su significado de acuerdo con el contexto, entonces, para enseñarlas, se deberían presentar en todas las situaciones posibles, o al menos hacer una referencia a ellas.
En lo referente al método de oraciones, puede, en efecto, parecer provechoso, el problema radica en que trabaja sólo con la consulta de la definición de la palabra en el diccionario y, a partir de un significado no siempre esclarecedor, se pretende que el alumno la emplee con la flexión que conlleve su inserción dentro de una oración, esto es, desde una definición se quiere que el estudiante adquiera la palabra en todas sus dimensiones
El problema de estos métodos es que regularmente se trabajan por separado, lo cual implica una serie de repeticiones de la misma palabra con el mismo contexto, por lo que no se atiende el nivel pragmático en comprensión ni en producción.
La lección lexical propone no un método, sino la conjunción de los tres métodos anteriores —que salvan el nivel de reconocimiento, el morfológico, el sintáctico y parte del nivel semántico—, más una parte que ejercita el nivel pragmático, aunque hay que aclarar que en la propuesta realizada en el trabajo no sólo se retoman los métodos de Matanzo, sino que además se modifican y estructuran según los niveles de la lengua, tanto en comprensión como en producción.
Así, aunque la lección lexical tenga resultados cuantitativos muy similares al método de definiciones, ésta es más abarcadora porque asegura la incorporación de la palabra deseada —no sólo el reconocimiento o memorización del vocablo— al conectarse los niveles de la lengua, es decir, con ella se logra que se dé el reconocimiento fonológico y gráfico de la palabra, aunado al establecimiento de la relación que tiene con los otros elementos gramaticales para insertar la palabra nueva en una construcción mayor de acuerdo con el significado que también se debe incorporar tanto para la comprensión como para la producción, así como su flexión de acuerdo con la clase de palabra que sea.
Los resultados generales no tienen diferencias significativas a partir de las variables, ya que se mantienen casi los mismos. La única variable que tiene más distancia numérica es la de tipo de escuela, con ella resulta más evidente el aprovechamiento en Letras, lo que obedece a aspectos como el nivel sociocultural, la procedencia escolar, la escolaridad de los padres y a que en tal unidad se espera más producción y reflexión sobre el lenguaje. Además se obtuvieron al hacer el conteo de aciertos y errores, con base en éstos se midió el aprovechamiento. La comparación con la tesis de Puerto Rico no se pudo hacer con el mismo procedimiento, ya que la autora contabilizó sólo los aciertos para así medir la cantidad de repeticiones efectivas que necesitaron los alumnos que encuestó, por lo que hubo necesidad de un nuevo conteo para la muestra de Zacatecas.
Los resultados de la comparación entre las dos muestras posiciona con menos cantidad de repeticiones a los alumnos de Zacatecas, es decir que éstos requieren de menos exposiciones que los alumnos de Puerto Rico, pues la ventaja es de más del doble: en el método de ejemplos 6.55, en el de definiciones 5.24 y en el de oraciones 5.06, lo que indica que si los alumnos de Puerto Rico necesitan de 8 a 12 exposiciones, mientras los de Zacatecas de 3 a 5.
La reflexión a la que conduce este trabajo es que los métodos empleados para la incorporación de palabras nuevas no son ineficaces, el error está en la manera de presentarlos, ya que emplearlos de manera aislada no garantiza que el vocablo se incorpore más allá del solo reconocimiento.
Su eficacia se comprobará al reunirlos y presentarlos como una estructura que lleve al alumno a la incorporación de palabras a través de los diferentes grados de complejidad de la lengua, para así lograr la comprensión y la producción. Será, pues, la conjugación de los métodos lo que permita trabajar la enseñanza del léxico como un eje integrador y no sólo como una mera lista de palabras que hay que memorizar.