Es lo Cotidiano

DRAMATURGIA

Acuerdo prenupcial [ACTO I, Escena 2]

Eduardo Celaya

Acuerdo prenupcial [ACTO I, Escena 2]

[Ir a la primera parte de esta obra]

Personajes

Sara
Esteban
Gilda
Julia
Juan Pablo
Don Carlos

ACTO I

Escena segunda

El escenario es el mismo, han pasado un par de horas. esteban, en mangas de camisa, camina por la sala, pensativo. juan pablo escribe en un pequeño libro, mientras gilda y esteban continúan hablando.

gilda                        Entonces, ¿se llegó al acuerdo con los socios?

esteban                    Sólo te tienes que reunir con ellos. Toda la negociación ya se hizo. Quieren formalizar contigo, por respeto a Don Manuel.

gilda                        Estarás conmigo en esa reunión, claro.

esteban                    Así es, no quiero que se pierdan los acuerdos, son muy favorables para nosotros.

gilda                        Entiendo.

esteban                    Juan Pablo, por favor notifica de lo que hemos discutido hoy a la Junta Directiva, mañana entregas ese informe y hablamos sobre tu nueva posición.

juan pablo            Sin falta.

gilda                        ¿Es todo?

esteban                    Es todo. Disculpa la hora pero era necesario revisarlo hoy mismo para presentarlo mañana a primera hora.

gilda                        Muy bien, creo que todo ha quedado claro. Ahora, si me disculpan, creo que me retiraré un momento, mi hija Julia llegó esta noche y no he podido recibirla como se debe.

esteban                    No sabía que Julia estaba en la ciudad.

gilda                        Era lógico que estuviera aquí, Esteban. Viene a ayudar a Sara con los preparativos, se quedará sólo algunas semanas. Asuntos familiares.

esteban                    Es una lástima que no siguiera en la compañía, es brillante.

gilda                        Lo mismo pienso, pero ha tomado su decisión. En fin, discúlpenme, no sé si los vea después, así que me despido.

juan pablo            Buenas noches, señora.

esteban                    Buenas noches, Gilda.

gilda                        Buenas noches, siéntanse en su casa. Si necesitan algo, llamen a Don Carlos.

esteban                    Claro.

gilda sale por la puerta derecha. esteban se va a sentar junto a juan pablo. Durante la siguiente conversación no debemos ver dos personas peleando, más bien negociando, casi con frialdad, a pesar de lo que hablan. Sin embargo, el sentimiento no se debe perder.

esteban                    Listo. No había de qué preocuparse, te dije.

juan pablo            No le gustó la idea.

esteban                    No le estaba preguntando.

juan pablo            Esteban, no sé si sea lo más correcto.

esteban                    ¿Por qué no? No te doy el puesto por otra cosa más que por tus capacidades. Don Manuel confió en ti y ahora yo lo hago.

juan pablo            Yo sé, estoy consciente. No por nada he trabajado ahí desde hace años.

esteban                    ¿Entonces? ¿Cuál es el problema?

juan pablo            Pues, (suspira) tengo miedo de lo que pretendes hacer.

esteban                    Mira, la única persona que podría impedirlo es Gilda, y ella ya no tiene poder en la compañía. Don Manuel me dejó la Dirección a mí, no a ella. Yo tomo las decisiones. Si le damos esa posición a Sara, no podremos continuar con el plan que tenemos.

juan pablo            Pero es hija de Don Manuel. La compañía es de su familia. No puedes pretender adueñarte de todo sin más.

esteban                    Eso no va a pasar, al menos no en el papel. La compañía va a seguir siendo de su familia, pero quien mandará seré yo, contigo ayudándome. Por eso me voy a casar con ella, para que su familia no quede fuera del todo.

juan pablo            No me gusta hacer esto. (Pausa). Y sabes muy bien a lo que me refiero.

esteban                    No, no sé a qué te refieres, Juan Pablo. No necesito que haya más obstáculos en la Junta, con la actual presencia de Gilda basta. Y ya que tú ocupes tu posición, el cambio será mucho más fácil.

juan pablo            Y si se llega a saber.

esteban                    A saber, ¿qué? Llevas años trabajando ahí, nadie va a sospechar de ti, y además, todo lo has logrado tú solo, ¿no es así? Don Manuel confiaba en ti, la Junta confía en ti. ¿Qué te preocupa?

juan pablo            Me preocupo por ti.

esteban                    Mira, ya he hablado con algunos miembros de la Junta, hasta Palacios estaba de acuerdo. Ese puesto es tuyo, nadie siquiera considera a Sara para ocuparlo.

juan pablo            Me preocupa que doña Gilda se oponga.

esteban                    No te preocupes. Mira, todo está resultando de acuerdo al plan. Necesito que me ayudes a sacar a Gilda.

juan pablo guarda silencio, esteban se le acerca.

esteban                    Si lo que te preocupa es nuestra relación personal, sabes que eso no es asunto de nadie más que de nosotros dos.

juan pablo            Lo sé.

esteban                    Sara no tiene idea. Los que saben lo que pasa entre nosotros dos son sólo algunos amigos, nadie más.

juan pablo            Pero, ¿si alguien más se enterara?

esteban                    No va a haber problema, después de todo, voy a ser el esposo de la hija de Don Manuel, del fundador. Nadie podría sospechar nada de mí.

juan pablo            Pero... ¿si alguien llega a enterarse, antes que Gilda esté fuera de la Junta?

esteban                    Nuestra posición en la compañía ya está decidida, deshacernos de Gilda es sólo una formalidad. Me caso con Sara por el acuerdo que hice con Don Manuel, y para que no haya sospecha alguna de nuestras intenciones. Y sobre tú y yo, sabes que hemos estado juntos mucho más tiempo del que llevo pretendiendo ser su prometido.

juan pablo se levanta y comienza a recoger documentos de las mesas.

juan pablo            Sigo creyendo que no es justo para Sara, ni para su familia.

esteban                    ¿Qué me case con ella? Es lo que ella quiere, y Gilda, y lo quiso su padre.

juan pablo            ¿Y tu plan de quitarles la compañía?

esteban                    ¿Tú crees que esa compañía podrá seguir prosperando en manos de Sara, o de Gilda?

juan pablo            ¿Siempre fue tu plan hacerlas a un lado?

esteban                    No realmente, pensaba crecer al lado de Don Manuel. Pero cuando él me ofreció la Dirección, a cambio de casarme con su hija, todo fue muy claro.

juan pablo            Esteban, ¿no te vas a arrepentir de casarte con ella?

esteban                    No te diré que me encanta la idea, pero Don Manuel pensaba que yo era el más adecuado para dirigir la compañía, y no quería que su familia quedara fuera, por eso me pidió que me casara con su hija. Incluso Gilda estuvo de acuerdo.

juan pablo            Pero nunca la has querido, nunca la vas a querer.

esteban                    (Dudoso). La estimo. Hemos llegado a ser buenos amigos.

juan pablo            También tú y yo.

esteban                    Tú y yo no somos sólo amigos.

juan pablo            Precisamente. Y ya de por si es molesto esconderlo ahora. Cuando estés casado, ¿qué va a pasar?

esteban                    Nada va a cambiar.

juan pablo            ¿Vas a engañar a Sara conmigo? ¿O yo voy a ser el engañado?

esteban                    No hay ningún engaño Juan Pablo, llegamos a un acuerdo. No podían pretender que naciera un amor por Sara solamente porque sus padres me eligieron, ¿o sí? (Pausa). Son negocios. A ti te quiero, a Sara la estimo, y pues… voy a seguir con esto porque es lo que a todos les conviene.

juan pablo            Sigue sin parecerme justo.

esteban                    Lo sé, yo sé que no es justo para ella, pero aprenderá a acostumbrarse.

juan pablo            Si alguna vez se entera.

esteban                    Créeme, a ella no le conviene no casarse conmigo.

juan pablo            ¿Ella sabe del acuerdo?

esteban                    Claro que no.

juan pablo            ¿No le piensas decir nunca?

esteban                    No creo que sea necesario. Y en todo caso, quien debió decirle era Don Manuel, o Gilda, yo no, yo no soy parte de su familia.

juan pablo            Vas a ser su esposo.

Se escucha un auto acercarse a la puerta principal. don carlos entra por puerta derecha, pasa rápidamente y sale por puerta izquierda.

esteban                    Debo irme, no tengo deseos de hablar con Sara por ahora.

juan pablo            Yo me quedaré un poco más, tengo que ordenar todos esto.

esteban                    Como quieras. Saldré por la puerta trasera. Por favor, si preguntan por mí, diles que me tuve que retirar.

juan pablo no responde, esteban toma sus cosas y sale por puerta derecha. juan pablo comienza a recoger papeles y a ordenarlos. Pocos segundos después, entra julia por puerta izquierda. Tras ella entra sara.

julia                          Gracias Don Carlos. Disculpe que no lo salude cuando llegué, sabe que me da gusto verlo otra vez.

don carlos           El gusto es mío señorita, pase usted.

juan pablo            Julia. Que gusto verte.

julia                          Juan Pablo. ¿Qué haces por aquí?

juan pablo            Tuvimos junta con tu madre.

sara                          Esteban, ¿ya se fue?

juan pablo            Si, tuvo que irse.

don carlos           ¿Necesita algo más señorita?

julia                          No Don Carlos, muchas gracias.

don carlos           De acuerdo, con permiso.

don carlos sale por puerta derecha.

sara                          Creo que me iré a refrescar a mi habitación. Julia, quiero mostrarte los arreglos que elegí, bajo en un momento. Con permiso Juan Pablo.

juan pablo            Buenas noches.

sara sale por puerta derecha. Se escucha un auto alejándose.

julia                          ¿Cómo has estado, Juan Pablo? ¿Cómo va el trabajo?

juan pablo            Bien Julia, gracias. Perdón… necesito hablar de algo contigo. La buena noticia es que estoy a punto de tener un puesto en la Junta Directiva.

julia                          ¿De verdad? ¡Que gusto me da! Te lo mereces.

juan pablo            Si. Bueno, no te diré que no me lo esperaba, Esteban siempre lo tuvo en mente.

julia                          Pero me dijo mi madre que ella quería que Sara tuviera ese puesto.

juan pablo            Todavía quiere. Esteban le informó hace un momento, y no se puso nada contenta.

julia                          Pues claro que no, ella quiere que todo quede en familia, tal como mi padre deseaba. Pero si me preguntas a mí, tú eres mucho más capaz, has trabajado más que ella. Sara solamente nació en esta familia, ese es su mérito.

juan pablo            Puede ser. Ese puesto pudo haber sido tuyo.

julia                          Probablemente, no sé. Mi padre me quería en la compañía, pero jamás me habría dado la Dirección, no creía que las mujeres fuéramos capaces. Y se enojó mucho cuando decidí casarme con Jorge. Ahí perdí mi oportunidad.

juan pablo            ¿De verdad?

julia                          Todo debía ser como él ordenaba.

juan pablo            Pues parece que aun es así.

julia                          Lo sé. Mi madre siempre vivió bajo sus órdenes, y ahora que él no está, es ella la que manda, pero en realidad sigue obedeciéndolo. Y Sara… (Suspira.) Bueno, ella siempre ha sido buena hija.

juan pablo            Y Esteban también lo obedece.

julia                          ¿Cómo? ¿Por qué lo dices?

juan pablo            Se va a casar con Sara.

julia                          Pues, será que le conviene. Pero, ¿qué tiene que ver mi padre con eso?

juan pablo duda en hablar. Finalmente, logra hacerlo.

juan pablo            Julia, hay varias cosas que necesitas saber. No sé realmente qué hacer, y tienes que ayudarme.

julia                          ¿Qué pasa, está todo bien?

juan pablo            Yo sé que puedo confiar en ti. Siempre he visto que eres una persona más madura, menos tradicionalista. Creo que puedes entender mejor algunas cosas.

julia                          Me estás preocupando, ¿qué es lo que pasa?

juan pablo            Te lo diré como es. Esteban no puede casarse con Sara.

julia                          No te entiendo.

juan pablo            Esteban y yo… estamos juntos. (Silencio). Somos una pareja.

julia                          ¿Qué quieres decir?

juan pablo            Sabes a lo que me refiero.

julia se queda pensativa, aunque no molesta.

julia                          No puedo decir que me sorprende. Tomando en cuenta que he visto y vivido cosas que mi hermana no, ni mis padres, pero… ¿Quieres decir que Esteban y tú son homosexuales?

juan pablo            Así es.

julia                          Dios mío, esto va a destrozar a Sara.

juan pablo            Pero… no puedes decírselo.

julia                          ¿No puedo decírselo? Claro que voy a hacerlo. No puedo permitir que mi hermana esté en un matrimonio falso.

juan pablo            No puede saberlo, Julia.

julia                          Sara no debe casarse con Esteban. No tengo ningún problema con que él y tú estén juntos, pero no puedo permitir que mi hermana sufra de esa manera. (Comienza a irse, apresurada).

juan pablo            Pero está el acuerdo.

julia                          ¿Cuál acuerdo?

juan pablo            El que hicieron Esteban y tus padres. El acuerdo que dice que Esteban se casaría con Sara y él a cambio sería el Director de la compañía.

julia                          (Completamente aterrada). ¿Hicieron qué?

juan pablo            ¿No sabías?

julia                          Por supuesto que no.

juan pablo            Pues ahí lo tienes. Esteban y Sara se casarán.

julia                          Pero… pero esto es absurdo. No sólo que mis padres hayan puesto precio a mi hermana, sino que Esteban haya aceptado.

juan pablo se queda pensativo un momento.

juan pablo            Y hay algo más… Esteban…

julia                          (Al borde de las lágrimas, rayando en la rabia). ¿Qué más hizo?

juan pablo            No… nada.

julia                          (Sin escuchar a juan pablo). Ahora entiendo por qué fue todo tan rápido. El compromiso, el nombramiento de Esteban, los planes de la boda.

juan pablo            Tienes que proteger a tu hermana. Yo no puedo, no me incumbe, no sabría qué hacer.

julia                          Gracias por decirme, Juan Pablo. Realmente te agradezco.

juan pablo            Debo retirarme. Buenas noches.

juan pablo recoge sus cosas y sale por puerta izquierda. Las luces bajan lentamente, dando fin al acto.

Continuará.

***

Eduardo Celaya Díaz (Ciudad de México, 1984) es actor teatral, dramaturgo e historiador. Fundó el grupo de teatro independiente Un Perro Azul. Ha escrito varias piezas teatrales cortas, cuentos y ensayos históricos. Esta obra, Acuerdo prenupcial, cuyo texto se publica por primera vez en exclusiva para Tachas, se estrenó en marzo de 2015 en Apeiron Teatro; a la fecha ha tenido tres temporadas.

[Ir a la primera parte de esta obra]

[Ir a la portada de Tachas 162]