CRÍTICA
Tachas 525 • Chiara: el signo del sentimiento intuido • Lorena Aviña
Lorena Aviña

Luquín, A. (2023). Chiara. Mano Santa Editores.
Todo lo que cabe en un nombre puede ser histórico. Todo lo que se espera, algún día será un suceso histórico, aunque el radio de recuerdo sea sólo una voz que lo evoque en la memoria, en la imagen o en la poesía. Esto lo comprende en su más reciente poemario titulado Chiara (2023, Mano Santa Editores) Álvaro Luquín, quien crea un yo-lírico fiel a sí mismo para permanecer en contacto con Chiara, su sobrina recién nacida.
En los 31 poemas que comprenden la obra, Álvaro Luquín crea una realidad en la descomposición de sonidos, donde la poesía es la herencia reducida en palabras viejas e incomprensibles. Se habla desde la ausencia, como una lucha contra el tiempo para prevenir, para intentar proteger a Chiara del acontecimiento más aterrador, complejo y sinuoso: la vida. En esta comunicación atemporal, donde el yo-lírico ha dejado de existir, se explica el mundo como una sucesión de desorden al nivel de una carta de realidad para Chiara, un consejo de apertura para la comprensión de la vida desde más de una perspectiva.
En cada poema existe un dejo de melancolía en forma de qué hubiera pasado si… del yo-lírico. En Chiara la poesía es un vínculo, una forma de representación de la vida: el punto de encuentro es la experiencia humana vivida por quien escribe y la vida que le espera a la receptora de los poemas. De cierta forma, el yo-lírico también logra vivir a través de Chiara al preguntar qué se siente, cómo se ve, hacia dónde va la realidad en el momento en que se ha dejado de ser parte de ella. A su vez, la voz que enuncia se reconoce como una falla o un portador de ella, un error que poco a poco fue carcomiendo la existencia hasta su reducción.
El libro está plagado de crudeza y nostalgia, pero también de un instinto protector tangible y de todo el amor que esa voz no alcanzó a mostrarle a Chiara. Es una suerte de bienvenida y despedida mezcladas en la necesidad de comunicación y encuentro, donde la poesía es un instrumento para la relación a distancia de ambas partes. De cierta forma, Chiara hace tangible esa cualidad de la poesía por ser tiempo y movimiento: en la transformación de la palabra, Álvaro Luquín permite vislumbrar un fin noble para la escritura y la lectura; nos dice: esta es la única forma en que te veré crecer, Chiara, lee, conóceme y permítete saltar al vacío de tu inconsciencia, el único lugar donde estarás a salvo.
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Lorena Aviña (Zapopan, Jalisco; 1996). Egresada de la licenciatura en Letras Hispánicas por la Universidad de Guadalajara. Actualmente es editora asistente de la Revista Carta Económica Regional y es miembra fundadora del Taller de Poesía en voz alta Conticinio.