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Diálogo de sordos
Pues, no. Nada nuevo ofrecieron los actores políticos de Guanajuato, a propósito de la Crisis de Seguridad, interpretación común que se dio al aumento en los índices delictivos en León, documentados por las estadísticas de la procuraduría de justicia del estado y por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía, el INEGI, y percibidos de manera escandalosa por los ciudadanos.
Los bandos se atrincheran en sus intereses partidarios, mientras la cuenta sigue corriendo.
Llama la atención la vehemencia con la que la alcaldesa, Bárbara Botello, hace público su respaldo a los mandos policiales de la ciudad: el general Miguel Pizarro Arzate, secretario de Seguridad Pública Municipal, y al director de la Policía Preventiva, el abogado, Francisco Aguilera Candelas, para dejar en claro que descarta por ahora, cambios en esas instancias. Esa es su facultad y es su responsabilidad.
El punto es que el discurso de la Alcaldesa, tiene varios ángulos que no resisten el más elemental análisis de contenido.
Primero en entrevista y más tarde en comunicado de prensa, la presidenta municipal de León, “subraya” que sus jefes policiacos han “desarrollado en nueve meses de gobierno una estrategia integral en materia de prevención para abatir el índice delictivo en la ciudad”. Es simple: si la han desarrollado, no sirve. Ya llevamos tres semanas como el Pípila, con los índices sobre la espalda.
Que trabajan en fortalecer la seguridad pública y en reconstruir el tejido social, cierto, pero hasta ahora, esas acciones son notoriamente insuficientes.
Egresaron 27 elementos de la Academia Metropolitana de Seguridad y a fin de año se espera que se gradúen 180 más. Sí, pero en octubre deben liquidar 380 policías, que se sumarán a los que se manifiestan en las calles, porque no les han pagado. Las cuentas no salen, siquiera para mantener la misma nómina.
El saldo del Operativo Centinela, o los desfiles militarizados de fin de semana en las colonias de León, es hasta ahora únicamente de revisiones ilegales a vehículos y detenciones por faltas administrativas. Así consta en sus comunicados.
En cambio, hay que reconocer a la alcaldesa, Bárbara Botello, que, a tropezones y como sea, sí se ocupa de la depuración de los policías reprobados, que sí son una herencia que ni la estridencia proverbial de Ricardo Sheffield, puede ocultar.
La procuraduría estatal de los Derechos Humanos, recién informó de la disminución de quejas contra los policías. 58 vs 200 en el mismo lapso de 2012, en la Administración anterior.
En este mismo espacio reconocimos en su momento, la gestión de 73.5 millones de pesos del Plan Nacional de Prevención Social de la Violencia y la Delincuencia a invertir en infraestructura y acciones de prevención social, con los que se pusieron en marcha los centros Búho de atención a pandillas, y el Multipol. Esas son iniciativas importantes, que no consignan las tablas de la PJEG ni del INEGI.
Esa, y acciones como las charlas y talleres en escuelas, la actividad del Instituto Municipal de la Mujer, o la organización vecinal, es la parte del trabajo de reconstrucción del tejido social, a la que hace referencia constante la presidenta municipal. Es importante y se realizan. Pero, no impactan.
Y no pueden impactar, si las declaraciones públicas del dirigente panista, Alfredo Ling, o sus compañeros de partido, el diputado Diego Sinhué y los senadores, Pilar Ortega y Fernando Torres, a más del procurador de justicia, Carlos Zamarripa o el secretario estatal de seguridad, Álvar Cabeza de Vaca, etc. etc. etc., sólo sirven -y con esa intención se lanzan-, para lo que la gasolina al fuego.
A la mano, la lista enorme de acciones que enlista en su comunicado la alcaldesa, Bárbara Botello, parecieran ociosas sus referencias a que “la ciudad va muy bien”, “los ciudadanos no están desencantados” y que a ella la “eligieron abrumadoramente más de 350 mil leoneses”. Lo primero es medible y lo segundo nunca ha sido puesto en tela de juicio. Que la alcaldesa siga en el intercambio a mitad del ring, es decisión suya y de sus asesores. Sus opositores políticos, felices.
Y que el general Pizarro y el abogado Aguilera, tengan toda su confianza, es apuesta y riesgo de la presidenta municipal. Pero en el medio, hay un espacio enorme para la zozobra de los ciudadanos y la acción de la delincuencia. Aquí aguardamos. Si bien, nos va.
Mazda
Mazda se casa con el estado de Guanajuato. Ayer anunció la construcción en Salamanca, de su nueva fábrica de motores, con una inversión de 120 millones de dólares.
Hicieron la presentación el gobernador Miguel Márquez y Keishi Egawa, presidente y CEO de Mazda Motor Manufacturing de México.
Mazda se instaló hace dos años en el estado, y su llegada, atrajo a otras tres empresas japonesas: Aki Seat, Daikyo Nishikawa y Tec Keylex. En su nueva planta, van a producir unas 230 mil unidades al año, a partir de octubre de 2014, y generarán 100 nuevos empleos.
Márquez, afirma que la instalación de estas empresas, es una oportunidad para que los jóvenes del estado se integren a esa nueva oferta laboral en Guanajuato. El gobierno del estado, ha otorgado 900 becas para la capacitación de personal que formaría parte del equipo de esa empresa.
Por su parte, el presidente de Mazda de México, Keishi Egawa, aseguró que esta planta es importante en la proveeduría de Norteamérica, Centro y Sudamérica, y la tercera a nivel mundial en la producción de ese tipo de motores.
Esta nueva planta es adicional a las inversiones que ya había anunciado Mazda: su inversión global, asciende a 770 millones de dólares.
La Jaula
Resulta que desde el martes, en el Distrito Federal, sacerdotes católicos y laicos estudian el fenómeno de la “posesión demoniaca”.
De acuerdo con los exorcistas participantes, el congreso tiene como objetivo, advertir sobre “los peligros” de las corrientes new age (meditación, yoga y reiki), que porque abren las puertas del averno. Y es que el principal centro de capacitación para los exorcistas, es México.
La Coordinación General de Exorcistas de la Arquidiócesis Primada de México (CEAM), avalada por el cardenal Norberto Rivera Carrera, arzobispo primado de México, es quien convocó al “X Congreso de Exorcistas y Auxiliares de Sanación y Liberación”.
Los participantes se adentrarán ahí en los “conocimientos básicos, bíblicos doctrinales, teológicos, normativos, litúrgicos y experienciales para un correcto ejercicio de la sanación y la liberación”.
Pedro Eusebio Mendoza Pantoja, quien es el exorcista más importante de México, ordenado en 1961, de casi ochenta años de edad, explica que los estragos del demonio pueden constatarse a través de los medios masivos de comunicación que se dedican a “hacerle publicidad a Satanás”.
Creencias aparte, respetables todas, nada mal lo del congreso de exorcistas, porque en México, hace rato que los demonios andan sueltos.
Comentarios y quejas: [email protected] y @FPacomares.