Sin maquillaje

Cada vez, el diputado priista Guillermo Romo Méndez, el diputado torero, se atreve más a salir sin maquillaje: ahora fue para decir a la alcaldesa Bárbara Botello, su admirada compañera de partido y Presidenta Municipal de León, que ni crea que va a apoyar su propuesta de endeudamiento que hace al Congreso del Estado.

La quita de maquillaje consiste en que para nadie es un secreto que el presunto legislador se encuentra día a día más cerca de los blanquiazules que de los tricolores.

El diputado Romo anunció sin rodeos que en su momento votará en contra de la solicitud de reestructura de deuda y del nuevo crédito que entregó la Presidenta Municipal de León, y que alcanzaría los 2 mil 200 millones de pesos.

Por intrascendente que sea el desempeño de Romo en las tareas legislativas, su amago no es menor, dados los equilibrios precarios que arrojan las sumas de curules en cada una de las fracciones; a la hora de contar los votos, hasta el de Romo cuenta.

Ante esa declaratoria, habría que esperar un pronunciamiento de la dirigencia estatal priista y de la coordinación de su grupo parlamentario, a quienes Romo prueba otra vez que no está dispuesto a hacerles el menor de los casos.

Y habría que preguntar también si algo pasó en la relación entre el mismo diputado Guillermo Romo y la alcaldesa Bárbara Botello, de quien aquél se declaraba fan.

Un encontronazo entre ellos haría las delicias para los opositores panistas en el municipio; es más, podríamos apostar doble contra sencillo a que hoy, en su gustada sección de opiniones a la prensa, el dirigente del PAN local, Alfredo Ling, se referirá al diputado priista en términos de “persona congruente”, y como en esto las casualidades no existen…

Con el discurso absolutamente extraviado, a Romo se le ocurre que antes de autorizar un crédito al municipio para obras de infraestructura del SIT, deberían de mejorar las condiciones de empleo y seguridad de los leoneses.

Por si la alcaldesa no lo había leído: “No porque seamos del PRI vamos a solapar que se sigan endeudando sin razón; mejor no hay que cerrar fuentes de empleo; en lugar de hacer más avenidas necesitamos comer, traemos hambre y tenemos inseguridad”. Si con el cierre de fuentes de empleo, la referencia es a transportes Castores, bueno, pues la incógnita se despeja.

Para comenzar la operación, Romo Méndez ni siquiera asistió al encuentro de la alcaldesa Bárbara Botello con el resto de los diputados priistas locales. Tampoco aceptó una invitación a comer y mejor se fue a visitar a Vicente en el Centro Fox.

Hay quienes dicen que así se llevan los priistas.

A las calles

Los grupos sociales van a las calles. En León, unas doscientas personas de la comunidad gay participaron en la séptima Marcha de la Diversidad, de la calzada de los Héroes a la Plaza Principal, por Madero. “También nosotros somos familia”, fue la consigna.

En realidad la exigencia es tan clara que no necesita mayor explicación. Reclaman un trato igualitario a las uniones entre dos personas del mismo sexo, respecto al que se da a los matrimonios heterosexuales tradicionales.

Sobre el tema se pronunció también ayer el rector de la Catedral Metropolitana de León, José Salomé Lemus, sólo para refrendar el respeto de la Iglesia católica a esa comunidad, de la que demanda reciprocidad.

En el Gobierno del Estado, recurren al expediente de poner el tema en el ámbito de facultades del Congreso del Estado –lo cual es atinado-, y allí los panistas, con un priismo condescendiente (salvo un par de excepciones agradecibles) abortaron ya una Iniciativa en ese sentido.

Respetables todas las posiciones y más allá de esa manía añeja de los políticos mexicanos de dar carácter de políticas públicas a sus creencias –que no convicciones- personales, la comunidad gay, en tanto que integrada por ciudadanos, exige y merece respuestas. Pero no.

A la par, en Acámbaro, estudiantes de secundaria y preparatoria se manifestaron y exigieron justicia para su compañera Jessica Janet, presunta víctima de un intento de feminicidio.

Los muchachos gritaron consignas en demanda de seguridad en su municipio, vecino del estado de Michoacán, y escenario del asesinato de Ygnacio López Mendoza, alcalde de Santa Ana Maya, en aquel estado, victimado por el crimen organizado en tierras guanajuatenses.

La protesta de los estudiantes se originó en la agresión a Jessica Janet Ruiz, estudiante de la preparatoria Miguel Hidalgo, agredida por dos alumnos del CBTIS 147. La golpearon con una piedra en la cabeza y le provocaron una fractura. La convocatoria se hizo a través de las redes sociales.

La comunidad gay y los muchachos de la preparatoria; las mujeres y los demandantes de tierra, están saliendo a las calles mientras que, desde los escritorios del oficialismo, no se hace siquiera la lectura del fenómeno y menos se ordenan acciones. Reactivos, por siempre.

Los políticos y la confianza

Se llama Corporación Latinobarómetro y emitió su estudio de opinión anual, que se aplica en 18 países de América Latina, para evaluar el desarrollo de la democracia, la economía y la sociedad.

Ahí nos dicen que la confianza de los mexicanos en la democracia se hundió con Felipe Calderón Hinojosa: Con Vicente Fox fue del 59 por ciento; Felipe se la llevó al 40 por ciento y con Enrique Peña Nieto, ya va en el 37 por ciento.

La precariedad, la pobreza, la desigualdad y la discriminación, refleja el estudio, son el talón de Aquiles de la región.

A la democracia la atoran la desigualdad en el acceso a los bienes políticos y a los bienes económicos.

La confianza de los mexicanos en la democracia subió enormemente con la alternancia en el Gobierno de la República en el año 2000, pero bastaron dos sexenios de ejercicio panista para que de nuevo se fuera a pique.

En 2012 regresó el PRI al poder con Enrique Peña Nieto, con un 40 por ciento de confianza y en 2013 sólo un 37 por ciento de la población dice creer en la democracia.

Los dos factores relevantes que afectan al país, los conocemos todos: la violencia y el narcotráfico.

A los participantes en el estudio se les preguntó también su percepción económica: el 46 por ciento de los mexicanos encuestados acusaron que la situación económica es nada buena.

La Jaula

Desde la UNAM nos informan que este fin de año, 16 millones 200 mil trabajadores recibirán aguinaldo, un millón 980 mil menos que en 2012. Del aguinaldo, el 60 por ciento irá a la compra de alimentos; 20 por ciento al pago de deudas, tarjetas de crédito y préstamos, y el resto a gastos de temporada como ropa, artículos electrodomésticos, o reparaciones del hogar.

El 47 por ciento de las compras decembrinas se realizarán en el comercio informal. En comparación con 2012, esto equivale a un aumento del nueve por ciento. Bien lo decía Clinton: “es la economía, imbécil…”

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