INICIA LA LXV FILUG
Con poética declamatoria, Ricardo Castillo recibe el premio Jorge Ibargüengotia
“No he hecho nada más, sino cronometrar el aniquilamiento”, expresa el vate

Guanajuato, Gto. Ricardo Castillo es un poeta 24X24, 7X7, 52X52 y 12X12. Es el poeta que con una seductora declamatoria recibió el VI Premio Jorge Ibargüengoitia de Literatura, que le otorgó la Universidad de Guanajuato en el marco de su sexagésima quinta edición de la Feria Internacional del Libro.
Sin mayor gala que una camiseta ilustrada con un diseño del Pac Man, una de sus inspiraciones, Castillo, el poeta nacido en Guadalajara, Jalisco, México, en 1954, narró un relato de historias familiares, donde el sarcasmo y el melodrama fueron los protagónico en una historia que llevó a la confesión del escritor: “no he hecho nada más, sino cronometrar el aniquilamiento”.
El autor de “El pobrecito señor X (1976), “El pobrecito señor X / La oruga” (1980, Premio Nacional de Poesía Carlos Pellicer), “Concierto en vivo” (1981), “Como agua al regresar (1982), “Ciempiés tan ciego” (1989), “Nicolás el camaleón” (1989, Premio de Poesía de la Universidad de Querétaro), “Borrar los nombres” (1993), “Islario” (1995) y “La máquina del instante” (2000), agradeció la inspiración en el “genio chocarrero” de Jorge Ibargüengoitia, “quien ahora, en virtud del premio deja asociado su nombre a mi trayectoria; tal vez no de bala perdida, pero sí, -cuando menos-, de tiro desviado”.
El poeta se dijo arropado con el reconocimiento y agregó: “con beneplácito total acojo al señor Jorge Ibargüengoitia como el laico patrono de mis despojos literarios”.
Metáforas y alegorías, simbolismos, bajo una entonación emotiva y un lenguaje corporal de una oratoria y una declamatoria que reclaman volver a tener vigencia. Fue toda una exposición de expresión lúdica que lo llevó por eso a tener una obra incluida en la “Asamblea de poetas jóvenes de México” (Gabriel Zaid, Siglo XXI, 1980) y en la antología de Escritores jaliscienses (Sara Velasco, Universidad de Guadalajara, 1985).
Recibió el premio a manos del rector general, Luis Felipe Guerrero Agripino.
Castillo fue definido por el escritor e investigador, Anuar Jalife Jacobo, quien habló a nombre de los integrantes del jurado, como “escritor de gran influencia en la poesía contemporánea, precursor de alguna de las rutas más arriesgadas de la poesía mexicana”.
La obra del homenajeado y la de Jorge Ibargüengoitia comparten “el sentido de humor, el rechazo a lo solemne y la atención a lo cotidiano”, señaló, quien añadió que Castillo se distingue por “una búsqueda permanente de un nuevo lenguaje para la poesía”.
A lo largo de cinco décadas Ricardo Castillo ha escrito una obra de intenso lirismo que ha derivado hacia una expresión de gran poder performativo, afín al teatro experimental y la poesía sonora. “Con su poesía nos muestra la vida secreta de las palabras, su caótica autonomía”.
Otras de las obras de Castillo son “Nuevo islario, antología personal; Quartz/Cuarzo”, Il relámpago” y “Tercer islario/Terceiro islario”.
Una de las orientaciones de su labor poética (la exploración oral de los poemas) lo ha llevado a realizar numerosas lecturas de memoria en teatros, bares o festivales de poesía hablada, así como a interactuar con músico(a)s, coreógrafo(a)s y bailarine(a)s. Su más reciente trabajo, Il re lámpago, incluye dos CD de audio que vinculan estrechamente el texto de los poemas a su expresión oral.
La FILUG
La inauguración de la sexagésima quinta edición de la Feria Internacional del Libro de la Universidad de Guanajuato (FILUG) “Leer en comunidad” fue la otra parte de la fiesta.
En esta edición son la Universidades de Colima y la Universidad de Salamanca (España) las instituciones educativas invitadas, las cuales se suman con actividades a la fiesta del libro que se llevará del 23 de marzo al 2 de abril del presente año.
El Rector General, Luis Felipe Guerrero Agripino, habló del avance progresivo de la FILUG y dio la bienvenida a editores(as), libreros(as), comunidad, sociedad, talleristas, conferencistas, a toda la comunidad.
Recordó se trata de un espacio que rinde homenaje a In Memoriam a Ibargüengoitia, a David Huerta; y al poeta Ricardo Castillo, ganador del VI Premio Jorge Ibargüengoitia.
La concurrencia escuchó un video mensaje de Ricardo Rivero Ortega, Rector Magnífico de la Universidad de Salamanca, representado en la UG por Jacobo Sanz Hermida, Director Editorial de la Universidad de Salamanca.
El Rector de la Universidad de Colima, Christian Jorge Torres Ortiz Zermeño, se dijo honrado de representar a su institución en la FILUG.
José Osvaldo Chávez Rodríguez, Director de Extensión Cultural, recordó que además de promover la lectura, la Feria Internacional del Libro de la Universidad de Guanajuato es un espacio "Muy humano de encuentro en torno a los libros”.
Cumplido el ceremonial, hubo recorrido por exposiciones inauguradas en las galerías universitarias. En el Patio del antiguo Colegio Jesuita de la Santísima Trinidad, resonaban los ecos dejados al aire por el poeta Ricardo Castillo: “lo importante es emplazar a las y los lectores a leer los momentos de la vida, porque la poesía es pura riqueza sensorial”. Para rematar:
“Lo mejor de la poesía no está en la literatura, sino en la vida, y luego -tal vez- en la muerte”.