Sábados
Antonio León
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Hermanita, ven conmigo. Hay aviones cada hora. Laura, llévame a Tijuana a recibir a mi amigo que viene a dar un taller. Es aquí derecho por toda la escénica, pero no te detengas en los topes, que se nos trepan las damnificadas del bordo. No, este poeta no es maricón, como todos los otros que te he presentado. Ay bueno, y como los que no te he presentado. Lo conocí hace un par de años; me regaló su libro, un disco de Marlene Dietrich y me llevó a un café de viejitos que leen el periódico. El café era como chapopote de Mordor con anfetas, me recordó las fiestas de 1994.
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Esto es Ensenada, Ángel, está bonito pero todo cierra a las dos de la mañana. Los bares pues, lo que nos interesa. Si sales, debes tener cuidado: tras los puestos de mariscos está el mar y como ya sabes, la naturaleza es una perra del infierno, como decía Jodorowsky, o Bukowski, o Raquel Pankowski, ya no me acuerdo. Pinche thinner. No, si se te acaba el pueblo no es como Mario Kart para nintendo 64, donde te caías a la chingada y una pequeña nube-grúa te devolvía a la pista.
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Ya vámonos al taller de escritura creativa. ¿Oulipo? no, no te lo manejan; pero ahorita que les digas que no se necesita talento para escribir, se van a excitar. Vuelvo en dos horas. Este bar es el Pit’s, culero como él mismo. Ahorita les decimos que se callen a la verga con sus pinches aullidos sicalípticos y que le suban a Billy Idol.
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Ella es Fabiola, una de mis mejores amigas, te va a llevar a pasear a la ruta del vino. Hay unos viñedos, pero el vino del pueblo no está bueno, a mí me gusta comprar un tinto Chileno de cartón para ir a pasear al Valle de Guadalupe. También hay restaurantes, el único recomendable es el de mi amiga Ismene, pero no sé llegar porque lo mío es el autismo participativo. En la noche vamos a otro bar. Este es el bar en el edificio más alto de Ensenada, no recuerdo el nombre, pero es bien divertido entrar y sentirse en “la risa en vacaciones” estando en el lobby. Es que aquí nos dijeron a inicios de los ochenta que se iba a poner a toda madre, pero luego nos caciquearon los atunes y todo valió chichi de pulpo. ¿Cuál vamos a cantar en el Karaoke? ¿More than words? Ay esa me encanta, me recuerda mucho unos poemas de Fabio Morábito.
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Una de las jainas del taller te dedicó un poema, dice algo de cuerpo de Hércules. Cuánto daño ha hecho el Tafil.
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En mi Ensenada la gente acude a los eventos de literatura. Y compran libros. Mira qué chistosos los morros greñudos del taller, hay que invitarlos a la fiesta, se ve que ladran sabroso. Mañana te llevo a otra carreta de Mariscos. Está la más famosa, pero
es sólo para chilangos, además una vez llegó a comer Alejandro Fernández, y a ese cabrón ya lo debes odiar ¿no? en Guadalajara hay una hora diaria de él en la radio. Es como aquella película distópica de Christian Bale, pero sin altavoces en las plazas. Mejor vamos a la carreta del gordito, o a Primo Nava, lugares libres de jotillos vernáculos en mallones. Te presento uno de mis bares favoritos, El pirata, aquí hice mi primaria. En uno de mis poemas aparece el Kalín, cantinero finísimo del lugar. Que no se entere, me va a retirar el crédito.
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Lo siento por haberte llevado a la playa en la mañana, pero es lo que hay. El Vinoso Ponto, como dirían los metaleros épicos de pelazo cuidado con reestructurador de papaya y shampo con aceite de argan. Vamos a la tienda de discos usados que más me gusta, atienden unos gemelos: son los hermanos Gallagher que nos merecemos, pero éstos sí tienen su talento y no se dan sus llegues entre ellos como los del brit pop. Está de la chingada el incesto, ya me documenté sobre el tema en un libro nefasto de Anais Nin. Anais de hueva “Anais Nini” qué buen chiste. Vamos a llevarnos el de Neil Young y el de Christian Death, el problema es que no los podemos meter en tus viáticos.
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Bienvenido al Calafia, el mejor bar de México, atendido por el distinguido cantinero que te voy a presentar. Mire Leo, él es Ángel, viene desde Guadalajara, igual que los travestis de la entrada. Hay que atenderlo bien, para que vuelva y también debemos suspender los discos de Maná de la rockola. Se enoja cuando le dicen que los de Maná son de su comarca. ¿Nunca ha visto un poeta encabronado? pues no lo quiere ver. Yo vi un poeta on fire en alguna de esas películas de semana santa. Era Enrique Rambal, pero hablando en castizo, llegó a un templo y había tianguis cultural. El bato se encabronó y armó un desvergue. Mira qué bonita le decoración: posiciones sexuales de acuerdo a los signos del zodiaco, pero desde ahora te digo que la astrología es una estupidez, pues yo no puedo hacer esa maroma ni queriendo.
Tienen a Motorhead, en la rockola. Pero son discos que sólo se pueden tocar si es sábado.
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Antonio León, Poeta. Originario de Ensenada pero vive en Mexicali. Poemas suyos han sido publicados en diversas antologías y revistas a nivel regional y nacional, así como en publicaciones electrónicas. Actualmente se dedica en cuerpo y alma a combatir su reciente colitis nerviosa, así como a ocultar su edad real y a escribir poemas sobre Gremlins.