DISFRUTES COTIDIANOS
Tachas 471 • Ólafur Arnalds: Evolución para la paz • Fernando Cuevas
Fernando Cuevas

Desde las tierras del norte islandesas, donde habitan seres como Bjork y Sigur Rós, surgen sonidos que desafían al frío, rompen el hielo o lo moldean para darle un aspecto de nostálgica resonancia. Desde una base neoclásica, el multiinstrumentista islandés Ólafur Arnalds (Mosfellsbær, 03/11/86) integra aditamentos propios de los terrenos del rock, particularmente del post rock, que se encuentran con tesituras pop y electrónicas de contexto, de pronto saltando a la experimentación en fondo y forma. Primero fue baterista con espíritu metalero y después, respondiendo a una petición de los alemanes Heaven Shall Burn para meterle piano y cuerdas a su álbum Antigone (2004), fue escuchado por Robert Raths, quien lo fichó para su disquera Erased Tapes.
Debutó con piezas numéricas integradas en Eulogy for Evolution (2007), obra que nos captura en un parsimonioso y maravilloso ciclo vital, por momentos exultante y cerrando con intensidad, guiado por el piano en compañía de un cuarteto de cuerdas y enfática batería ocasional, mientras que en el EP Variation of Static (2008) se introdujo en los campos de la experimentación electrónica, tejida en las cinco piezas que conforman la obra, como en las siete de Dyad 1909 (2009), de corte clásico, mientras que para Found Songs (2009) realizó la escritura de una canción diaria a lo largo de siete días, a manera de construir un pequeño ciclo de hábito creativo, que repitió en Living Room Songs (2011), ahora desde la comodidad del hogar.
Entre ambas grabaciones de lógica semanal, presentó ...And They Have Escaped the Weight of Darkness (2010), obra que nos abre el panorama lumínico para seguir adelante hacia donde sea que nos dirijamos, inveterando una delicada electrónica con música de cámara en vertiente de contenida emotividad. Compuso la pieza para el corto Blinky TM (Robinson, 2010), secundando a un robot amigo de un niño; el largo Órói (Jitters, 2010), musicalizando el despertar adolescente del protagonista e iniciando una fructífera relación con el cineasta Baldvin Zophoníasson (conocido como Baldvin Z), y otro corto titulado In George’s Cave (Kohler, 2010), justo para empezar a consolidar su presencia en el terreno fílmico.
Junto con su colega Janus Rasmussen, nacido en las islas Faroe, de orientación minimalista y parte de la banda Bloodgroup, formó el dúo Kiasmos, enclavado en la tecno-experimentación y que ha publicado el iniciático 65/Milo (2009) en complicidad con Rival Consoles; el primer largo titulado Throws (2012); el homónimo Kiasmos (2014), ya en proceso de asentamiento, y los EP’s Swept (2015), Looped (2015) y Blurred (2017), integrado por cuatro piezas y un par de remixes que husmean en rítmicas difuminadas de esas que te van envolviendo sin pedir permiso. En tanto, siguió trabajando para la pantalla en varios cortos, documentales y videos, incluyendo el filme Another Happy Day (Levinson, 2011), en el que se inmiscuye en una compleja dinámica familiar.
Posteriormente produjo Stare (2012), un EP en conjunción con el alemán Nils Frahm, con quien continuó la asociación creativa para entretejer los EP’s Loon (2015) y Life Story/Love and Glory (2015), además del largo Trance Frendz (2016), grabado en ocho horas sin prácticamente edición alguna: todas las composiciones se integraron en el álbum doble Collaborative Works (2015), desplegando un minimalismo a cuatro manos de ánimo sintético. El teutón también le ayudó para remezclar su disco del 2007, conmemorando los diez años de su lanzamiento, a la par que se publicaban algunos sencillos.
Ya fichando con la disquera Mercury, concibió For Now I Am Winter (2013), integrando orquesta completa y las vocales de Arnór Dan, además de incluir Words of Amber y Only the Winds, de gélida belleza; le siguió Gimme Shelter (Krauss, 2013-2014), en la que acompaña las penurias de una adolescente embarazada en busca de un refugio tanto físico como emocional, en la línea de Vonarstræti (2014), acerca de una maestra que lucha por sacar a su hija adelante, de nuevo trabajando con Baldvin Z. Para The Chopin Project (2014) y homenajear el gusto de su abuela por el genio polaco, se asoció con la pianista alemana-japonesa Alice Sara Ott con quien grabó nocturnos sobre piedra, al tiempo que entregó la música para la serie de la BBC, Broadchurch (2015), que mereció otro álbum, el sentido Broadchurch: The Final Chapter (2017).
Entre ambos, le entró a la serie de mezclas conocida como LateNightTales (2016) y desarrolló el proyecto Island Songs (2016), en el que recorrió durante siete semanas diversos sitios de su país para grabar una canción y un video junto con artistas locales, dirigido por su añejo compañero Baldvin Z: en efecto, mientras se despliegan las piezas con invitados múltiples, uno recorre las montañas fuertemente enverdecidas, los cuerpos de agua de cristalina superficie que reciben con las moléculas abiertas la caída de las cascadas, las formaciones rocosas de eterna conformación y las auroras boreales de formas imposibles, adornando el cielo oscuro.
Presentó el sutil re:member (2018), con todo y el sentido de la aventura a través del uso de pianos arreglados, él tocando en vivo y un software innovador llamado Stratus, que se puede apreciar en Saman y el corte ídem, entre otros; este mismo año colaboró nuevamente con su amigo Baldvin Z en el filme Lof mér að falla (2018), sobre la permanencia de la adicción a través de los años. Compuso el score para el documental Chasing the Present (Waters, 2019), siguiendo un proceso de autoconocimiento para el cual la música contribuye de manera sustantiva, y el tema de la serie Defending Jacob (2020).
De ahí, firmó el introspectivo Some Kind of Peace (2020), encontrando comunión en las colaboraciones del inglés Bonobo, la cantante islandesa JFDR, brindándonos sosiego con su atemperada voz, y el cantautor teutón Josin, quienes se sumaron a este viaje reflexivo en busca de un estado mental que bien puede irse construyendo en el camino; continuó con la partitura para el drama familiar Les Intranquilles (Lafosse, 2021) y el EP The Invisible (2021), acentuando la profundidad en las cuerdas como si desde un microcosmos oculto para los ojos, proviniera un respiro anunciatorio.