DISFRUTES COTIDIANOS
Música cervantina [III]: Attacca Quartet • Fernando Cuevas
Fernando Cuevas
Con un prestigio rápidamente construido y de amplia actividad tanto en presentaciones y conciertos como en grabaciones, este cuarteto fue formado por compañeros de la prestigiosa escuela de Juilliard en el 2003, así nombrado por la búsqueda en el diccionario empezando por la primera letra y llegando a la palabra que bien los define como asociación musical: atrevidos y unidos ataques para romper barreras entre los géneros y las épocas, lanzando avanzadas para explorar nuevos territorios sustentados en su finamente entretejido virtuosismo que igual nos lleva a parajes que ahondan la introspección que a los de carácter más volcánico, según el énfasis y los autores considerados. Debutaron en el Carnegie Hall en el 2007.
Está conformado por la violinista y pedagoga Amy Schroeder, fundadora del cuarteto, docente de niños, jóvenes y adultos y colaboradora en varias orquestas como la de Búfalo, en donde creció y en las que ha puesto todo su talento interpretativo que alcanza tesituras exquisitas, navegando entre la técnica depurada y la inspiración, también reflejadas en el dueto The Schroeder Umansky, integrado junto con su esposo, Felix Umansky. Por su parte, el otro violín es responsabilidad del también compositor Domenic Salerni, reciente adquisición del cuarteto y cuya variedad de participaciones dan cuenta de su versatilidad, que lo ha llevado a tocar con diversas orquestas y grupos de cámara, formando parte del Vega Quartet entre 2010 y el 2016 y del Dalí Quartet del 2016 al 2020.
Nathan Schram se encarga de la viola y además de participar en diversas agrupaciones clásicas, ha tocado con músicos populares como Björk, Sting, David Crosby, Becca Stevens, David Byrne, Trey Anastasio, Joshua Bell y Simon Rattle, por mencionar algunos. Su activismo lo plasma en su proyecto Musicambia, a través del cual lleva música a las prisiones a lo largo de los Estados Unidos y a otras naciones. Por su parte, el chelista y compositor Andrew Yee ganó reconocimiento por sus interpretaciones de The Protecting Veil de John Taverner y Don Quixote de Strauss; tiene el proyecto llamado Halfie, orientado al apoyo de personas de diferentes razas y no binarias que han sufrido exclusión y discriminación. El violonchelista Luke Fleming y la violinista Keiko Tokunaga pararticiparon en la fundación del ensamble.
Presentaron Janáček / Mendelssohn (2010), como para encender motores con este par de compositores clave y destacando ciertos elementos comunes en las estructuras compositivas; vendría la obra Fellow Traveler. The Complete Strings Quartet Works of John Adams (2013), retomando a uno de los músicos más importantes del siglo XX y sus desafiantes estructuras armónicas para retroceder en el tiempo con Haydn: Seven Last Words (2015), haciendo referencia a las palabras de Cristo y con la destacada participación de Andrew Yee, en tanto que un año después culminaron un proyecto que consistió en tocar los 68 cuartetos de cuerda de este gigante de la música. Desde entonces mostraron el talento para combinar la suspensión y el prolongamiento del sonido, jugando con armonías de énfasis tímbrico con un particular sabor a tradición con miras al futuro.
Vinieron un conjunto de colaboraciones y felices encuentros auditivos. En Songlines (2017) hicieron mancuerna con el entonces debutante compositor Michael Ippolito para tensar el drama y el lirismo en los cuartetos No. 2 y No. 3; participaron en Aging Magician (2017) en conjunto con Rinde Eckert y el Brooklyn Youth Chorus. Hicieron equipo con la profesora y pianista Jeanne Golan para grabar Weinberg: Piano Quintet, Piano Sonatina & Cello Sonata No. 2 (2018), mostrando capacidad de adaptación para convivir con otro tipo de alineamiento y sosteniendo las escapadas pianísticas, como si de cómplices se tratara para darle vida a las piezas del compositor polaco-ruso.
El premiado y caleidoscópico Orange (2019), de múltiples elevaciones, fue la primera conjunción con la notable compositora, violinista y cantante estadounidense Caroline Shaw, de quien grabaron también Evergreen (2022), entre ensayos y partículas elementales puestas en movimiento a través de esas cuerdas elásticas que se yuxtaponen y complementan según el estado natural del tiempo, de pronto alterado por la folkie voz de la autora. Participaron en el álbum Reinaldo Moya: Hearing It Getting Dark(2020) junto con Latitude 49 y Francesca Anderegg, interpretando las tres partes de la inquietante composición titular, mientras que en Real Life (2021), rompieron el molde y apostaron por un eclecticismo que se introduce en la electrónica alternativa de Flying Lotus, Louis Cole, Mid-Air Thief, Squarepusher y Deadalus, acercándose a otras formas musicales de carácter más popular y contemporáneo, como poniendo los pies en la tierra y las cuerdas en poliédricos contextos tangibles.
Of All Joys (2021) propone un fascinante viaje del minimalismo al romanticismo que inicia y termina con los paisajes espirituales de Arvo Pärt, (Summa, Fratres), trasladándose siglos atrás con el italiano Luca Marenzio (Solo e pensoso) y hacer una parada reflexiva a cargo de los ingleses John Dowland (Flow My Tears [Lachrimae]) y Orlando Gibbons (Fantasia a 6 in D Minor), para continuar de vuelta a un tiempo más cercano con el envolvente Mishima, el cuarteto de cuerdas no. 3 de Philip Glass y sus seis cíclicos movimientos, regresando con arreglos para cuarteto de cuerdas de Miserere, composición de Gregorio Allegri; de Weep O Mine Eyes de John Bennet y de Ego flos campi a 7 de Jacobus Clemens non Papa. Presentaron Becca Stevens and Attacca Quartet (2022), muy bien acompañados por esta entrañable vocalista que navega entre el jazz, el indie y el folk, aquí cobijada por las cuerdas que se entrelazan con su canto en coloridas formas.