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Tachas 583 • Películas medallistas: Cine olímpico [I] • Fernando Cuevas

Fernando Cuevas

The First Olympics- Athens 1896
The First Olympics- Athens 1896
Tachas 583 • Películas medallistas: Cine olímpico [I] • Fernando Cuevas

Una breve mirada a filmes que se han ocupado de esta justa deportiva en su celebración veraniega (los de Invierno y paraolímpicos darían para otro texto), cuyo origen como más o menos la conocemos, se puede revisar en The First Olympics: Athens 1896 (Rakoff, 1984), ilustrativa miniserie en la que se recrea el proceso y los prolegómenos de la primera olimpiada moderna con el espíritu olímpico más o menos intacto, antes de enfrentarse a marcas voraces, poderes mediáticos metiendo las narices en todo, sustancias prohibidas, sexismo y racismo, decisiones políticas excluyentes y boicots, que a pesar de todo, no han logrado apagar el pebetero. 

De Estocolmo a Munich

Uno de los primeros documentos visuales, recién restaurado y dirigido por Adrian Wood, es The Games of the V Olympiad Stockholm, 1912 (Suecia-Suiza, 1912), en el que se da cuenta de las competencias desarrolladas de manera abarcadora. En el corto The Olympic Games As They Were Practiced In Ancient (Francia, 1924), de título más largo que su duración, se presenta una breve muestra de los orígenes lúdicos de la justa y fue realizado en el contexto de los juegos parisinos que quedaron retratados en Los juegos olímpicos en París, 1924 (de Rovera, 1925). 

Memorable resultó también el clásico Carros de Fuego (Hudson, 1981), historia centrada en la Olimpiada de París en 1924, donde un corredor judío y otro cristiano se enfrentan a sus propias convicciones y a las presiones dentro del contingente inglés: ahí quedan las imágenes de los atletas corriendo en la playa mientras se escucha la clásica partitura de Vangelis (secuencia aprovechada en la inauguración de Londres para insertar jocosamente a Mr. Bean). 

En clave de comedia familiar y recuperando a la Pandilla, protagonista de varios filmes y formada por un grupo de niños pobres, el corto Olympic Games (McGowan, 1927), fue uno de los primeros filmes de ficción sobre la justa deportiva, mientras que siguió la producción de documentales con Los juegos olímpicos en Amsterdam, 1928 (Prager, 1928), alcanzando su la cumbre del cine deportivo con la obra maestra Olimpíada (1938), un imponente documento visual de la genial y cuestionada por partes iguales Leni Riefenstahl, brillante directora que carga con el estigma de haber servido al régimen Nazi. Dividida en dos partes, El festival de los pueblos y El festival de la belleza, el film navega entre la propaganda y la poética del movimiento, con un inusual despliegue técnico y una plástica imponente.  

La cinta consolidó la tradición de que cada celebración contara con su propio documental, realizados por grandes directores: XIVth Olympiad, The Glory of Sport (Knight, 1948), realizados en Londres; Where the World Meets / World and Glory (Leminem, 1952 /1953) y Olympia 52 (Marker, 1952) sobre el certamen en Helsinki: este par de eventos se retoman también en el docudrama The Bob Mathias Story (Lyon, 1954), donde el ganador a los 17 años del decatlón en la capital inglesa y después en la ciudad finlandesa, se interpreta a sí mismo.

Se presentaron Juegos olímpicos, 1956 (Whitchurch, 1956) y The Melbourne Render-Vouz (Lucot, 1957),  acerca de las acciones en la ciudad australiana; La gran Olimpiada (Marcellini, 1960), celebrada en Roma; Olimpiada de Tokyo, 1964 (Ichikawa, 1964), contexto en el que se desarrolló Running Brave (Everett, 1983), acerca de la vida de Billy Mills, ganador de la medalla de oro en los 10,000, así como la comedia Apartamento para tres (Walters, 1966). Alberto Isaac consiguió integrar un sólido y amplio filme sobre la justa celebrada en 1968, titulado Olimpiada en México (1969), que respondió a una lógica triunfalista, obviando ciertos temas incómodos desde la perspectiva política; Fuego olímpico (Soto, 2018) es un cortometraje en el que se retoma a la primera mujer en encender la llama, justamente en el certamen celebrado en la Ciudad de México, al que aspira asistir un joven corredor español en El mejor del mundo (Coll, 1970). 

Por su parte, La prueba del valor (The Games, Winner, 1970) se centra en el proceso de preparación de cuatro corredores de diferentes nacionalidades que participarían en el Maratón: las motivaciones y condiciones personales, los contrastantes entornos y el adecuado desarrollo de los personajes, consiguen hacer de esta cinta un certero retrato de cómo se construyen los anhelos desde la perspectiva de los atletas y a qué presiones pueden estar sometidos. 

El propio Ichikawa, junto a Forman, Lelouch, Schlesinger, Ozerov, Penn, Pfleghar y Zetterling contribuyeron con sendos segmento para darle diversas lecturas a la Olimpiada de Munich en Vision of Eight (1972), a la memoria de los atletas judíos asesinados. Steven Spielberg, por su parte, recuperó justamente en Munich (2005) este crimen perpretado por el grupo Septiembre Negro, ocurrido en los juegos olímpicos de 1972, provocando la sistemática venganza de los israelitas, evento recreado en 21 horas en Munich (Graham, 1976) con William Holden como el policía en jefe. En este contexto, también están el par de cintas sobre Steve Prefontaine: Sin límites (Towne, 1998) y Prefontaine (James, 1997), participante en aquellos juegos y que falleciera de manera prematura a los 24 años.

De Montreal a Tokyo

Jean-Claude Lebrecque dirigió Juegos de la XXI Olimpiada (1977), filme oficial de la celebración en Montreal 1976, en cuyo contexto se ubica Running (Stern, 1979), donde Michael Douglas interpretó a un veterano corredor cargado de problemas que busca competir en la justa. Un desconocido Michael Mann dirigió un telefilm titulado La milla de Jericó (1979), sobre un condenado a cadena perpetua que encuentra en el acto de correr una escapatoria a su situación y una oportunidad para participar en una olimpiada. 

El atleta indoamericano de triste desenlace, quedó capturado en Jim Thorpe. All American (1952), cinta dirigida por Michael Curtiz con la interpretación de Burt Lancaster, en la que se planteó el ascenso y caída de este mítico atleta que terminó solo y en la ruina. Las imparables velocistas Wilma Rudolph y Gail Devers, así como Roger Bannister, primero en recorrer la distancia de una milla en menos de cuatro minutos, merecieron sus respectivas películas: Wilma (Greenspan, 1977), Corre por el sueño (Barnette, 1996) y La milla en cuatro minutos (Goddard, 1988).

En Doble triunfo (Forbes, 1978), secuela de Fuego de juventud (Brown, 1944), una huérfana aspira a participar en las pruebas de equitación de los juegos, mientras que Personal Best (Towne, 1982), transcurre entre amoríos y entrenamientos para los Juegos de 1980, para los que un doctor neo-nazi experimenta con su hija en La chica de oro (Sargent, 1979) y así convertirla en súper atleta. Yuri Ozerov fue el responsable de ¡Salve deporte, tú eres la paz! (1980) documento sobre el certamen desarrollado en Moscú con todo y el boicot estadounidense y la guerra fría en pleno, que ahora se puede contrastar con 16 días de gloria (1984), dirigido por Bud Greenspan y en el que se capturan las acciones de los juegos en Los Ángeles en 1984. Olimpiada 40 (Kotkowski, 1980), en tanto, revisa los juegos realizados en la clandestinidad en un campo en Polonia durante la II Guerra Mundial.

Seúl 88: los juegos de la XXIV Olimpiada (Kwang-Soo, 1988) dejó constancia de aquellos juegos, también revisados en Hand in Hand (Kwon.taek, 1989), mientras que Carlos Saura dirigió Maratón (1993), un recorrido de los juegos de Barcelona 1992 con la mítica carrera como centro de atención, también revisada en La batalla de maratón (Tourner, 1959), significativa cinta para rastrear sus orígenes, y que también sirve como temática principal al sólido documental El espíritu del maratón (Dunham, 2007). Greenspan volvió encargarse de la película para los juegos de 1996 titulada Atlanta: Gloria olímpica (1997) y ya encarrerado, dirigió Sydney 2000: Olympics (2000), en compañía de Thayer e Squicciarini, y se siguió con Athens 2004: Stories from Olympic Glory (2004).

Perfect Body (Barr, 1997) exploró la tentación del uso de sustancias ilegales para tener el peso adecuado y poder formar parte del equipo olímpico. El gran realizador Zhang Yimou se encargó de la ceremonia que retrató en Beijing 2008 Olympics Games Opening Ceremony (2008), juegos recuperados también en Everlasting Flame (Jun Gu, 2019), ya centrado en las acciones, mientras que en el corto Faster, Higher (Susan Pui San Lock, 2008), una videoinstalación de alcance experimental, se exploran temáticas culturales y políticas relacionadas con China y los juegos. Por su parte, Carolina Rowland se encargó de dirigir The Official Film of the London 2012 Olympic Games(2012). 

En clave de comedia y recuperando a los simpáticos personajes de historieta, se filmó Astérix en los juegos olímpicos (Forestier y Langmann, 2008), en tanto Angelina Jolie presentó la vida Louis Zamperini en Inquebrantable(2014), interpretado por Jack O’Connell, corredor y combatiente en la II Guerra Mundial; por su parte, Bennet Miller entregó Foxcatcher (2014), un gran retrato del equipo de lucha que intentaba formar el siniestro John Du Pont, reclutando a dos medallistas olímpicos: notables actuaciones y oscura puesta en escena. La historia de Jesse Owens (Irving, 1984) y El triunfo del espíritu (Hopkins, 2016), retomaron la fascinante vida de aquel atleta que mostró, por si hiciera falta, el absurdo de la superioridad aria, y George Clooney realizó The Boys in the Boat (2023), de cómo se formó el equipo de remo de la Universidad de Washington para competir en los olímpicos de Berlín.

Días de tregua (2016), fue el filme del magno evento en Río de Janeiro 2016 que corrió a cargo de Breno Silveira, liderando a un amplio equipo fílmico, contexto en el que se presenta Las nadadoras (Sally El Hossaini, 2022) sigue a dos jóvenes que huyen heroicamente de Siria para pedir refugio en Grecia de ahí participar en esta olimpiada: en el trayecto. Official Film of the Tokyo 2020 Olympic Games (2020) fue dirigida con la sensibilidad acostumbrada por Naomi Kawase, justo en tiempos de pandemia. El tema del abuso se vio reflejado en La caída (2022), filme realizado por Lucía Puenzo en el ámbito de los clavados del equipo femenil de México, en el documental At the Heart of Gold(Erin Lee Carr, 2019) y en la serie Simone Biles vuelve a volar (2024), ambas alrededor del equipo estadounidense de gimnasia.

Sirva este minimaratón filmolímpico para celebrar los juegos que, al menos durante un par de semanas y cacho, nos muestran otra cara de la humanidad, una mucho más orgullosa que la que tenemos acostumbrada.

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