POESÍA
Tachas 608 • Nodriza • Aurelio Arturo
Aurelio Arturo

Mi nodriza era negra y como estrellas de plata
le brillaban los ojos húmedos en la sombra:
su saliva melodiosa y sus manos palomas mágicas.
¿O era ella la noche, con su par de lunas moradas?
¿Por qué ya no me arrullas, oh noche mía amorosa,
en el valle de yerbas tibias de tu regazo?
En mi silencio a veces aflora fugitiva
una palabra tuya, húmeda de tu aliento,
y cantan las primaveras y su fiebre dormida
quema mi corazón en ese solo pétalo.
Una noche lejana se llegó hasta mi lecho,
una silueta hermosa, esbelta, y en la frente
me besó largamente, como tú: ¿o era acaso
una brisa furtiva que desde tus relatos
venía en puntas de pie y entre sedas ardientes?
Tú que hiciste a mi lado un trecho de la vía,
¿te acuerdas de ese viento lento, dulce aura,
de canciones y rosas en un país de aromas,
te acuerdas de esos viajes bordeados de fábulas?
***
Aurelio Arturo (La Unión, Nariño, Colombia. 1906) En 1926 inicia sus estudios de derecho en la Universidad Externado de Colombia, donde obtiene su título de doctor en derecho en 1937, siendo rector el maestro Ricardo Hinestrosa Daza. Alejado de los corrillos literarios e inédito, Aurelio Arturo combinó su lento trabajo poético, de lectura, creación y traducción (conoció en especial a los poetas contemporáneos de lengua inglesa), con sus labores como abogado, independiente al comienzo y luego funcionario de la Rama Judicial. En 1945 publica por primera vez en la revista de la Universidad Nacional Morada al sur. Fue juez, fiscal, magistrado del Tribunal Administrativo de Nariño, del Tribunal Superior de Popayán y de Bogotá, y su último cargo fue el de magistrado del Tribunal Superior Militar en Bogotá. En 1963 sale la primera edición del libro Morada al sur publicada por el Ministerio de Educación Nacional, que corresponde al número 7 de esta colección y en el mismo año, obtiene el premio nacional de poesía Guillermo Valencia. Muere repentinamente el sábado 23 de noviembre de 1974 en Bogotá.