El dragón sobrevuela SAPICA

Una a una, el proyecto chino del “Dragon Mart”, en Cancún, ha ganado a los industriales nacionales las batallas de la guerra que emprendió para inundar de productos orientales -entre ellos calzado-, al mercado mexicano.

Ya tiene, como todo lo indicaba, la anhelada licencia de construcción: la Sala Constitucional y Administrativa con sede en Chetumal ordena al municipio de Benito Juárez, resolver de manera afirmativa la solicitud del permiso de construcción que hizo el proyecto comercial “Dragon Mart, Cancún”.

La autoridad municipal, casualmente, excedió el plazo legal para su respuesta y abrió la puerta a la resolución del juez, en ese sentido. Antes, el Dragón había logrado la aprobación del comité técnico ordenado por el gobierno local; obtenido las licencias ambientales y hasta la venia del Instituto Nacional de Antropología e Historia, el INAH.

La sentencia, establece que el Ayuntamiento no se sujetó al plazo de 45 días hábiles previsto en el Reglamento de Procedimientos Administrativos del municipio de Benito Juárez, así que pese a la negativa a la licencia de construcción emitida el 24 de abril, no fue legalmente notificada dentro del plazo obligado.

El veredicto del juez es inatacable, pero el Ayuntamiento de Benito Juárez se encierra en el discurso de apelar el fallo. El “Dragon Mart, Cancún” es un proyecto comercial a desarrollar sobre 557 hectáreas. Prevé la construcción de 3 mil 40 locales comerciales, dos almacenes y una plaza, además de 722 viviendas en las que vivirán unas dos mil personas de origen chino.

Aquí insistimos en más de una ocasión, en que mientras los empresarios de León, específicamente los del calzado, se envolvían en los rollos de los políticos, el Dragón avanzaba de manera taimada.

Los industriales se reunieron primero con una mesa plural de legisladores federales por Guanajuato, que les dieron todo su apoyo verbal -exclusivamente-, y no se volvieron a sentar; vino el senador, Juan Carlos Romero Hicks, a decirles que el “Dragon Mart”, era sólo humo; y a renglón seguido, el secretario federal de Economía, Ildelfonso Guajardo, les repitió la dosis.

Con Ildelfonso, se reunieron incluso tanto el gobernador, Miguel Márquez, como el secretario de Desarrollo Económico, Héctor López, para externarle la preocupación del empresariado guanajuatense.

Eso sí, Guajardo advirtió que de continuarse el proyecto, lo suyo, sería vigilar su desempeño y obligarles, como a todos, al cumplimiento de la ley, porque para cancelarlo, pues no tiene atribuciones.

Hace un mes, el 31 de julio, apuntamos aquí que apenas la coalición PRI/PVEM/Nueva Alianza, le quitó al PRD la alcaldía de Benito Juárez -Cancún-, en Quintana Roo, el “Dragon Mart”, resurgía y arreciaba su campaña publicitaria, con espectaculares en los que presumen: “Aquí se generarán 8 mil 500 empleos. Que no te cuenten cuentos chinos. Infórmate”.

Los capitanes del Consejo Coordinador Empresarial de León y de la Ciceg, han ido de puerta en puerta escuchando respaldos; la Concamin nacional, expresa públicamente su rechazo al proyecto chino; los legisladores federales de las izquierdas, llevaron el punto al seno del Congreso de la Unión; los representantes populares por Guanajuato, priistas y panistas, hicieron mutis . . . , y el Dragón da ahora un salto enorme.

El martes por la tarde, el gobierno de Benito Juárez, en Quintana Roo, difundía un comunicado con la resolución del juez -aquí ya estaban escritos los discursos para la inauguración del Sapica, ayer por la mañana-, acto al que el secretario federal de Economía, envió a un director de área.

El presidente de la Cámara de la Industria del Calzado del estado de Guanajuato, la Ciceg, Ysmael López, se concretó en su discurso a solicitar al Gobierno Federal que revise las reglas para apoyar los proyectos de las empresas zapateras, sobre todo cuando se trata de Emprendedores.

Ysmael estableció que es injusta la competencia con otros demandantes de capital, que no generan la cantidad de empleos que el sector calzado, sí.

Mientras, el Dragón chino, toma vuelo.

Papelito habla

Todo parece indicar que en esta ocasión al que se “chamaquearon” fue al diablo, que se suponía sabía más por viejo.

Es el caso del dirigente panista, Alfredo Ling, y su exabrupto al afirmar que Óscar Pons González, el director de Desarrollo Urbano del Municipio, carecía de las prendas académicas necesarias para soportar esa responsabilidad.

Resulta que el funcionario del gabinete de la alcaldesa, Bárbara Botello, no únicamente acreditó con suficiencia el requerimiento de la Contraloría municipal, a cargo, dicho sea de paso, de un panista, Alberto Padilla, sino que abundan los testimonios, oficios y designaciones de panistas en favor del propio Pons González.

Ya apuntábamos aquí, que Óscar Pons González, se desempeñó como presidente del Consejo del Instituto Municipal de la Vivienda, el IMPLAN, durante la administración panista del alcalde, Vicente Guerrero Reynoso.

Pues bien, Pons hizo llegar al contralor Padilla, el título que expide a su nombre “The Corium College”, con el grado de “Bachelor of Science in Leather Technology”. El documento se expide el 16 de noviembre de 1979. Northampton UK. Lo firma D. Whittaker. Director of Studies.

Si usted necesita una confirmación a su inglés y le da una oportunidad a Wikipedia, encontrará que respecto a México, “Bachelor of Science”, es el equivalente al título universitario.

Ahí no para la diversión. El 10 de julio de 1992, el entonces gobernador de Guanajuato, el panista Carlos Medina Plascencia, se dirige al “Ingeniero, Óscar Pons González” al otorgarle el nombramiento -”Considerando las cualidades que lo distinguen”- como Vocal del Consejo de la Coordinadora de Fomento al Comercio Exterior, la COFOCE.

Así, pues, ahora el contralor panista, Alberto Padilla -quien además desmiente a Ling, también en su acusación de nepotismo a Bárbara Botello, por reclutar como asistente a una pariente en quinto grado, no en cuarto, que sí restringe la Ley-, y hasta un exgobernador panista, Carlos Medina -desde hace 20 años-, reconocen aptitudes en Pons González.

Así que Ling, pronto se fue en banda. Lo dicho: esos eran los modos de las oposiciones de la temporada pasada.

La Jaula

Pues, sí. Escribimos aquí el domingo que una vez que el Congreso federal resolviera los términos de la reforma al Instituto Federal de Acceso a la Información, el lFAI, aquí los diputados locales comenzarían a hacer lo propio con el Instituto de Acceso a la Información Pública, el IACIP, y con las iniciativas de leyes de transparencia que tienen en el cajón.

Ayer tuvieron su mesa técnica, para el análisis de la iniciativa de Ley de Transparencia y Acceso a la Información Pública para el Estado y los Municipios de Guanajuato, que envió el gobernador Miguel Márquez. Lo importante lo dejaron para después:

En sesión de la comisión, se discutirá la integración y el proceso para la designación de los consejeros del Instituto de Acceso a la Información Pública, el IACIP. No pusieron fecha.

Los diputados también invirtieron su tiempo, valiosísimo, discutiendo si piden o no la identificación del solicitante de la información, que es pública, en el momento en el que se le entregue. Ah, que si resuelven condicionar la entrega a la identificación, será para promover la responsabilidad. Qué listos.

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