El Evangelio Según • Paquita de del barrio • Víctor Hugo Pérez Nieto

“Desde que a Shakira la dejó Piqué, ya se ha vuelto la nueva Paquita la del Barrio…”
El Evangelio Según • Paquita de del barrio • Víctor Hugo Pérez Nieto

Desde que a Shakira la dejó Piqué, ya se ha vuelto la nueva Paquita la del Barrio. Lejos quedó la autora de “antología”. Cambió el color de cabello, se tuneó el cuerpo y tomó el papel de la hembrista despechada que no entiende que el hombre se rige por cuestiones más naturales que los esquemas sociales.

A las mujeres de hoy día las preparan para ser varones. 

Las nuevas reglas que impone el Nuevo Orden Mundial les engaña haciéndoles creer que al empoderarse y ganar mucho dinero van a ser más amadas, admiradas e invulnerables a la infidelidad, y oh sorpresa: llegan solas a una edad a la que biológicamente ya tienen limitaciones para ser madres, y por no escuchar las lecciones de la abuela, porque la vieja era muy anticuada y por eso criópuros machos, terminan sus días infelices (pueden estar casadas, solteras o divorciadas, pero el futuro no fue lo que les prometieron), y llenas de adicciones a los ansiolíticos y el alcohol para llenar sus huecos afectivos. Eso sí, le rindieron su cuota como obreras al sistema capitalista a costa de hijos, familia y felicidad.

Mi abuelo, QPD,  me preguntaba cada que me veía desde niño: «¿Qué debe traer siempre un hombre mijo?», Y yo le contestaba: «su pistola, su navaja y su fajo de billetes,abuelo». Lo recuerdo de guayabera, y siempre debajo de ella, fajada su 45 ACP Copa de Oro.

Falleció cuando yo tenía apenas 14 años, pero entre él y mi padre me dejaron grandes enseñanzas que les sigo agradeciendo, aunque desde los años 70’ está anticonstitucionalmente prohibida la portación de armas para la defensa y los fajos de billetes son cada día más escasos, pero se entiende la alegoría.

A mí me dijeron que el nazismo era malo y hoy reciben a los nazis en la Casa Blanca y los arman en Ucrania. También aprendí que había roles definidos para el hombre y la mujer, pero la progesterona y la testosterona cambiaron de bando desde antes que Shakira compusiera el tema de la loba y el gato. 

Hasta a un servidor, a sus recientes 50 primaveras lo llegan a confundir. Luego caigo a la cuenta que todo esto se trata de modas apegadas siempre a una doble moral.

Les voy a poner un ejemplo:

Hoy todos los hipsters comen orgánico y pagan el triple del precio por los productos del supermercado, sólo porque la gallinita que van a comer, hasta antes de ser sacrificada para convertirse en caldo, estuvo pastando libre en el corral. ¡Oh!, pero eso sí, se ofenden si te gusta la cacería para auto proveerte de alimentos, y hasta pretenden que se prohíban las actividades cinegéticas. Yo les pregunto: ¿Hay algo más abrumadoramente orgánico que una güilota alimentada con semillas de la sierra o un venado del monte?

A los pocos hombres que quedamos que somos proveedores, que nos gusta la belleza de una mujer joven,“el Casio”, protegemos a nuestras familias a costa de nuestra propia vida, comemos quesadillas de queso, no conocemos otro pozole más que el de cerdo y salimos a cazar un jabalí salvaje para hacerlo en carnitas, son a los que Shakira “la loba” nos dice “gatos”.

Si somos gatos, pero no domésticos, sino gatos monteses, y si un jaguar se encuentra a una venadita o a una loba, alas mismas que por instinto se desayuna. Él no es Dios para perdonar.

Entonces, hoy, para ser políticamente correcto y tener éxito en el amor, debes ser andrógino e ir a desenterrar una momia tuneada, buchona, y dejar que te mantenga, te grite, te pegue, y hasta te “facture”, lo que sea que a eso se refiera.

Creo que después de haber sido fan de Shakira, hoy me hace un poco más de gracia Paquita la del Barrio.