martes. 23.04.2024
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Lunes

Ralf Ortiz

Everybody needs love and adventure
Everybody needs cash to spend
Everybody needs love and affection
Everybody needs two or three friends

Justo al abrir la puerta de la calle, aspiré el humo del camión urbano que pasaba. ¡Carajo! Se me fue el camión. ¡Ahí viene otro! ¡Chido!

Me pongo los audífonos y volteo a ver al Rudy, mi carro, cubierto de polvo. Le tengo que arreglar ese asiento y ahorrarme lo del colectivo. Veo mi reflejo en el cristal de la oficina de al lado. No es cosa de narcisismo, hay que llegar presentable. Pero no en esa forma social donde las corbatas y el cabello corto son iguales a la decencia, más bien como ajustado a mis estándares y concepto muy personal del dandismo, ligeramente cholo y punk. Misión cumplida.

Presiono play, pero no es necesario ajustar el volumen porque siempre está hasta arriba. Quiero uno que llegue a 11, no sólo a 10. Es Cheap Trick en vivo cantando “Day Tripper”. Qué cosa perfecta. La chava que está en la esquina lleva audífonos también, pero no sé qué escucha y no me atrevo a adivinar.

Lo que me gusta del transporte público es poderme perder entre mis ruidos. “Beat On The Brat” de los Ramones llega con sincronía perfecta al tomar asiento. El ajetreo dentro del camión es como un slam en el cual participamos involuntariamente. Me pregunto si alguno de los enajenados va escuchando cosas como la Rondalla de Saltillo, de esas que no se prestan para el ritual violento de los baches y los conductores con prisas. ¿De qué tienen prisa estos güeyes?

De la parada del camión al colegio son un par de cuadras. Hay sonrisas para las señoras que barren la calle. Saludos de buenos días en lo oscuro de la mañana. Ya vamos en Rockpile.  Me quito un audífono. “¿No tiene frío, profe?” “Buenos días, poli”. Llego al colegio. Me vuelvo a colocar el ruido. Atravieso el patio, pero me detengo y saco el termo de café de la mochila. El sabor del tostado intenso me prende tanto como “Night Spots” de The Cars. Esta recopilación me quedó con madre.

Sale la monja, me toma por sorpresa, más por lo que me acabo de decir a mí mismo. Saludos a la Hermana Casilda, y un poco de mí sabe que me voy a ir al infierno por muchas cosas. ¡Y por pensar cosas así justo cuando sale la Hermana Casilda de la capilla!

La llave del salón requiere de un pequeño truco al girarla. Memoria muscular. ¿Así se dice, muscle memory? ¡Claro que sí, güey! Va la frase del día al pizarrón. Hay que evitar a Nick Drake para que no pierdan la esperanza tan morrillos, pero tampoco hay que darles falsas expectativas. Me decido por Human League porque justo voy en “Things That Dreams Are Made Of” y porque sí tira dos o tres netas.

“Buenos días maestra”. Silencio. No sé cómo es que esa maestra hace para llegar enojada todos los días. Además es bien potosina: no contesta el saludo. Nunca, nunca, nunca… a nadie. Me queda la certeza de que si escuchara una de mis recopilaciones y no las noticias en su carro color azul abuelita aburrida, llegaría de buenas.

Ya van llegando los chavos. Un vatillo se para enfrente de mí y mueve la boca. ¿Y ahora qué quiere este? Me quito los audífonos sólo para enterarme que quiere ir por papel para limpiarse la nariz. Guardo el MiniDisc. La clase de lunes a las siete es mortal para algunos, para casi todos ellos. Les digo que me recuerdan a Martin Luther King: ellos también tienen un sueño. El de él era de igualdad, el de ellos es del carajo.

Les pido que me digan –en inglés- algo bueno que les haya pasado en las últimas 24 horas. Y les digo que piensen en eso antes de que se rindan a la idea de que el lunes es fatal. Ya vamos a empezar. “¿Profe, qué fue algo chido que le pasó en las últimas 24 horas?” Le doy un trago al café.

¿Qué fue algo chido que me pasó en las últimas 24 horas? Todo desde que me levanté. Soy de la idea de que si en este mundo podrido no encuentras la música que te limpie el alma, no la vas a librar. “Profe, hoy se ve muy bien”. Cómo unas palabras tan sencillas le quitan el drama y el azote al lunes. Y en mi mente siguen cantando The Human League New York, Ice cream, TV, travel, good times.

Norman Wisdom, Joey, Johnny, Dee Dee, good times. Buenos tiempos.

***
Rafael Ortiz Aguirre
 (San Luis Potosí, 1963) es doctor en cool, punk añejo, musicómano sin cura, entusiasta de la lucha libre y el futbol americano y escritor pop. Ha trabajado en la radio, es profesor de inglés, escritor de cuentos cortos y chef amateur.

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