La curaduría –así como la conocemos ahora- es una práctica más o menos reciente. Durante muchos años en los museos se podía ver prácticamente lo mismo sin importar si se visitaban una o veinte veces y eso, que quizá formaba parte de su encanto, también hacía que muchas personas no volvieran jamás a visitar uno después de haber visto su exposición.

A partir de los años 80, los museos comenzaron a transformarse en lo que son hoy, entes casi vivos y en permanente transformación, ávidos de visitantes y turistas a los que, a partir de entonces, se decidió seducir por medio de exposiciones temporales, ofreciéndoles un motivo para las visitas frecuentes. Es entonces que la figura del curador surge como quien de parte del museo, galería o espacio de exposición, entabla un diálogo con el público, inicia una conversación diferente a la que siempre tuvo la institución, se esfuerza por hacer ver la obra desde perspectivas diferentes.

Muchas curadurías son exitosas porque la obra es reconocida, pero pocas veces pueden verse curadurías propositivas que repasen un acervo diverso en torno a un tema específico, pero éste es el caso afortunado de la más reciente exposición del Museo Nacional de Arte: Melancolia.

La melancolía, nos explican en la muestra, era uno de los cuatro humores que los antiguos griegos creían que determinaban el temperamento o el carácter de las personas, a la que llamaban bilis negra; y era también identificable con la nostalgia, la añoranza, la tristeza, la pérdida, la muerte y hasta la locura. Todos estos son temas del arte y muchos de ellos se encontraban plasmados en obra que ya formaba parte del acervo del Munal, pero que ahora se puede observar y comprender con la veladura de la melancolía.

El resultado es grato, es una exposición propositiva que vale mucho la pena ver, aunque hay algunos cuadros que son bastante parecidos a otros, y en algún momento la muestra se siente un tanto repetitiva, pero nos permite visitar algunos cuadros notables que normalmente no están a la vista del público y que forman parte de la colección del museo.

Muy recomendable.

Melancolía
04 abril - 09 julio 2017
MUSEO NACIONAL DE ARTE (MUNAL)
Tacuba 8, Centro Histórico.
Ciudad de México

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Gabriela Mosqueda (León, Guanajuato, 1986) es licenciada en Comunicación por la Universidad Iberoamericana León con Maestría en Museografía y Gestión de Exposiciones por el Instituto Superior de Arte de Madrid, España. Ha colaborado en museos estatales y federales, galerías y colecciones privadas, así como publicaciones de arte y diseño en Guanajuato y la Ciudad de México, donde actualmente vive y trabaja.

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