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Las Criptomonedas

Francisco Rangel

Las Criptomonedas

Hace unos días, la revista Wire publicaba que habían descubierto quién era el inventor del Bitcoin. Esto causó revuelo y algunas notas periodísticas, mas nadie aclaraba nada sobre lo que es dicha moneda. Así que habría que explicarlo y el cómo funciona. Por cierto, hay más opciones, y pueden ser una inversión viable, sabiendo algunas cosas. Este texto no pretende ser, de ninguna manera, una guía de inversión. Simplemente es un texto informativo sobre el funcionamiento de esta nueva economía basada en monedas virtuales.

¿Qué es la criptomoneda?

Empecemos con una definición: Una criptomoneda es un medio de intercambio digital que permite transar bienes y servicios, tanto físicos/reales como digitales/virtuales.

La diferencia entre un billete o moneda física y una criptomoneda es que esta última es un bien digital, que se almacena en un monedero electrónico. Se pueden utilizar casi un centenar de criptomonedas para comprar bienes y servicios, y cada una tiene una tasa de cambio −como las monedas “reales”−, dada por la percepción de valor de la comunidad que las usa.

Muchas veces utilizamos dinero digital sin darnos cuenta: al usar la tarjeta de débito o crédito para pagar. De esa manera funcionan las criptomonedas.

¿Cómo funcionan las criptomonedas?

Un ejemplo sería la mejor manera de exponerlo: supongamos que alguien tiene en un monedero electrónico de su computadora, Tablet o celular, cierta cantidad de criptomonedas. No sé, 50 bitcoins. Encuentra una oferta de un equipo de sonido en Estados Unidos, con un valor de 1000 dólares con los gastos de envío incluidos, y se da cuenta que también recibe bitcoins como pago. Siguiendo en la suposición, la tasa de cambio ese día es de 500 dólares por bitcoin, por lo que el equipo de sonido cuesta 2 bitcoins.

Lo que hace nuestro comprador es enviar desde su monedero electrónico los 2 bitcoins al monedero del vendedor. Esas dos criptomonedas se descuentan del monedero del comprador, y después de unos minutos se registran en el monedero del vendedor en USA. En pocos días llegará el equipo de sonido a la casa del comprador.

Al no usarse tarjeta de crédito, nadie cobró por la transacción. No hubo necesidad de suscribirse a Paypal ni usar cuentas bancarias. Tampoco se compartieron datos personales (CURP, INE, o cualquier documento de identidad); están a salvo. Lo más interesante es que no existen intermediarios ni comisiones.

Fuera de cuánto cueste un bitcoin (mil dólares o un centavo de dólar), éste fue utilizado como medio de intercambio por un bien físico, y se transó a la tasa de cambio del día. De la misma manera sería con cualquier criptomoneda.

Las innovaciones de las criptomonedas

La más importante, y en la que se basa la confianza en ellas, consiste en la descentralización del flujo e intercambio de dinero, al no requerir de un banco para hacer una transferencia a otra persona, ni tener que pagar comisiones costosas de las tarjetas.

En la globalización, las barreras al flujo de divisas son altas. Por ejemplo, una empresa de León, Guanajuato, quiere comprar en la India un proyecto de software para mejorar su automatización. Tendrían que ir al banco, llenar un sinfín de formularios, comprar dólares, pagar una comisión al banco, esperar varios días a que se concrete la transacción y comprobar que el dinero llegue a su destino. Esto, pensando que sea a la India, pues en países con altos controles cambiarios como Argentina, Grecia o Venezuela, lo vuelve una mezcla de infierno escrito por Kafka: El proceso de giro de divisas es lento, tortuoso y costoso.

Esta ventaja de transferencia descentralizada es muy funcional para los desarrolladores de productos o servicios web (el caso de los juegos, apps de paga, software y libros electrónicos), donde empresas como Paypal cobran una tasa promedio de 30 centavos de dólar por transacción, más una comisión de venta, por micropagos –menores a diez dólares−, que suele ser mayor al 30%. A esto se deberá aumentar el costo por utilizar plataformas como GooglePlay, Amazon o Itunes, quienes cobran otro 30% por el privilegio de venderles a sus clientes. Ya que estamos con ejemplos, si usted desarrolla una app cuyo valor es de 1 dólar en estas plataformas, y se lo pagan por Paypal, recibirá 30 centavos de dólar. ¿Valió la pena todo el trabajo?

También existen las empresas para realizar transferencias o giros de divisas, como WesternUnion, que en esencia son intermediarios cobrando altas comisiones por sus servicios y con demoras en la transferencia.

Otra de las ventajas innovadoras de usar criptodivisas es que evitan los riesgos asociados a las tarjetas de crédito: clonación, Phising y Pharming –términos asociados a la suplantación de identidad y el robo de información de datos personales−, pagar cuotas de manejo, etcétera.

En algunos casos, con escanear un código QR se hace la transferencia o con tecnología NFC, al pegar nuestro teléfono al de la persona a quien le vamos a pagar.

Lo que no funciona

Así como tienen un gran número de ventajas –Las criptomonedas actuales utilizan algoritmos matemáticos sofisticados (SHA-256) que hacen casi imposible cometer fraude con ellas−, también tienen desventajas.

  • Robo del monedero digital. Al igual que ocurriría con el dinero físico, es posible perder monedas cuando se pierde la billetera digital. Si un hacker tiene acceso al computador o celular en el que está instalado el monedero, puede transferir todas las monedas a otro monedero y dejar vacío el del usuario. Hay formas de protegerse de este riesgo; muchas de las personas que han invertido o ganado millones de dólares en bitcoin, tienen sus monederos en computadores que no están conectados a internet y/o hacen backup del monedero, el cual almacenan en memorias USB en cajas fuertes, y únicamente conectan sus computadores a internet cuando van a hacer una transacción. Otros medios para proteger los monederos son encriptar la billetera (poner una contraseña al monedero y encriptar las llaves) y en general tomar las medidas de protección tradicionales para proteger información bancaria, un buen antivirus, firewall, no usar software pirata ni navegar por páginas de dudosa procedencia, etcétera.
  • Alta fluctuación del valor de la moneda. La mayoría de las criptomonedas no dependen de una entidad central (banco central) que controle las fluctuaciones de valor. Esto hace que se especule; en el caso de los bitcoins es común ver un precio de mil dólares y al día siguiente caer a 600, para luego repuntar a 800, así que se puede ganar o perder mucho dinero en corto tiempo debido a la especulación. Es probable que a medida que el mercado de estas monedas madure y haya un mayor volumen, se reduzcan estas fluctuaciones y especulación.
  • Uso en mercados negros. Al ser de fácil circulación, el uso de las criptomonedas permite las actividades ilícitas. Evitar involucrarse en actos ilícitos es todo un reto para quienes manejan las “casas de cambio” virtuales.
  • Pérdida del monedero. Hay un caso famoso: una persona hizo minería de bitcoins hace unos años, dejo esas monedas en un pc viejo y lo botó a la basura, y luego se enteró que las bitcoins que tenía en esa PC valían más de 10 millones de dólares. Esto se hizo público y muchos se volcaron a la búsqueda del tesoro en los basureros de Londres. Para evitar algo así, lo mejor es hacer un backup del monedero y almacenarlo encriptado en un lugar seguro.
  • Consumo excesivo de electricidad. El uso de las criptomonedas requiere que personas en todo el mundo pongan a disposición de la red sus computadoras o servidores a cambio de algunas. Entre más rentable es la minería de monedas, más computadoras harán minería para ganar dinero, ocasionando un mayor gasto de electricidad. Las nuevas criptomonedas tienen el reto de incluir un componente ecológico en su esquema, como Solarcoin lo está haciendo.

 

¿Qué es la minería de Criptomonedas?

Para que las transferencias de monedas virtuales funcione entre personas, es necesaria una red de servidores que procesen dicha información, eviten los fraudes y mantengan el sistema funcionando. Esa labor la realizan Visa, MasterCard o American Express cuando una persona pasa su tarjeta de crédito o débito; la red privada de cualquiera de estas empresas valida la transacción. En el caso de las criptodivisas, cualquier persona pone su computadora al servicio de la red para que funcione el sistema. Por ello recibe de la red criptomonedas que salen del algoritmo. A estas personas que prestan dicho servicio se les conoce como mineros. Con eso ellos pueden comprar productos o cambiarlo por dinero tradicional.

Lo que se necesita para volverse “minero” es tener un equipo de cómputo especializado (ASIC), instalar un software específico para cada moneda y dejar que la máquina haga el trabajo. Con una computadora común, algo como una Mac Air i5 o i7, apenas se alcanzaría a producir 0.00001 bitcoins al día, y en un año apenas se habrían logrado unos cuantos centavos de dólar. Por eso ya no es negocio hacer minería de monedas como bitcoin o litecoin con computadoras personales.

Así que para ser minero hay que hacer una fuerte inversión, pero, gracias a la especulación, puede valer la pena.

Gracias al alza del bitcoin han aparecido varias monedas alternas (AltCoins). Algunas, como el LiteCoin, han alcanzado valoraciones de hasta 20 dólares. Otras, como el QuarkCoin, están en los centavos de dólar. Algunas aún no valen nada, como el caso del SolarCoin, que tiene muy pocos mineros, con algoritmos fáciles de correr y se pueden generar algunos cientos de monedas que algún día pueden tener algún valor.

Las principales Criptomonedas

Bitcoin. Si bien no fue la primera moneda virtual (antes estuvieron Digicash y eCash, pero no despegaron), sí ha sido la más famosa: aparece en los titulares del Wall Street Journal y en todos los principales periódicos financieros del mundo. Actualmente es casi imposible ganar dinero haciendo minería de bitcoins: se necesitan máquinas especializadas (miles de veces más rápidas que una pc). El problema ha consistido en que cuestan varios miles de dólares y las fechas de entrega por parte de los fabricantes no son confiables. Cuando el minero obtiene su ASIC, el algoritmo ha subido tanto su dificultad que las ganancias son pequeñas.

Lo único por lo que tiene valía todo este proceso es la especulación: hay días en que alcanza los mil dólares por unidad. Debido a su alta fluctuación es casi imposible saber su precio a futuro; unas fuentes dicen que ya llegó a su tope, y otras especulan que puede llegar a quinientos mil dólares la unidad. Mientras escribo esto, está en 449.77 a la compra y en 445.89 a la venta.

Hasta el momento, Bitcoin es la criptomoneda de referencia; las demás están atadas a la conversión con bitcoin. Será muy difícil suplantarla en el corto plazo. Sigue siendo una moneda especulativa, aunque varias personas ya han comprado diversos bienes inmuebles con ella.

Litecoin. Es la segunda criptodivisa con mayor valor y utilización. Al día de hoy ronda los 3.64 dólares; pero ha llegado a superar los 20.

Litecoin introdujo mejoras significativas sobre Bitcoin; usa el algoritmo Scrypt –diseñado para máquinas especilizadas (ASIC) de minería-, que obliga a usar grandes cantidades de memoria y procesamiento.

SolarCoin. Esta moneda incentiva la generación solar de electricidad. Según su dirección eletrónica, un solarcoin es igual a 1 MWh de energia solar. Por cada Megawatt generado con energía solar, se proporciona un solarcoin a quien la produce.

Se dice que el 97% de las monedas ha sido generado de esta manera y el porcentaje restante, vía minería con PC.

La empresa detrás de Solarcoin quizo posicionar la criptodivisa a 20 dólares por unidad. El día de hoy está en el mercado a 0.013735 de dólar.

A su favor conviene decir que se pueden produccir varios solarcoin por día con una PC sencilla. Aquí hay una posibilidad de ganar dinero a largo plazo.

MemoryCoin. Esta divisa está basada en el modelo de Litecoin, introduciendo una mejora adicional: por cada moneda que se genere y de cada transacción que se realice, se queda un poncentaje para los desarrolladores que incentiven su uso y/o hagan aplicaciones creativas. Algo así: si se hace una apliación para android que contribuya a ampliar la red de memorycoin, el desarrollador recibirá monedas por su contribución.

Si bien este incentivo puede crear una masa crítica para transformarla en un jugador importante, esto será a largo plazo, pues al día de hoy se encuentra en 0.003996 de dólar, existiendo 10,073,034 de memorycoins en la actualidad.

Quarkcoin. La mayoría de las criptodivisas tienen el pequeño problema de que tardan un aproximado de 10 minutos en confirmar la transacción (una nada en comparación con un giro). el Quarkcoin tiene a su favor que el tiempo de espera para la confirmación es de una media de treinta segundos. lo cual hace que muchas empresas vean con buenos ojos este sistema. Algunas de ellas suelen usar dólares, convertirlos en quarkcoins, hacer la transacción y el que los recibe los vuelve a cambiar a dólares. Las comisiones son mínimas, la transacción se realiza en minutos. Este proceso se conoce como backoffice y se está estandarizando en empresas medianas a nivel internacional.

Su valor en el mercado es de 0.003434 de dólar, con un activo de $857,230 en el mercado. Aún se puede ganar algo haciendo minería ahí.

Dogecoin. Lo que empezó como una broma se transformó en una moneda. Todo surgió en la idea de los Likes: los desarrolladores de Dogecoin usaron el meme más famoso del 2013 (el perro sonriente) y empezarón a hacer minería con un algoritmo bastante fácil de usar en una pc normal. Estos dogecoins se dan entre usuarios de foros como regedit, tanto a quienes hacen un buen artículo como a desarrolladores de juegos.

Sin embargo, es tal la cantidad de transacciones que tiene al día (superando por mucho al bitcoin o cualquier otra), que ya tiene valor en el mercado: 0.000155 de dólar, y subiendo poco a poco.

Una de las anécdotas curiosas se dio en Sochi 2014 con el equipo de Bobsleigh (trineo) de Jamaica. La cosa fue así: se hizo una colecta de dogecoins para dicho equipo y lo que parecía una broma obtuvo la nada despreciable cantidad de $20,000 dólares.

Ya podemos ir pensando que nuestras ideas más ociosas tienen algún valor. 

El Futuro para las criptodivisas

Tratar de precisar los movimientos de esta tecnología es bastante difícil, pero nos podemos quedar con lo que observan diferentes economistas en dicho campo. Ninguna de estas ideas es mía; están rondado por la red.

  • El movimiento de las criptomonedas no se va a detener; es probable que mute y cambie, pero esta tecnología es una realidad y llegó para quedarse.
  • Bitcoin seguirá a la cabeza en el corto y, probablemente, mediano plazo. A largo plazo podrá ser reemplazada por una moneda que le supere técnicamente y haya sorteado las dificultades actuales.
  • La moneda que se imponga a futuro deberá ser segura y rápida para confirmar transacciones.
  • ¿GoogleCoin, Kindlecoin, icoin? Los 3 grandes (Google, Amazon y Apple) saltarán al tren de las criptomonedas.
  • Visa, MasterCard, American Express, PayPal, WesternUnion, deberán reinventarse o desaparecer en el largo plazo.
  • Habrá regulación europea o norteamericana, y dará directrices a cumplir en futuras criptomonedas. Esas regulaciones se replicarán en otros países, llevando a una nueva generación de monedas que cumplan con ellas.
  • Habrá nuevos millonarios y quiebras asociadas a esta tecnología. Una buena analogía sería la teoría de las placas tectónicas: todo se está moviendo y seguirá moviéndose.
  • Al final, no acaecerá una criptomoneda única. Parecerá más un gran ecosistema con múltiples monedas intercambiables y fluctuantes entre sí.

 

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Francisco Rangel. (Celaya, Gto. 1975) Es padre de Familia y amo de casa. A ratos da clases, a ratos prefiere hacer de comer. Navajero con problemas de literatura, nunca al revés. Escucha música a puños y a puños vive. Gracias a su aburrimiento escribe y ha publicado un par de libros: Junkebox - Cartas a mi Hija (ICL, 2009) y Dios por Dios es Cuatro (Ediciones La Rana, 2010)