CUENTESÍA
Tachas 529 • Debajo de la escalera • Sergio Inestrosa
Sergio Inestrosa

Sergio Inestrosa
12:16 30/07/23
Cada vez que me metía debajo de la escalera y me tumbaba por horas boca arriba sobre una vieja colchoneta, podía mirar más o menos a gusto bajo uno de los escalones aquella lejana constelación llena de luz que de tanto mirarla terminaba por cegarme los ojos. Entonces cerraba los cansados ojos por unos segundos y al volverlos a abrir, si tenía suerte, veía algo que bien podría ser una flor disecada como esas que se meten entre las páginas de los libros y allí se olvidan por años. Un rato después, cansado de contemplar los detalles de aquella visión, volvía a cerrar los ojos y cuando los abría de nuevo, lleno de curiosidad, podía ver objetos diferentes, y así era cada vez que me metía debajo de aquella escalera mágica.